El ex director del Ente Binacional Yacyretá, Oscar Thomas, fue procesado y embargado por $4.000 millones, luego de que la semana pasada fuera detenido, tras estar prófugo por 50 días. “Ni recibí ni di dinero alguno a nadie”, había dicho en su declaración.
El juez federal Claudio Bonadio procesó con prisión preventiva y embargó por $4.000 millones al ex titular del Ente Binacional Yacyretá, Oscar Thomas, quien fue detenido la semana pasada después de haber estado prófugo por alrededor de 50 días.
El ex director de Yaciretá es investigado por “asociación ilícita” en la causa por los ‘cuadernos de las coimas’.
El ex funcionario fue mencionado en los cuadernos. En 2013, Oscar Centeno apuntó: “Mientras viajábamos (con Roberto Baratta) lo llamó al jefe (Julio De Vido) y le dijo que entre Yacyretá y Transporte habían ‘aportado para la Corona’ 657.000 dólares”.
Bonadio explicó que fue recolectado como prueba “un contrato suscripto el día 8 de abril de 2008, entre la firma ‘Entidad Binacional Yaciretá’, representada por Oscar Alfredo Thomas, y la firma ‘Benito Roggio e hijos S.A. – Esuco S.A. – Supercemento S.AI.C. U.T.E.’, celebrado en el marco de la Licitación Pública Nacional N° 338, para la ejecución de trabajos de la ‘Obras de Protección Costera’ en la Localidad de Posadas, Garupá y Candelaria en la Provincia de Misiones, siendo el precio de adjudicación del contrato la suma de $ 437.762.172,46 ”.
Y añadió: “En este aspecto, corresponde señalar que las empresas mencionadas se encuentran investigadas en el marco de la presente causa, encontrándose procesados como miembros de esta organización los responsables de las firma ‘EsucoS.A.’ y ‘Benito Roggio e hijos S.A.’”.
También indicó que “otro elemento en relación a su responsabilidad surge del testimonio de Francisco Valenti, de la firma Pescarmona, quien manifestó que ‘…Como consecuencia de esa negativa, una de las primeras acciones que tomó el Gobierno contra la empresa fue dejar sin efecto el proyecto AÑA CUA, una obra que implicaba una inversión de US$ 450 millones que iban a ser financiados mediante recursos de las AFJP. Trabajó mucha gente, se hizo la ingeniería civil y mecánica completa, todo ello de forma previa, por algo que finalmente se dejó sin efecto por decisión del Gobierno Nacional. Fue un montón de dinero y horas de trabajo que perdió la compañía. La obra era para la entidad Binacional Yacyretá. Mientras estaba el proyecto vigente mantenía diálogo con Oscar Thomas y cuando no los dieron de baja Thomas dejó de atenderme…”.
Para el juez también fue determinante que “los bienes que fueron detectados en el marco de la presente causa: un plazo fijo por la suma de $ 3.770.442,87, una caja de ahorro con $1.635.779 s; una caja de ahorro con US$ 87.252; y un plazo fijo con US$ 2.5 millones, sumado al vehículo y propiedades que contaría”.
Y para concluir Bonadio resumió: “Su negativa de haber participado en los sucesos investigados se contrapone con los elementos que fueron mencionados anteriormente”.
Cabe destacar que en su declaración indagatoria, Thomas había negado las acusaciones y rechazado ser un ‘arrepentido’: “Niego haber entregado, dinero, bolsos, bolsitas, paquetes o cajas a ex funcionarios mencionados”, dijo seguro, y agregó que tampoco recibió ni dio “dinero alguno a nadie, ya sea empresarios y/o funcionarios públicos municipales, provinciales, nacionales o internacionales”, había dicho Thomas.
Bonadio había pedido el arresto de Oscar Thomas el 1 de agosto pasado. Desde ese momento, estuvo prófugo y pidió la eximición de prisión, que no le fue concedida. “Thomas me dice: ´Yo no tengo por qué involucrar a gente falsamente´, porque las cosas que dicen no pasaron”, había dicho su abogado, Juan Ubeira, hace unos días.
“Mi cliente no tiene nada de que arrepentirse, porque para arrepentirse tendría que haber hecho algo malo, o imputar a personas inocentes como han hecho muchos. Thomas es un hombre, se porta como un hombre y aguantará el proceso”, sostuvo Ubeira ante la prensa.
Finalmente, fue detenido el 18 de septiembre pasado, en un departamento de Ciudad de Buenos Aires, en la calle Uriburu al 1000, barrio de la Recoleta.
