Cristian Gruber es uno de los referentes de la industria de la madera del Alto Paraná.
En diálogo con Economis, este ingeniero industrial -directivo de Amayadap y de la empresa Don Guillermo- contó como están sobrellevando la actual coyuntura económica, signada por una crisis cambiaria y financiera con medidas que apuntan a restringir el acceso a las divisas o a fomentar la liquidación por parte de los exportadores.
Justamente, Don Guillermo es una de las empresas que nunca dejó de exportar y que trabaja con mercados tan diversos como Estados Unidos, España o Vietnam. Lo hizo en tiempos de dólar atrasado, aún con poca rentabilidad y para mantener el cliente y los canales abiertos.
Hoy con un mercado interno deprimido, la firma intenta volcar una mayor parte de su producción a las exportaciones, comentó Gruber.
El viernes (antes de que se conocieran las medidas de cepo cambiario), Gruber dialogó con Economis en la sede de Apicofom, y se refirió a la crisis financiera, las últimas medidas del Gobierno (default selectivo en Letes y otros títulos) y cómo repercutía en las empresas.
“La idea es calzarnos en dólares lo suficiente tanto para los compromisos locales que tenemos en dólares y luego una parte más para poder absorver las fluctuaciones. La Argentina es bastante inestable, no digo nada nuevo”, explicó. Nota de la redacción: ya las medidas de ayer limitaron la capacidad de las empresas a atesorar dólares.
“El otro tema es la tasa de interés que literalmente son parte del costo de la venta en el mercado nacional hoy, y es un costo muy importante, los clientes se han quedado sin capacidad de financiamiento, si uno no puede trasladarlo tiene que absorverlo y las tasas para financiarse son insostenibles, por eso la parte de mercado interno se achicó”, señaló.
Buscando más clientes en el exterior
“Del 2012 en adelante nosotros mantuvimos un par de clientes en Estados Unidos con productos de nicho para mantener las exportaciones, marcos de puerta, componentes de muebles, de valor agregado. Desde mayo de 2018 empezamos a buscar clientes nuevos y para septiembre teníamos algo de clientes más desarrollados, 50 y 50 por ciento”, explicó.
“El otro tema es, ¿cuándo liquidar los dólares? ¿Lo hago hoy, ayer o espero un poco más? De todas formas, como pyme no tenemos mucho tiempo de especulación, tenemos que pagar sueldos, la luz, las cuentas. No somos una gran empresa de granos con enormes volúmenes”, dijo Gruber.
Si bien después vino la obligación de las empresas para liquidar divisas con un plazo máximo de 5 días desde el cobro del envio, los dichos de Gruber, que coinciden con los de otros madereros que exportan, dejan en claro que la medida dictada ayer en el DNU, afectará especialmente a las grandes cerealeras.
-¿Cómo estás viendo el final del Gobierno de Mauricio Macri?
-No esperaba todo esto, esperaba como todo el mundo elecciones más parejas, con una transición más tranquila. Es muy importante la institucionalidad, poder levantar el teléfono y poder dialogar, entender que el otro no puede dar el cien por ciento de lo que uno solicita, pero que haya diálogo. Tenemos que ver cómo amortiguar los golpes internos, porque sino crecemos y caemos, crecemos y caemos.
-¿Es cierto que se bajaron los costos logísticos para Ustedes?
Es cierto que bajaron. Podemos discutir un poco cu´les fueron los porcentajes. Pero la baja fue de alrededor de 1.000 dolares, de 3.500 a 2.500 o 2700. Adicionales de high cube, optimizaciones, trabajo con agentes locales. Son números muy generales. El flete terrestre también bajó en 250 dólares en promedio.
