Año: 2018

Aerolíneas lanza una licitación internacional para renovar su flota de cabotaje

Compartí esta noticia !

Esta semana recibe informes de los cuatro grandes fabricantes y armará un concurso internacional. Busca incorporar plazas y que les tomen los Embraer como parte de pago
La compañía aérea Aerolíneas Argentinas se prepara para actuar en un mercado remozado en donde la llegada de nuevos competidores le presenta una mayor competencia. Frente a esto, Aerolíneas inició un proceso de cambio de sus aeronaves por otras nuevas que, aunque consuman más combustible, sume una buena cantidad de asientos.
El presidente de la compañía de bandera nacional, Mario DellAcqua, le confirmó a Télam que se inició el proceso de cambio de la flota de aviones Embraer 190 que utiliza Austral por otros de mayor porte.
“Ya se hizo el llamado a las cuatro fábricas de aviones, Embraer, Boeing, Bombardier y Airbus para que oferten y se pueda hacer un recambio progresivo en una primera etapa de 12 aviones para Austral, que podría estar finalizada para mediados de año y luego cumplir con la segunda etapa”, explicó el ejecutivo.
Fuentes de la industria explicaron a El Cronista que lo que Aerolíneas recibiría en estos días “es un informe de las empresas explicando qué modelos tienen respecto de los requerimientos que tiene la aérea y, con esa información, se elaborarán los pliegos para una licitación internacional”.
Entre los puntos a tener en cuenta que tendrá el llamado a licitación es que Austral buscará adquirir aviones que, aunque tengan un consumo 15% mayor que las aeronaves actuales, cosumen entre 60/70 nuevas plazas, con lo cual ese incremento quedaría “licuado”. Y, otro punto, es que se acepten los actuales Embraer que utiliza la compañía como parte de pago de los nuevos aviones.
Esto último puede llegar a traer complicaciones porque algunas compañías en especial Boeing, Bombardier y Airbus pueden presentar dificultades para salir a vender aviones usados de otra marca, pero según explicaron a este diario, hubo un expreso pedido de parte de la compañía para que “exploren opciones”.
Toda esta operación debería estar completada antes de que termine el primer semestre si se quiere cumplir con los plazos que se puso DellAcqua.
En medio de este cambio, el presidente de la compañía ratificó que logrará este año su meta de no requerir más de u$s 90 millones de subsidios y abrió el paraguas. “siempre que llega abril se comienza a decir que se ejecutó más de la mitad del presupuesto, pero no se tiene en cuenta la estacionalidad de los ingresos porque la gente compra los pasajes con antelación. Para enero se vendieron 675.000 pasajes pero transportamos 1.240.000 pasajeros volando 5% interanual más, por lo que los gastos operativos fueron aún mayores pero esta ecuación se revierte en la segunda mitad del año; las cuentas están mucho mejor de lo previsto en la ejecución presupuestaria”, destacó.
En la conversación que tuvo con la agencia estatal, DellAcqua confirmó que el cambio de la flota de cabotaje no será la única.
El ejecutivo adelantó que para fin de año tiene la intención de comenzar el proceso de recambio de la flota de “fuselaje ancho” que son los aviones de largo alcance para cubrir las seis rutas internacionales: Roma, Madrid, Nueva York, Miami, Punta Cana y Cancún.
Respecto a las rutas internacionales, desde junio de 2018, AA va a incorporar tres nuevas frecuencias a sus vuelos con destino Madrid-Barajas, lo que significan 816 plazas nuevas a la semana con destino a la capital española.
También, a partir de julio, se estaría por inaugurar la ruta entre Córdoba y Punta Cana. Estos cambios implican una reducción de una frecuencia a la semanal con destino a Bogotá, destino que seguirá con oferta los lunes, jueves, sábados y domingos.

Compartí esta noticia !

El Mercado Concentrador Zonal de Posadas vende zapallo y calabaza a $130 por bolsa

Compartí esta noticia !

