La ex presidente Cristina Fernandez de Kirchner, estuvo en el mundialista Ernesto “Finito” Gehrmann para presentar su libro: Sinceramente. En la antesala se juntó con el deportista misionero y luego celebró el arribo de Diego Armando Maradona a Gimnasia y Esgrima La Plata, club de la que es simpatizante.

Apenas llegó al polideportivo municipal, la senadora nacional no perdió la oportunidad de comentar el encuentro que mantuvo con el gigante misionero “Finito, junto a su esposa, se acercaron al hotel a saludar. Lo recuerdo de cuando jugaba en Gimnasia”, soltó.

Es que el máximo representante del deporte de la Tierra Colorada supo vestir la camiseta del Lobo platense, donde además se coronó bicampeón de la Capital Federal en 1978 y 1979.

“Lo iba a ver jugar a Finito que era una estrella de la selección nacional y también de Gimnasia. Me llevaba mi mamá para verlo jugar en la sede de la calle 4 entre 51 y 53 en La Plata”, recordó “está tan alto como siempre, con sus 2.11… ¡impresionante!”, bromeó y al mismo tiempo indicó que fue un día de grandes reencuentros.

Por otra parte no perdió la oportunidad de mencionar la revolución que existe en la ciudad de las diagonales con el inminente desembarco de Diego Maradona, a la dirección técnica del Lobo. “Mi hermana está exultante con la llegada de Diego. Yo no soy muy fanática del fútbol, pero ella sí y mi mamá también era muy efusiva”, la recordó.

Tarea más que complicada tiene el Dios del fútbol mundial al frente del equipo en la Superliga Argentina, ya que está último en la tabla de promedios y hasta el momento perdería la categoría. ¿Habrá milagro? Desde Misiones, Cristina tiene fe.

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Renzo Silvero

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