
Closs: “Si la crisis sigue, nos vamos a encontrar con yerbales abandonados”
El empresario y exgobernador de Misiones (2007-2015) Maurice Fabián Closs advirtió sobre la grave crisis que atraviesa el sector yerbatero y señaló que la única solución es establecer un precio que, “si bien no va a ser justo, por lo menos justifique que el productor corte la yerba”.
Durante la charla, Closs también se refirió a la política partidaria y aclaró que no aspira a ningún cargo electivo, ni a nivel provincial ni nacional. “Desde el llano, acompañaré a mi partido, el Frente Renovador de la Concordia, en la campaña proselitista con miras a los comicios del 8 de junio”, afirmó.
Un mercado en crisis
Closs calificó la situación del sector yerbatero como “muy mala”. Como es sabido, el mercado de la yerba mate se divide entre Misiones y Corrientes. En la primera predominan los pequeños y medianos molinos, además de cooperativas, mientras que en Corrientes el dominio del mercado está en manos de la empresa Las Marías y la cooperativa de Liebig, que concentran el 70% de la producción.
El gobierno correntino respalda la desregulación del sector. De hecho, semanas atrás, el ministro de Producción de Corrientes, Claudio Anselmo —exdirectivo de Las Marías—, declaró a Radio República de Posadas que apoya la desregulación del mercado yerbatero. En contraste, Misiones insiste en mantener la regulación de los precios de la hoja verde y canchada (estacionada).
Para Closs, la crisis yerbatera solo podrá resolverse estableciendo un precio que incentive al productor a seguir cosechando. “Hoy lo que está pasando es que lo que se está pagando no le conviene ni le compensa tanto esfuerzo. Si esta situación no se resuelve, vamos a terminar con yerbales abandonados”, advirtió.
El Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM) sugiere un costo de 356 pesos por kilo de hoja verde, sin incluir el 30% de rentabilidad que debería percibir el productor. Sin embargo, los molineros proponen pagar entre 250 y 260 pesos, mitad al contado y el resto con cheques a 30 y 60 días, mientras que los productores reclaman un precio de 458 pesos por kilo.
Un escenario similar a los ‘90
Para Closs, la crisis actual recuerda la situación de la década del ‘90, cuando la desregulación permitió que los grandes molinos pagaran precios ínfimos por la materia prima. “Estamos igual que en los ‘90, donde lo que le queda al productor es apenas un tercio de lo que se le paga”, sostuvo.
Según el empresario, con esa porción el productor debe mantener sus chacras durante todo el año y subsistir. “Claramente estamos en la misma situación que en los ‘90 y esto va a terminar igual”, enfatizó.
Consultado sobre quiénes se benefician con la desregulación, Closs señaló que “los grandes molineros correntinos y algunos misioneros” son los principales ganadores.
En cuanto al precio en góndola, opinó que el paquete de yerba debería costar, como mínimo, un 30% más. “Si esto sigue así, vamos hacia la caída total del negocio yerbatero”, alertó.
Finalmente, resumió la preocupación del sector con un ejemplo concreto: “El productor está en la ruta reclamando porque hace números y dice: ‘Si tengo que pagar 170 pesos de servicio y me pagan 250 con plazos largos, no me queda nada’”.