El empresario automotriz Cristiano Rattazzi calificó de “brillantes” las primeras medidas de Alberto Fernández, dijo que el arranque del actual gobierno lo sorprendió “positivamente”, y elogió también las medidas adoptadas por el ministro Martín Guzmán.
El presidente de FCA Argentina, Cristiano Rattazzi, advirtió que el sector automotriz atraviesa “fuertes problemas” y sostuvo que el país “quedó un poco afuera del mundo, esperamos que el nuevo gobierno nos reinserte”.
Consultado sobre las primeras medidas adoptadas por Alberto Fernández -de quien ponderó que “no le gusta la plata ajena”-, Rattazzi las consideró “brillantes en focalizar problemas”.
“Todos pensaban que el ministro de Economía, Martín Guzmán, iba a emitir, pero él dijo ‘acá no se emite, yo quiero controlar la inflación, quiero un país serio y quiero arreglar con los acreedores. Nada de hacer locuras'”, resaltó.
Sobre Fernández, destacó que por su actitud, “le interesa poder gobernar pero no la plata ajena. Tuvo tantas ocasiones que no utilizó de ninguna manera y tampoco entró en acusaciones de ningún tipo. Era un período bastante fácil para llevarse algo. Ese no es su interés”.
“A nivel mundial hay un cambio enorme en la industria, porque se va hacia la electrificación, el manejo autónomo… todo eso está viniendo”, explicó.
Se mostró esperanzado en que el “acuerdo con Europa podría hacernos entrar a jugar en el primer mundo. Así que, esperemos que siga adelante porque para la Argentina y para nuestro sector, es absolutamente necesario. Si dependemos solamente de Brasil, la Argentina no va a ningún lado”.
Dijo que el arranque del gobierno de Alberto Fernández lo sorprendió “positivamente” y destacó el convencimiento del presidente y de su ministro de Economía, Martín Guzmán, de que “no se puede vivir como lo hace la Argentina desde hace 70 años: con déficit fiscal continuo y solamente 5 años de superávit fiscal”.
“Hay que empezar a tener superávit y hacer bien las cuentas. Como bien se dijo, si esto es ajuste entonces tenemos que empezar a poner en orden las cuentas públicas”, sostuvo Rattazzi.
Se quejó que la Argentina tiene “la más alta carga impositiva de América Latina -probablemente de casi todos los países del mundo-, un problema de inflación tremendo que no ha sabido resolver -es uno de los 4 ó 5 en el mundo que no ha sabido resolver ese problema- y es que está lleno de impuestos distorsivos para aumentar la importación y exportación, como ingresos brutos, sellos e impuesto a la exportación”.
Consideró que “la única manera de salir es con las exportaciones y creando trabajos de calidad, que solo puede crear la industria privada”.
“Ese es el futuro: mantener el pacto fiscal, que estaba muy bien hecho. Mantener cierta regla de baja general de los impuestos aunque, admito que es bastante urgente e importante este momento de solidaridad. Es el momento de dar un corte y de tratar -por un cierto período- de cambiar y bloquear un poco la bola de nieve de la inflación. A veces, con cosas poco ortodoxas, pero hay que tratar de hacerlo”, señaló.
Confió en que “con las medidas que se tomaron, puede ser que estemos muy cerca de un superávit fiscal primario para el 2020, que es fundamental para tratar con los acreedores. Porque si a ellos les decís que, igual vas a seguir gastando por demás, te van a decir, ‘entonces, ¿por qué querés que te ayude?'”. Rattazzi pidió “bajar todo lo que se aumentó desde 2013 hasta 2015. Ahí es donde se crea el problema, y en el que todos dicen “¿por qué los privados tienen que tener más impuestos y pasarla mal cuando el sector público, es decir la política, piensa que ellos pueden seguir haciendo cualquier cosa?”.
“Esa es la discusión que se está creando porque, al contrario de lo que ocurría antes de 2015, el país empieza a entender que la plata pública es de ellos. Antes, había una sensación que la plata pública no era de nadie, que se podía defaultear a todos los acreedores y vivir simplemente con idiotas que le prestaban a la Argentina”, lamentó.
Admitió que “hay medidas dolorosas como el sistema previsional, pero si no se reforma, no hay solución de ningún tipo, excepto volver a la hiperinflación dentro de meses o en pocos años. Hay que seguir reduciendo gastos en todos los sectores, y esto es más del 50% del gasto del Estado”.
Dijo que cuando escucha que hay que convencer a los argentinos para que ahorren en pesos, la causa risa. “Tampoco veo que sea tan importante para los argentinos que aprendan a ahorrar en pesos. Si les gusta ahorrar en dólares, que lo hagan. Si les gusta hacerlo en pesos, que lo hagan. Pero, si para ahorrar tenes que ir a buscar tasas de interés del 40% en un plazo fijo, eso no es ahorro: es especulación. Y eso lo pueden hacer solo los profesionales. El pequeño ahorrista sólo quiere tener 100 o 150 dólares en su bolsillo. Y no tener que ir a buscar cómo ahorrar cuando hay una inflación de este tipo”, indicó.
Estimó que 2020 será un año “muy difícil, porque están todos los reajustes, pero la economía está parada. Hace 8 años que el sistema industrial viene bajando año tras año. No es que de golpe vamos a ver un crecimiento. Ningún país se hizo rico por vivir con lo propio. Algunos se hicieron ricos, pero el país se hizo pobre”.
“La única salida de la Argentina es exportar mucho más. Este gobierno eso lo tiene muy claro. Para exportar mucho más, hay que sacar los impuestos distorsivos y el impuesto al trabajo -que incide sobre las exportaciones- y hacer un país competitivo. Hay que mirar lo que es la competitividad y mejorar día tras día”, consideró.
