El “dólar ladrillo” cotiza a $72 y ya es la inversión estrella en Posadas
El dólar ya no es la inversión de moda en la ciudad de Posadas y fue reemplazada por el “dólar ladrillo”, por ponerle un nombre a los materiales de la construcción para refacciones pequeñas en las casas.
Aquellas familias que tienen ahorros en pesos se los quieren sacar de encima por las generalizadas expectativas de inflación y devaluación y hacen una cuenta muy simple.
El dólar en una cueva está a 135 pesos. El dólar por hombebanking sale 100 pesos (con el impuesto PAIS) y se puede adquirir sólo 200 cada vez con más preguntas de las entidades y el Banco Central.
En cambio el precio de muchos insumos para refaccionar la casa están retrasados. El valor del metro cuadrado construido cayó a un piso histórico de 600 dólares, según el Indice Construya, que elabora un grupo de firmas que venden insumos.
Según Sergio Bresiski, que compara los valores históricos del dólar y la bolsa de cemento, los materiales para la construcción tienen una paridad con un dólar de 72 pesos, aproximadamente.
Rehabilitó la construcción
Esta alternativa de colocación o destino de los ahorros, que comenzó de manera incipiente cuando se habilitó la construcción en la ciudad, hoy continúa consolidándose a paso firme.
En rigor, también se está verificando un salto en las ventas de automóviles e incluso bicicletas. Las familias que tienen pesos, buscan preservar su dinero adelantando compras o realizando pequeñas inversiones en bienes que no están atados a la suba del dólar “blue” o que siguen retrasados.
También se están vendiendo bien automóviles y hasta bicicletas en Posadas. Además, la imposibilidad de realizar o planificar viajes es otro incentivo para encontrar un destino para los ahorros excedentes.
Una recorrida de Economis ayer a la tarde por media docena de corralones y casas de materiales para la construcción (cermámicos, grifería), permitió comprobar que en todos los lugares había colas cuando llegaron las 4 de la tarde, hora de cierre de acuerdo al protocolo sanitario vigente.
La contracara de las casas de cambio del microcentro Posadeño, que permanencen cerradas desde hace 130 días.
Falta de stock
Cuesta conseguir ladrillos huecos, chapas, machimbres y otros productos por la alta demanda y también por las restricciones a la reposición de stocks de aquellos materiales que vienen de Buenos Aires.
“Yo hago el cálculo comparándolo con lo que cuesta la bolsa de cemento y hoy los materiales para la construcción están cotizados con un dólar a 72 pesos”, dijo Sergio Bresiski a Economis.
Además de ser titular de la Cámara de Comercio, Bresiski está al frente de Premoldeados Posdas, la empresa familiar. “Mis tres plantas están trabajando en horas extra y tuve que incorporar dos personas”, explica.
La maquinita y los pesos que se derriten
La emisión monetaria récord que tuvo que realizar el Gobierno Nacional (es tal, que se van a mandar a imprimir al exterior 250 millones de billetes de 500 pesos porque la Casa de Moneda no da abasto), hacen que las expectativas de inflación sean generalizadas entre la población.
Quien tiene pesos, prefiere tener bienes o algo que no se desvalorice. Hay que tener en cuenta que los índices de inflación no dieron tan altos en estos meses de la cuarentena, pero también, que está todo congelado por decreto (tarifa, nafta, consumo masivo, transporte, etc).
El cepo del BCRA permite comprar sólo 200 dólares por mes por persona, pero además le agrega el impuesto PAIS del 30 por ciento. Así, un dólar cuesta hoy 98 pesos (cotiza a $75 + 30% de impuesto PAIS).
Pero además, el Banco Central está “asustando” a muchos ahorristas, con mails, cartas o pedirle a los gerentes de los bancos que hagan preguntas sobre el origen de las operaciones. Esto es así porque están buscando perseguir a los “coleros digitales”, los que alquilan su caja de ahorro para que compre un tercero.
“La gente hoy tomó la decisión de invertir en construcción debido a que tenía dinero ahorrado, por estos meses que no pudieron gastar, vieron la necesidad de mejorar el lugar donde viven”, explicó Gerardo Alonso Schwartz, investigador jefe de la Fundación Mediterránea para el NEA.
“Ahora, para que este crecimiento siga, debería transformarse en nuevas viviendas, desarrollos inmobiliarios y más construcción pública”, explicó el referente de la Fundación en Misiones.
También en los aserraderos
“Hay una gran reactivación de las pequeñas obras y algunas obras públicas en provincias2, explicó Guillermo Fachinello, de Apicofom. Sin embargo, el empresario advirtió que todavía hay poca demanda para el sector forestal por el parate de Buenos Aires, Rosario y Córdoba.
“Estuvo faltando un poco de machimbre y tirantería pero ya nos estamos acomodando y haciendo frente a los pedidos, es muy importante que los productos forestales no trasladaron a los precios este desajuste que hubo, en cambio muchas empresas multinacionales han subido sin motivo (acero) los precios y también ladrillos para la gran demanda venía muy atrasado y actualizaron, así que subió un montón”, completó Fachinello.