Rossi: “No imagino un futuro que no sea de integración latinoamericana”
“Tenemos una mirada permanente sobre las fronteras y si se solicita colaboración, estamos disponibles”, respondió el ministro de Defensa, Agustín Rossi, al hacer referencia a las tensiones fronterizas impuestas por el crecimiento exponencial del coronavirus en Brasil -en Misiones- y en el sur, en las ciudades que se tocan con Chile.
No se trata de militarizar fronteras, sino de colaborar con la sociedad y las autoridades civiles con el despliegue de tropas y elementos necesarios para fortalecer sistemas de salud o de asistencia social, como ya está sucediendo activamente en Misiones. Sin embargo, a pedido del gobernador Oscar Herrera Ahuad podrían sumarse patrullajes en helicóptero de las extensas fronteras con Brasil, como capítulo especial de la mayor movilización militar en la Argentina desde la guerra de Malvinas.
La situación de Brasil es la que más preocupa, pero Rossi advierte que eso no debe frenar el trabajo conjunto entre las fuerzas de Defensa para enfrentar la pandemia. “No imagino un futuro que no sea de integración latinoamericana”, aseguró el ministro que estuvo en la mañana del miércoles en Posadas, donde visitó una cocina centralizada junto a Herrera Ahuad y el intendente Leonardo Stelatto.
El ministro reincidente -ocupó esa cartera en el último tramo del gobierno de Cristina Fernández- entiende que todavía no es tiempo de analizar el impacto político del coronavirus en la región, que exhibe marcadas diferencias en cuanto a la gestión del riesgo. Argentina adoptó medidas severas de prevención, lo mismo que Paraguay, mientras que Brasil y Chile mostraron condescendencia y Uruguay, con un territorio acotado, no impuso nunca una cuarentena.
Como contraste, Rossi reveló en una rueda de prensa que lidera un trabajo integrado con las carteras de Defensa de los países del Mercosur para coordinar esfuerzos contra la pandemia. “Es difícil hacer un pronóstico en un sistema tan desigual en un mundo con fronteras cerradas por la pandemia, a contramano de la integración. Pero en la mirada estratégica, el camino de Argentina es de integración y fortalecimiento latinoamericano, con mismos valores y objetivos. Eso lo hemos hecho en el ámbito de la Defensa. He hablado con los ministros de todo el Mercosur más Chile para una organización bilateral, porque entiendo que más allá de los vaivenes políticos de cada uno de los gobiernos, esto es algo que vale la pena fortalecerlo todo lo que se pueda”, explicó ante una pregunta de Economis.
Para Rossi, la pandemia del coronavirus puede dejar un residual positivo, de mejor valoración de las fuerzas armadas integradas al servicio de la sociedad. En estos momentos, en Argentina los 80 mil hombres de las fuerzas están movilizadas en alguna tarea de prevención.
Sin embargo, para eso se requerirá un mayor presupuesto y equipamiento. Para eso, Rossi busca la aprobación del Fondef, que impulsó siendo diputado, antes de ser nominado por Alberto Fernández como ministro. Los últimos camiones que se compraron para el Ejército, son de su gestión y ahora habrá una nueva licitación por 600 millones de pesos para modernizar la flota. Pero obviamente, eso no alcanza. Faltan aviones, barcos, tecnología y despliegue.
El Fondef se conforma con un monto inicial de 0,35 por ciento de los ingresos corrientes anuales, hasta alcanzar el 0,8 por ciento al cuarto año. Como parámetro, hoy la educación técnica se financia con el ,02 por ciento de los ingresos. Los recursos tendrán que ser afectados a la recuperación, modernización e incorporación de material para las Fuerzas Armadas y se conformarían con un paquete inicial de 14.000 millones de pesos para 2020, lo que generaría un fuerte impacto en la economía castrense. “No me detengo en el porcentaje, porque puede variar de acuerdo a la recaudación, pero es razonable”, definió Rossi.
La idea del fondo fue defendida incluso por los ex ministros de Defensa desde la recuperación de la democracia. Rossi aseguró que las decisiones de Defensa deben tomarse pensando en la defensa y no con un criterio de ajuste fiscal, que le reprochó al Gobierno de Mauricio Macri. De todos modos, elogió la compra de patrulleras oceánicas, aunque el primer pago lo deberá hacer la gestión de Fernández. “Hay otras inversiones cuestionables, como el recorte de unidades o la discontinuación de los programas vinculados al desarrollo del avión Pampa”, cuestionó. En cambio, ahora se retomó la refuncionalización de los Pucará, para incorporarlos a las patrullas fronterizas con un sistema de cámaras.
Para el ministro, la pandemia puede modificar la percepción de las fuerzas armadas y dejar resultados alentadores en una política de Estado de Defensa. “Muchas cosas van a quedar, como la ayuda humanitaria, porque seguramente habrá más pobreza. Por eso hablo de una revalorización de las fuerzas”, sentenció.
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