Los manifestantes mantienen la presión en Paraguay para impedir que Cartes apruebe su reelección
Un millar de personas acudió al Congreso paraguayo, en el centro de Asunción, para protestar en contra de la reelección presidencial que pretende el conservador Partido Colorado de Horacio Cartes. Los jóvenes manifestantes instalaron una carpa frente al edificio con vidrios rotos del Palacio Legislativo, quemado el viernes por un grupo de manifestantes. Allí recogen firmas en contra del proyecto para enmendar la Constitución aprobado a finales de la semana pasada por 25 senadores. Ese plan de enmienda, que aún debe ser refrendado por la Cámara Baja, desató violentos enfrentamientos entre manifestantes y policías.
La protesta de aquel día fue convocada por Efraín Alegre, el presidente del también conservador Partido Liberal, el principal partido de la oposición, y por senadores del propio Partido Colorado que se oponen a la reelección de Cartes, como Mario Abdo Benítez, hijo del secretario privado de Alfredo Stroessner, el dictador que gobernó Paraguay entre 1954 y 1989. Militantes de ambos partidos protagonizaron el comienzo de los enfrentamientos con las fuerzas policiales.
La jornada terminó con el Congreso en llamas, un centenar de heridos y unos 200 detenidos tras batallas campales por todo el centro. Y, sobre todo, un dirigente de las juventudes del Partido Libertal, fallecido por los disparos de un policía en la propia sede de la formación política, situada a un kilómetro y medio de la zona de conflicto.
Cartes, que destituyó al ministro de Interior y al jefe de Policía tras los altercados, habló el domingo en un vídeo difundido en sus redes sociales donde respondió al exhorto de paz hecho el sábado por el papa Francisco con la propuesta de abrir una mesa de diálogo con la oposición y con un representante de la Conferencia Episcopal.
El mandatario propuso iniciar el lunes este diálogo y “determinar las prioridades para lograr un gran acuerdo por encima de los intereses sectarios”. Detalló que además de a un representante religioso invitará los presidentes de los partidos con representación parlamentaria y a los presidentes del Senado y de la Cámara de Diputados. “Paraguay nos necesita trabajando juntos en nuestros múltiples colores”, declaró.
El expresidente y hoy senador Fernando Lugo —cuyo partido, el progresista Frente Guasú, que ha apoyado al Partido Colorado en la aprobación de la enmienda en el Senado— pidió también que no se repita más violencia y que se apueste por “la paz y la participación democrática de todos”.
“Lo hago por mis nietos, porque quiero que puedan estudiar y tener atención médica sin tener que ser del partido del gobierno de turno. Buscamos 30.000 firmas para rechazar el proyecto de enmienda. Esta no es una convocatoria de los partidos, la gente viene y pide firmar”, dijo a este diario una de las manifestantes, Estela Gónzalez, de 47 años, mientras ayudaba a recoger firmas en una mesa en la plaza.
Un centenar de personas esperaba su turno para firmar mientras otros ciudadanos se turnaban un micrófono para hablar. Justo enfrente, agentes policiales custodiaban las puertas del Congreso, aún severamente dañadas después de varios asaltantes prendieran fuego al interior del edificio durante los enfrentamientos del viernes.