El Mercado Concentrador Zonal de Posadas, dependiente del Instituto de Fomento Agropecuario e Industrial (IFAI), comenzó a comercializar zapallo y calabaza por 14 kilos a un costo de $130 la bolsa. De esta manera, apuestan a transformar al centro comercial en una opción a la inflación.
Estos cultivos de origen misionero son producidos por la Asociación de Productores de Puerto Piray y serán comercializados por la Cooperativa del Mercado Concentrador Zonal de Posadas. El presidente de la cooperativa, Carlos Méndez, explicó que gracias a la asistencia técnica y económica del IFAI, estos productos pueden llegar hoy a las góndolas del Mercado. “Estamos apostando a productos que resisten más y no son tan perecederos. Por eso optamos por la calabaza y el zapallo que no se pasan pronto”, señaló.
Méndez indicó que en otros mercados la bolsa de zapallo y calabaza, de aproximadamente 13 kilos, ronda los $200 y remarcó que como cooperativa pretenden comercializar los productos a valor diferenciado. “Estamos ofreciendo producción misionera y a precios muy accesibles, con un valor muy aceptable para nuestros clientes”, subrayó.
En cuanto a los días y horarios de atención, los productos se podrán adquirir en el sector Frutihortícola, de martes a sábados, de 7:00 a 12:00 horas, en avenida Aguado 4450, a dos cuadras de avenida Chacabuco y a una cuadra de avenida Ituzaingó de la ciudad de Posadas.
 

Compartí esta noticia !

El “Gol de Oro” con “Yapa” alegró a un correntino

Compartí esta noticia !

El “Gol de Oro” con “Yapa”, que sale sí o sí, benefició con 60 mil pesos a un apostador de la provincia de Corrientes. Fue en el Sorteo N°512 del 11 de febrero de “Jugá con Maradona”. Además, favoreció a otros cinco apostadores con quince mil pesos cada uno. El primer premio quedó vacante mientras que el segundo registró un ganador también en Corrientes.
En la oportunidad se extrajeron los números: 02, 04, 06, 07, 10, 12, 16, 19, 20, 21, 22 y 23, beneficiando con el “Gol de Oro” con “Yapa” al Cupón Nº 221109, vendido en la Agencia N° 0097, de Alberto Gallardo, de Corrientes.
Con el segundo premio resultó favorecido el Cupón N° 22282556, vendido en la Agencia N° 0348, de César Augusto Pared, de Corrientes.
Con diez aciertos hubo 74 ganadores; con nueve, 644; con ocho, 3; con siete, 455, y con seis, 2989 afortunados.
“La jugada de Fortunato” de 8 aciertos en la jugada 2 más 4 quedó vacante mientras que la de 8 aciertos en la jugada 2 más 3 benefició al Cupón N° 5682514, vendido en la Agencia N°6237, de Juan Ramón Segovia, de Buenos Aires.
Con 8 aciertos en la jugada 2 más 2, se registraron 7 ganadores, y con 8 aciertos en la jugada 2 más 1, hubo 12 ganadores.
Los cupones de “La Yapa” del “Gol de Oro” premiaron con quince mil pesos a apostadores de Misiones (Nº 254129), Chaco (N°230657), Santa Fe (N° 286504), Formosa (N° 237381), y Salta (N° 283316).

Compartí esta noticia !

El Gobierno oficializó la recompensa de $98 millones para hallar al submarino ARA San Juan

Compartí esta noticia !

La medida había sido anunciada por Macri tras reunirse con los familiares de los marinos en la Casa Rosada.
El gobierno nacional oficializó hoy la recompensa de 98 millones de pesos destinada a recabar información que permita dar con el submarino ARA San Juan, desaparecido desde el 15 de noviembre con 44 tripulantes a bordo en aguas del Atlántico Sur.
La medida, que había sido anunciada por el presidente Mauricio Macri a los familiares de los marinos en la reunión que mantuvieron días atrás en la Casa Rosada, se publicó hoy en el Boletín Oficial mediante la resolución 131/2018 del Ministerio de Defensa.
“Ofrécese, como gratificación, dentro del territorio de la República Argentina, la suma de pesos noventa y ocho millones ($98.000.000), destinada a aquellas personas quienes, brinden información y datos útiles que permitan dar con el paradero y la ubicación precisa del submarino ARA San Juan”, dice el texto firmado por el ministro Oscar Aguad.

Compartí esta noticia !

“El proceso de desinflación está totalmente abortado”

Compartí esta noticia !

El economista Diego Giacomini, director de la consultora ‘Economía & Regiones’ (creada por Rogelio Frigerio), sostuvo que la inflación dejó de caer en 2016, ya que en 2017 no logró perforar el piso del 1,7% promedio mensual, y alertó que en caso de que el Banco Central continúe en el mismo sendero, la inflación en 2018 podría superar incluso a la del año anterior (24,6%). Además, sostuvo que “existen varias señales que presagian que el escenario económico en 2018 podría complicarse”.

