FMI alerta sobre menor crecimiento en Perú en 2025 y riesgos fiscales
Recuperación sólida en 2024, pero con desafíos en el horizonte
El Fondo Monetario Internacional (FMI) concluyó su misión de consulta del Artículo IV en Perú, destacando una sólida recuperación económica en 2024 con un crecimiento del 3,3%. La expansión estuvo impulsada por la reactivación de sectores primarios, el aumento del consumo privado y una fuerte inversión pública. Además, la inflación se mantuvo dentro del rango meta del Banco Central de Reserva del Perú (BCRP), que continuó con una política monetaria cautelosa.
El sector financiero también mostró fortaleza, con bancos rentables y un superávit en cuenta corriente del 2,2% del PIB, beneficiado por términos de intercambio favorables. Sin embargo, el déficit fiscal aumentó al 3,5% del PIB, superando ampliamente la meta de 2,8%, debido a una menor recaudación tributaria y un mayor gasto en inversión pública.
Perspectivas 2025: menor crecimiento e incertidumbre electoral
Para 2025, el FMI prevé una desaceleración del crecimiento al 2,9%, afectado por la incertidumbre global y tensiones políticas previas a las elecciones. Pese a los elevados precios de los metales, la incertidumbre podría perjudicar la inversión privada, lo que limitaría la expansión económica.
El organismo estima que la cuenta corriente mantendrá un superávit en 2025, retornando gradualmente a un déficit del 1,5% del PIB en el mediano plazo. A su vez, el crecimiento del crédito seguirá siendo moderado, reflejando la cautela del sector privado ante un entorno político y económico incierto.
Riesgos a la baja y necesidad de medidas fiscales
El FMI advierte que los riesgos para la economía peruana están inclinados a la baja. Entre los principales factores de riesgo se destacan:
- Intensificación de la incertidumbre política y social.
- Impacto de choques climáticos.
- Volatilidad en los precios de las materias primas y condiciones financieras globales más restrictivas.
Para enfrentar estos desafíos, el FMI recomienda mantener la flexibilidad cambiaria y un enfoque monetario dependiente de los datos inflacionarios. En el frente fiscal, alcanzar la meta de déficit del 2,2% del PIB en 2025 requerirá medidas adicionales equivalentes al 0,4% del PIB. Estas podrían incluir recortes en el gasto corriente, mejoras en la transparencia de Petroperú y ajustes en la política tributaria.
Sin acciones correctivas, cumplir con la regla fiscal de reducir el déficit al 1% del PIB en 2028 será un desafío. Además, iniciativas como la creación de zonas económicas especiales con exenciones impositivas podrían erosionar la base tributaria, complicando aún más el equilibrio fiscal de mediano plazo.
Sistema financiero resiliente, pero con desafíos en crédito y mercado de capitales
El informe destaca que el sistema financiero peruano es sólido, con bancos rentables y adecuados colchones de liquidez. No obstante, el índice de morosidad sigue siendo elevado en pequeñas y medianas empresas, reflejando la debilidad de la inversión privada.
El FMI recomienda políticas macroprudenciales para reducir riesgos en créditos dolarizados, especialmente en sectores como construcción y manufactura. Asimismo, advierte que la debilidad del mercado de capitales, agravada por retiros de fondos de pensiones en los últimos años, podría afectar el financiamiento de largo plazo. En este sentido, considera crucial mantener la prohibición de nuevos retiros previsionales y fomentar productos de inversión como fondos cotizados en bolsa (ETFs) soberanos.
Conclusión: sostenibilidad fiscal y estabilidad financiera como claves para el crecimiento
El FMI destaca que, a pesar de los desafíos, Perú cuenta con colchones macroeconómicos sólidos, como una baja deuda pública, amplias reservas internacionales y acceso favorable a los mercados de capitales. Sin embargo, para garantizar un crecimiento sostenible, recomienda asegurar la consolidación fiscal, fortalecer la resiliencia financiera y generar condiciones más favorables para la inversión privada.