A las 18, sin dilaciones, la Legislatura aprobó la expulsión del diputado Germán Kiczka por mala conducta e inhabilidad moral para seguir en el parlamento. La expulsión fue aprobada por unanimidad, pero con una ausencia notable: Pedro Puerta, el amigo y socio político de Kiczka optó por faltar a la sesión antes de votar en contra de quien fuera apoderado de Activar, el partido que formó parte de la alianza Cambiemos y hoy es socia de la Libertad Avanza.

A Kiczka le encontraron más de 600 archivos de material de abuso sexual infantil. Fotos y videos con menores de edad. Zoofilia y menores de 13 años. Junto al ex diputado está detenido su hermano Sebastián, quien además podría tener un agravante por corrupción de menores. Desde febrero, cuando se inició la investigación, tanto Kiczka como Puerta y sus aliados en la oposición, hicieron silencio, que recién fue roto cuando las pruebas fueron abrumadoras. En ese momento, pidieron su expulsión “inmediata”, en el apuro por cerrar el caso y que asuma un radical como reemplazo. Sin embargo, será la Justicia Electoral la que determine quién será el reemplazo.

La expulsión del legislador Germán Kiczka se resolvió tras tomar conocimiento de las constancias judiciales en las que “se verifica su mala conducta, su inhabilidad moral, la magnitud y la gravedad de sus acciones”, según consta en el texto aprobado.

La medida fue promovida por el diputado Carlos Rovira, quien presentó un proyecto que contó con el apoyo de todos los integrantes del Bloque de la Renovación. Una propuesta similar fue efectuada también por el legislador Ariel Pianesi.

En los fundamentos de su iniciativa, Rovira manifestó que “estos actos son moralmente repugnantes y constituyen delitos severamente tipificados en nuestro Código Penal”.

“La conducta del diputado no solo representa una amenaza directa a la seguridad y bienestar de los jóvenes, sino que también subraya una grave infracción a los principios de protección infantil y dignidad humana, minando la confianza pública en la capacidad de nuestras instituciones para proteger a los más vulnerables”, afirmó.

“El comportamiento del diputado, al evadir reiteradamente sus responsabilidades legales y desobedecer las citaciones judiciales, demuestra un desprecio absoluto por el ordenamiento jurídico y por las instituciones encargadas de hacer cumplir la ley”, expresó.

“Esta actitud revela una falta de respeto por el sistema de justicia en la gravedad moral de sus acciones y por los ciudadanos que esperan que sus representantes actúen con integridad y responsabilidad”, consideró.

“Además, su conducta mistificadora busca tergiversar los hechos y desviar la atención de la verdad para evitar que se haga justicia”, agregó.

“Ante la contundencia de las pruebas, la actitud carente de fundamento y ética del diputado es particularmente repugnante, especialmente cuando no se ha ratificado la veracidad de sus afirmaciones”, explicó Rovira.

“Esta manipulación no sólo desvirtúa la verdad, sino que también agrava el daño causado, fomenta un ambiente de impunidad y erosiona la confianza en la capacidad de nuestras instituciones para manejar tales situaciones con la seriedad que merecen”, resaltó.

Por su parte, Pianesi argumentó que “Kiczka ha sobrepasado todo tipo de límites, resultando su conducta totalmente reprochable tanto como ciudadano como legislador”.

También recordó: “El señor Kiczka decidió fugarse, demostrando una vez más su inhabilidad moral para continuar siendo legislador, aun cuando se encuentra imputado y no condenado”.

“Por ello, consideramos oportuno y prioritario que se arbitren las instancias reglamentarias para resolver el apartamiento inmediato del diputado Germán Kiczka, para no dejar impunes este tipo de conductas, deseando, por supuesto, que la justicia imponga la pena más alta para todos los involucrados en tales aberrantes delitos”, agregó.

Antes de votar a favor de la resolución, la diputada Anazul Centeno explicó: “Hemos actuado con la prudencia que el tema requiere. Prudencia que no es sinónimo de dilación, ya que dentro de nuestras competencias y posibilidades hemos mostrado rapidez y seriedad en el tratamiento del tema”.

“La institucionalidad ha demostrado su fortaleza y ha dejado en claro un mensaje de acá y para la posteridad y es que la tolerancia es cero frente a estas aberraciones. Más allá del tipo del delito en términos penales, lo que este hombre ha cometido, amparado en su partido político que lo trajo hasta acá, es una estafa moral a los misioneros y misioneras”, manifestó Centeno.

Agregó que “la respuesta de todas las instituciones involucradas debe ser ejemplificadora, desde esta Legislatura así lo entendimos y así decidimos actuar, con total sentido de la responsabilidad. Lo que nos ha traído hasta este momento, hasta este lugar y será tiempo ahora de la justicia, de la penal y la electoral, dirimir lo que se vendrá”.

“A nosotros nos resta seguir avanzando en consensos que nos permitan incorporar nuevas herramientas para prevenir y perseguir este tipo de conductas delictivas que son las más bajas y las más aberrantes, como lo dijo el vicepresidente primero, delitos que son la muerte en vida para aquellos niños y niñas víctimas”, dijo Centeno.

Hasta ahora Kiczka no se hace cargo de nada. En la mañana de este jueves llegó sonriente y con mirada desafiante a declarar ante el juez Miguel Ángel Faría para intentar desplegar su estrategia de defensa en el escándalo de pedofilia, tenencia y distribución de material de abuso sexual infantil. 

La llegada de Kiczka a declarar contó con un fuerte operativo policial que incluyó un casco y un chaleco antibalas para el libertario y una decena de policías que lo custodiaron. 

En la indagatoria -cuando fue detenido se abstuvo de declarar-, reconoció el consumo de material pornográfico y que descarga ese material de internet. Pero ante la evidencia, negó que sea contenido pedófilo o con menores de edad. 

Ante la insistencia del juez y la fiscal, sobre la existencia de material con menores de edad en sus teléfonos y computadoras, el dirigente puertista aseguró que los recibía de sus amigos “en grupos de whatsapp”, lo que compromete particularmente a los integrantes del grupo “Cigarros”, compartido con Alejandro, Pedro,Gastón y Lucio.

En ese grupo, Alejandro, dice “tengo ganas de agarrar menores”. Alejandro se apellida Prietto y trabaja en Cigarros Misioneros, la empresa que preside Pedro Puerta y en la yerbatera de Ramón Puerta. Gastón Caballero es dirigente de Activar, ex concejal de Apóstoles y el tercero que aparece en el streaming en el que Pedro confiesa entre risas poner estimulantes eróticos en el mate para conseguir sexo con “guainas, guainos, gurises o tu elección sexual del momento”. Lucio se llama el otro hijo de Ramón Puerta. 

Kiczka también intentó despegarse del material pornográfico bajado a través del programa p2p -que permite compartir archivos entre terminales directas-. “Son por descarga errónea ya que el programa no reconoce visualizaciones previas”, se excusó.

El ahora ex diputado puertista libertario negó haberse fugado tras su desafuero. Dijo que estaba en una especie de “retiro espiritual”. Aseguró que se ocultó de la prensa y quería “estar solo y aislado por la angustia que sentía”. 

Juró que desconocía que estaba siendo buscado por Interpol.

Sin embargo, cuando el juez empezó a indagar con preguntas precisas y el alcance de las responsabilidades penales por la tenencia y distribución de material de abuso sexual infantil, Kiczka optó por abstenerse de responder. 

Tras varias horas de declaración, volvió a la celda del Penal de Cerro Azul, donde también está preso su hermano Sebastián, quien además tiene cargos por corrupción de menores.

About The Author