Día de la Terapia Ocupacional: ciencia en constante crecimiento y demanda
Cada 10 de septiembre se celebra, en Argentina, el Día de la Terapia Ocupacional. Al respecto, la directora de la carrera en la Universidad Gastón Dachary, Sandra Boyezuk explicó que el eje de trabajo “es la ocupación humana durante todas las etapas de su vida”. Aseguró que “uno de nuestros grandes desafíos es seguir construyendo bibliografía, a través de investigaciones, y sumando profesionales a la creciente demanda laboral que existe en la actualidad”.
La Terapia Ocupacional es una ciencia dentro del campo de la salud. Se dedica a la ocupación humana desde que el nacimiento a la vejez. Pasa por el acompañamiento en pediatría, el neurodesarrollo, atiende el entrenamiento de habilidades que se han perdido, la estimulación neurocognitiva, entre otra variedad de herramientas.
En el Noreste Argentino sólo la UGD tiene la carrera que, si bien ya tiene años de experiencia en la Argentina, es novedosa para la región. Es más, según los dichos de la propia lic. Sandra Boyezuk: “Nuestros estudiantes tienen un campo laboral asegurado porque existe mucha demanda insatisfecha junto a muchas variables por explorar”.
“En Misiones la mayoría trabajamos en el ámbito de la pediatría, pero hay mucha demanda de otras instituciones que necesitan a nuestros profesionales”, aseguró la directora de la carrera quien remarcó que “tenemos convenios con la Asociación Argentina de Terapia Ocupacional que nos asegura tener la misma calidad de formación que en cualquier lugar del país”.
Uno de los grandes desafíos que afronta la profesión es el de construir bases bibliográficas propias junto a profesionales que puedan atender las particularidades de la región. “Hemos crecido mucho y se ha construido mucha experiencia que tenemos que volcar para utilizar en la formación”, agregó la profesional del área.
Por último, aseguró que el tiempo de confinamiento social los llevó a reinventarse para atender a sus pacientes: “Tuvimos que utilizar las plataformas de videollamadas, que era impensado porque estábamos acostumbrados al contacto cara a cara; pero nos ayudó a reinventarnos”.