Diego Giacomini, director de la consultora ‘Economía & Regiones’, la cual fue creada por Rogelio Frigerio, afirmó que “la inflación dejó de bajar en 2016”, que es necesario desarmar las Lebac porque “son expectativas de inflación futura” y se debe dar la señal de que ésta va a bajar.
Durante una entrevista con el diario ‘Ambito Financiero‘, el economista consideró fundamental modificar el actual sistema de metas de inflación por uno donde se controlen los agregados monetarios y alertó que este año, el costo de vida podría llegar a subir más que en 2017 si no se controla la expansión de la base monetaria.
A continuación, sus respuestas:
– El Gobierno está convencido de que bajará la inflación en 2018 respecto del año anterior. Pero si la política monetaria no cambia y no se endurece, reduciendo de forma significativa el ritmo de emisión, es decir, el ritmo al cual están creciendo los agregados monetarios, lo más probable que este año sea muy similar a lo que fue en 2017 (24,8%). Inclusive, dependiendo de qué termine haciendo el BCRA, existe el riesgo de que pueda acelerarse marginalmente. El Gobierno tiene un gran problema porque el proceso de desinflación está totalmente abortado. La inflación dejó de bajar en 2016; en 2017 no lo hizo en ningún momento, ya que no logró perforar el piso en torno al 1,7% promedio mensual. El origen del problema es la cantidad de dinero y el exceso de expansión monetaria. De hecho, como consecuencia de estos dos fenómenos, existen varias señales que presagian que el escenario económico en 2018 podría complicarse.
 
– Desviarse de las metas de inflación no es gratis y tiene consecuencias negat ivas. El BCRA se desvió un 45% de la meta del año pasado; teníamos un máximo tolerado del 17%, pero terminó en 24,8%. Luego, Jefatura de Gabinete, erróneamente, cambió la meta a fines de diciembre, hiriendo de muerte la credibilidad y la reputación del BCRA, sumado a que agravó el problema. Esta última cuestión genera que el público no crea que la autoridad monetaria vaya a bajar las expectativas de inflación, sino todo lo contrario. Por ahora, no hay ninguna señal que permita pensar en que el proceso desinflacionario pueda reavivarse. De hecho, los datos confirman este escenario. Cuando miro la inflación de principios de 2018, está a más del doble de lo que estaba un año atrás. Hoy en día, la inflación observada está en torno al 2% mensual que, anualizado, da 26,8%. Y si lo comparo con la meta del 15%, estamos 11,8 puntos por encima. El año pasado era otro el escenario porque, con la misma medición, estabas solamente 5,8 p.p. por arriba de la meta de 17%.
 
– Cuando miramos la inflación estimada para los primeros cuatro meses de 2018 (8,5%-8,9%), es un poco superior a la del mismo período del año pasado (8,2%). Y eso se come casi 2/3 de toda la inflación del año. No sorprende que en materia de expectativas también estamos peor que en 2017. Ahí se veía una tendencia a la baja, pero hoy en día vienen subiendo. Como si el cambio de metas fuera poco, el BCRA está haciendo lo opuesto a lo que debería hacer, ya que, siguiendo el razonamiento de Jefatura de Gabinete, cree que puede flexibilizar la política monetaria. Pero en realidad debería bajar la emisión; el año pasado, la base monetaria creció un 27,6%, en una economía que rebotó un 2,8%. No sorprende que la inflación haya sido 24,6% porque ésta mide la diferencia entre lo que crece la oferta de dinero contra lo que crece la demanda. Hay que destacar que en este país, el peso se demanda solamente por motivo transaccional, pero no como reserva de valor. La demanda de dinero crece lo que avanza la actividad económica.
 
– Este año, la base monetaria está creciendo al 25% y el Banco Central está bajando la tasa de interés, una herramienta que ya está agotada. Para controlar la inflación habría que ir a un esquema de agregados monetarios. El BCRA está jugando con fuego porque baja la tasa al tiempo que cae la demanda de dinero, que tiene dos consecuencias. Habrá un aumento general de precios y del tipo de cambio porque la gente prefiere salir del peso y refugiarse en el dólar. Van a subir ambos componentes, pero no se ganará competitividad porque el tipo de cambio va a repuntar casi en la misma proporción que la inflación. En un principio, pica en punta porque es un activo financiero, pero también un precio más de la economía, de modo que se ajusta automáticamente, mientras que los bienes y servicios lo hacen de forma más gradual. Finalmente, la inflación va a terminar haciendo un catch up y terminaremos con un tipo de cambio más caro, una mayor inflación y ninguna mejora en el nivel de competitividad o en el de actividad respecto a lo que se esperaba antes de que el proceso comenzara a actuar.
 
