China busca luz verde de Europa para sus aviones comerciales
El país asiático busca certificar sus aeronaves de pasajeros para comenzar la competencia contra Boeing y Airbus.
El proyecto de China para ingresar a la competencia aerocomercial mundial gana, mes a mes, nuevos grados de velocidad. Con la apuesta centrada en la constructora estatal Comac (Commercial Aircraft Corporation of China Ltd), el anhelo del gigante asiático para comenzar la pulseada contra compañías occidentales parece estar más cerca.
En ese orden, la prensa china adelantó en los últimos días el inminente inicio del proceso de certificación europea del producto estrella, el C919, por parte de autoridades de la Unión Europea. El avión de fuselaje angosto es el proyecto más avanzado de fabricación china.
Pensado como competencia directa del Boeing 737 o los Airbus A320 y A321, el C919 ya surca los cielos chinos realizando vuelos de cabotaje para distintas compañías locales. Algo que podría expandirse en un futuro no muy lejano hacia afuera de las fronteras nacionales e incluso regionales.
En cuanto a su desarrollo, el C919 todavía no es un avión 100% chino. Un buen porcentaje de su integración proviene de Occidente, lo cual revela un proyecto que todavía se encuentra en sus primeras etapas. No obstante, su potencial atrajo la atención de las principales compañías mundiales ante el crecimiento de un nuevo producto de receta china.
En el orden local, Comac acumula más de 1000 pedidos por el C919 por parte de aerolíneas de la misma nacionalidad. Al respecto, el encargo más reciente fueron 100 unidades por parte de Air China, en costo en torno a los 10.000 millones de dólares.
Cabe destacar que el C919 cumple cerca de un año realizando vuelos comerciales internos. Para China, el desarrollo de la industria de construcción de aviones comerciales resulta fundamental si se tiene en cuenta que es uno de los flancos sancionables por parte de Occidente, tal y como ocurrió en Rusia.