“Como la valoración de lo justo”, definió el director misionero, Gastón Gularte, a algunos de los temas que se reiteran en su película. “Mariel (la protagonista) tiene tres piedras en un collar que le regaló su abuela, que simbolizan el amor, la libertad y el sentido de lo justo, y con eso adquiere los valores para enfrentar a esa empresa ambiciosa que sobredimensiona el valor del dinero y lo pone por sobre todas las cosas”. 
El guión lo escribió en el 2009 preocupado por el avance del neoliberalismo a nivel mundial, que “hoy tiene tanta vigencia porque la sobredimensión del dinero recae en perjuicio de la naturaleza, pero puede hacerlo en perjuicio de otras cosas, y en favor de esto los niños se transforman en los defensores de la naturaleza”.
Además afirmó: “Creo que el público de Misiones disfrutará la película, fundamentalmente porque tenemos héroes misioneros, y apuntamos a que la vean y disfruten en familia para que después puedan hablar sobre esos valores y tratar de ser conscientes con el cuidado de la naturaleza, del verdadero valor del dinero, y otorgar pequeños elementos para que niños y adultos tomen conciencia del contexto de realidad en donde viven”.

Nosotros tuvimos algunas experiencias como es el caso de “Siete Cajas” que fue abriendo el camino, y de a poco estamos avanzando. Estas películas demuestran que nuestro país tiene muchísimo talento y que debemos seguir trabajando en este camino”, sostuvo.
Brun reivindicó el rol de las mujeres. “Este es nuestro momento porque durante muchos años las mujeres estuvimos relegadas y calladas, y más en mi país donde vivimos una dictadura de 35 años que nos tuvo amordazadas y no se podía hablar ni pensar diferente. Pero hoy es el momento de romper esas cadenas y ser lo que queremos ser.  Y en esto el arte colabora”, dijo.
“Nos identificamos con el universo de la historia”
La película “Até que a Sbornia nos separe”, creada por el realizador brasileño Otto Guerra trata sobre la invasión de culturas más modernas sobreponiéndose a las culturas más antiguas, conservadoras. “Se trata básicamente de eso -explica el director-. Se trata de la modernización forzada que existe entre las culturas. 
Es una broma sobre eso, con dos músicos que se encuentran perdidos en el encuentro entre esos dos mundos, los conflictos que surgen a partir de ahí, de las diferencias terminan en una historia como si fuera Romeo y Julieta, y sobre todo es una comedia divertida, para la familia”, sostuvo.
Agregó que se trata de un espectáculo local, donde “nos identificamos con el universo de la historia, me atrajo desde 1984  cuando surgió la obra que se identifica con cultura brasileña. Este filme tiene a ver con el Sur del Brasil, con Uruguay y también con Argentina”, afirmó Guerra.