Los mentores de la mentira
Buenas y santas amigos lectores. Los paros suelen ser inspiradores. Ahora que no está Toto Caputo en el Banco Central, la cosa se puso de diez para arriba para generar confianza en los mercados y que vengan las lluvias de inversiones. Como Uds. sabrán, su renuncia/salida -cuando Mauricio está de gira y recibiendo un premio no puede sorprender a nadie- es algo que se hablaba por todos nuestros medios hegemónicos desde el tiempo que asumió. Hace tanto ya de esos largos tres meses ¿no? Pero la gestión es así, son ciclos.
Ajeno a la realidad de la Argentina, Mauricio Macri bailaba –literalmente- la noche anterior en EEUU, en el escenario de la gala del Atlantic Council donde fue premiado junto a Adrienne Arsht, titular de la entidad. Se sabe en la psicológica que los ególatras y los soberbios son grandes tiempistas. Y también se sabe que siempre hay excepciones a las reglas.
Lo cierto es que el pobre Toto se vuelve a trabajar para la banca internacional, donde dejó sus dólares guardados y creciendo al mismo ritmo que Argentina descendía. Tiene un proceso judicial por 500 millones del fondo de garantía del ANSES que no se sabe dónde fueron a parar.
La buena noticia es que encontramos por fin el rumbo económico. ¿Se acuerdan de que nuestro antihéroe Mauricio prometió asumir y generar un cambio, controlando fácilmente la inflación, bajando a cero la pobreza, sacando y bajando impuestos, jamás devaluando la moneda y con lluvia de inversiones? Bueno, no se pudo… la cagamos mal.
Pero bueno, nuestro gobierno es para gente como uno, aquella que quiere hacer deportes, relax, ganar dinero a fuerza de un montón de negros que quieren privilegios, que nos vean como sus amos y que se pongan contentos cuando escuchan a Leuco o a Majúl con sus cuentitos bien armados y convincentes.
Ahh!! me olvidaba, llegamos al poder con la consigna de reponer, sostener y ampliar la “independencia” del Banco Central; bueno, tampoco cumplimos ¡che! Con las últimas medidas de reestructuración administrativa y la salida del pobre Toto Caputo, se concentró la toma de decisión económica y se volvió a unificar todo en manos de uno. Toda la economía en manos de Dujovne. Como ya dije alguna vez, cambiar no cambio nada.
Ahora sí, no lo podemos decir públicamente porque TN y otros se quedarían sin laburo y odiamos dejar sin trabajo a los amigos. Pero para nuestros “aspirados” que la tienen adentro, vamos a generar un sistema de inestabilidad económica mayor, con tasas de interés “riñendo” por captar capitales golondrina y encarecimiento del crédito para que sea más inaccesible. También vamos a lograr la profundización de la recesión económica y dañar severamente la generación de puestos de trabajo y ¿por qué no? ahondar en la precarización del tejido laboral. El impacto inflacionario también será mayor, sólo atenuado por el grado de absorción de la rentabilidad de las empresas, que en gran medida deberán resignar el traslado a los precios, porque de otra forma no podrán sostener niveles mínimos de actividad. Siiiiii gente… sí, se puede!!!!!!…. No escucho… ¡¡¡Si, se puede!!!
Otra gran noticia mi “amige lectore”, es que en New York, en una entrevista concedida a “Bloomberg”, Mauricio dijo que está “listo para competir”. Es bueno saber que alguien que sabe de verdad, busque el camino de la santificación y se lacere por una Argentina mejor. Sólo resta saber si ella quiere ser candidata y listo. Qué bueno es dar buenas nuevas y tener esperanzas de un cambio. ¿No?
Ahora, la mala noticia es que la Maru Vidal tiene luego de dos años peor imagen negativa que positiva. A fin de 2017 su imagen a favor era de 58,2% y negativa de 33,1%. Hoy es de 47,9% en contra ante un 45,2% a favor. La Maru es de Cambiemos, la mejor cara, imagínense el resto.
Por otra parte, fiel a mi estilo de ir de un lugar a otro y abordar todos los temas, en el orden local parece que Luis Pires quiere ser nuevamente candidato a gobernador por el Frente Renovador. Recordemos que dejó, en su momento, ese puesto para el Hugo Passalacqua. Estos días, y a fuerza de “falsear” a la concurrencia con una invitación para “hablar de trabajo”; cuando ya todos estaban sentaditos, cámara en mano de un secretario, lanzó su clamada candidatura de cara al 2019 y varios, muchos desprevenidos, quedaron “pegados” en la fotito.
También en el orden local, en los últimos días se difundieron audios del diputado “paracaidista” Martín “SHO” Sereno del Partido Agrario y Social, donde además de exponer la horrible mercantilista actitud de amenazar a gente humilde con quitar los “beneficios sociales” que le baja el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, parece que anduvo promoviendo intrusión de tierras privadas. De agrario sólo tiene el pelo y de social -de ser verdad los audios- absolutamente nada.
De igual forma, también fue resonante y muy fuerte el titular de un medio gráfico de la provincia, respecto del impresionante crecimiento patrimonial del senador y presidente del PRO, Humberto Schiavoni. Le pegaron una escrachada mal. Parece que la tirada del diario fue récord, pues Gustavo González, Pepe Pianesi, algunos empleados de la EBY y otros dirigentes de la UCR compraron más de un ejemplar para regalar a parientes y amigos.
Hablando de Gustavo González, cuentan fuentes del Palacio Legislativo que va a las reuniones de Comisión con una “camarógrafe” que sólo prende la cámara cuando habla él. Y que este vanidoso y presuntuoso proceder, ofuscó -al punto de pararse e irse- al jefe del bloque el diputado PRO “Jorgito” Ratier Berrondo.
Para finalizar mis amigos les dejo esta reflexión: El ser humano moral es aquel que se preocupa por el peso ético de sus acciones. Se interroga sobre él y busca respuestas en sí mismo. Intenta vivir moralmente (esto es, no sólo para sí, sino considerando los efectos de sus actos u omisiones sobre los demás). Luego tenemos al moralista, los Cambiemos en su mayoría. A ese le tiene sin cuidado su propia vida. Se dedica a vigilar la moral de los demás. Ya no es un ser moral, sino un moralizador. Un “evangelista” de bagatelas. Él puede engañar a su esposa e hijos y tener amantes, todos los otros son acusados de hacer el mal. Son fiscales de la moral de los otros. Ojeadores. Sabuesos de presa que se creen investidos de la misión divina de purgar al mundo de lo que perciben como desliz. A quién le quepa el saco que se lo ponga. Pero, para el futuro nomás digo, cuidarse de los cínicos, hipócritas y mentirosos. Hay muchos dando vuelta.
Como siempre amigos, del otro lado de la reja esta la realidad, de este lado también está la realidad, lo único irreal es la reja.
Montgomery Burns y Artigas.