– Me parece que es el momento de cambiar el programa monetario. En 2016, el BCRA aplicó un sistema encubierto de agregados monetarios, con el cual nos salvó de una hiperinflación que se iba a tres dígitos con la emisión que había dejado el kirchnerismo y la apertura del cepo. Además, bajó la inflación del 4,2% mensual del primer semestre de 2016 a 1,2% y a 1,3% en noviembre y diciembre, respectivamente. En ese el último trimestre, el BCRA muda a metas de inflación y comete el error de bajar la tasa de interés más de la cuenta y antes de lo debido. La cantidad de dinero da un salto estructural y, en política monetaria, cuando uno se equivoca y aumenta la cantidad de dinero más de la cuenta, hay dos formas de corregirlo. Por las malas, lo hace el mercado: se acelera la inflación para limpiar este exceso. Por las buenas, el BCRA debe darse cuenta, actuar rápidamente, y, si tomó nota de su error, la corrección debe ser rápida, fuerte y tiene que haber una sobrecorrección para convencer al mercado y reencauzar el proceso desinflacionario. Pero la autoridad monetaria, con las metas de inflación, subió muy poco la tasa y muy lento, sin poder reencauzar el proceso, que se abortó en 2016.
 
– La base monetaria, entre 2016 y 2017, creció un 61%. Con estos niveles de expansión, lo más probable es que la inflación no baje. Pero al mismo tiempo, como todos los fundamentos macroeconómicos y monetarios están deteriorados, podría hasta subir un poco. El BCRA tiene todas las canillas de emisión y de expansión abiertas, ya que le da adelantos transitorios al Tesoro y le compra los dólares de la deuda. Si tomamos los últimos 16 meses, emitió poco más de $550.000 millones, es decir, el 50% de la cantidad de dinero para pagar el exceso de gasto público. Esto genera que la inflación no baje, que la inversión no responda, no se genere crecimiento económico en serio, no haya creación de empleo y los salarios no pueden ganarle a la inflación. Hoy en día, el PBI per cápita de Argentina está 6 puntos porcentuales por debajo de lo que estaba en 2015. Y si la Argentina creciera 2 puntos tanto en 2018 como en 2019, el PBI per cápita, al final del mandato de Macri, sería el mismo que dejó Cristina Kirchner, pero con 20 puntos más de endeudamiento y sin haber bajado la inflación. Las Lebac y las tasas de interés no te permiten sacar agua del bote, que se está hundiendo y se lo quiere salvar con un baldecito. Por eso es que insisto en un cambio de la política monetaria. El Banco Central debe controlar los agregados monetarios para que crezcan a un ritmo consistente con las metas de inflación del 15% en 2018, 10% en 2019 y 5% en 2020.
 
– Debería dejar de emitir pesos en concepto de adelantos transitorios y no comparía dólares de la deuda. A las Lebac las utilizaría como sistema de inyección monetaria. Debería haber un canje voluntario por bonos del Tesoro Argentino, como Boden 2023, 2029, 2034 y 2037, los cuales, con los valores de hoy, deberían pagar un cupón del 5,32%, del 6,49%, del 6,86% y del 6,99%, respectivamente. Tomo estos años porque permitiría que no se aglutinen vencimientos en el perfil argentino en materia de amortizaciones o de intereses. Estos serían bonos bullets que amortizarían todo el capital en su vencimiento y pagarían una tasa de interés semestralmente. Alcanza con que el canje de deuda sea por el 35% de las Lebac, lo que representa alrededor de u$s21.000 millones. Así, el Gobierno podría ahorrar en forma consolidada un 2,4% del PBI entr e 2018 y 2020. Es importante decir que no es gratis no hacerlo porque en el contexto internacional está subiendo el rendimiento del bono del Tesoro americano, que se está acercando al 3%. Pero además, está cambiando el ánimo inversor: el riesgo-país ha comenzado a subir, elevando así el costo financiero. Desarmar las Lebac es importante porque son expectativas de emisión futura; si no se realiza esta medida, se esperarán altos niveles de inflación futura y ésta no va a bajar.
Compartí esta noticia !

Categorías

Solverwp- WordPress Theme and Plugin