Natalia Grace: el caso de una niña ucraniana adoptada, acusada de intento de homicidio
El caso de Natalia Grace, que comenzó como una historia conmovedora de adopción en EE.UU se ha transformado en una compleja trama de acusaciones mutuas de abuso, negligencia y manipulación.
La historia compleja comenzó cuando la familia Barnett, de Indiana Estados Unidos, estaban en pleno crecimiento familiar, decidieron que era hora de adoptar, ya que estaban en el mejor momento de sus vidas. Cuando buscaron a Natalia, una pequeña ucraniana quien nació con displasia espondiloepifisaria congénita y que tenía seis años, según les dijeron al momento de la adopción todo parecía bien, aunque no terminó de la manera que esperaron.
Los padres, aún años después continúan con denuncias, conflictos y su familia rota por completo alegan que Natalia no era una niña, sino una adulta que los engañó sobre su edad y los amenazó de muerte. Por su parte, Natalia niega categóricamente estas acusaciones y asegura haber sido víctima de abuso y abandono por parte de su familia adoptiva.
Esta historia desembocó en una La docuserie “The Curious Case of Natalia Grace”, que trata de desentrañar los hechos que sucedieron entre la adopción y la final ruptura de la relación entre la familia Barnett y Natalia. Si bien, esta docuserie no plantea una resolución sino que abre muchas preguntas sobre quién es el verdadero villano y si hay mas de un villano en la historia, muestra una trama de la cual aún hoy varios años después no hay respuestas firmes.
Una de las principales controversias del caso es la edad real de Natalia. Los Barnett afirmaron que era mucho mayor de lo que parecía y que había falsificado sus documentos. Sin embargo, pruebas de ADN y registros médicos parecen confirmar que nació en 2003, como se informó inicialmente.
“Cuanto más se examina y se investiga este caso, resulta más difícil determinar dónde se encuentra la verdad”, expresa la exfiscal y analista legal Beth Karas en la serie. “Tal vez haya más de un villano en esta historia”.
El documental narra que una familia en Nueva Inglaterra había adoptado a Natalia y aparentemente hubo un intento para regalarla. La serie de ID entrevista a dos parejas diferentes, también personas pequeñas, que afirman que su antigua familia adoptiva se les acercó y tuvieron conversaciones.
A una le dieron desconfianza las quejas financieras y el comportamiento sospechoso de esa familia; la otra, una pareja que vive en Texas, viajó para conocer a Natalia y sus cuidadores en una casa del lago en New Hampshire, explican en el documental.
“Puedo sentir la maldad cuando entro en una habitación”, dice Dwane Faris, quien esperaba adoptar a Natalia con su esposa, Robin. “La verdad es que no podía decir si era la situación lo que era malo o Natalia, algo no estaba bien con ella… y creo que es la primera vez que confío completamente en esa intuición”.
“Fue en ese momento que tomé la decisión de que esto no iba a suceder, por difícil que fuera tomarla”, dice en la docuserie.
Los Barnett, conocieron a Natalia y decidieron seguir adelante con la adopción, en principio todo marchaba bien fueron de vacaciones a Florida, a Disney. De acuerdo a Jacob el hijo mayor del matrimonio, que era un prodigio académico que fue diagnosticado con el síndrome de Asperger, afirmó: “Todos estábamos emocionados de tenerla en la familia. Natalia parecía feliz de unirse a nuestra familia”.
Pero todo empezó a complicarse cuando Kristine la madre adoptiva, trató de bañar a Natalia y descubrió que tenía vello púbico, además de descubrir mucho después que ocultaba su periodo menstrual. Cómo desconocía si el síndrome que padecía la pequeña afectaba su desarrollo, decidió organizar una cita con otra niña de su edad que sufría del mismo cuadro, para que ambas pudieran apoyarse en su desarrollo y ser amigas.
Michael Barnett afirma que se sorprendió de inmediato por lo mayor que se veía Natalia en comparación con la otra niña; Elva Reyes, la madre de la compañera de juegos de un día de Natalia, respalda el relato en la docuserie; ella quedó decepcionada por el encuentro y nunca organizó otra reunión con los Barnett.
Había esperado, dice, que su hija pudiera formar una “amistad… donde pudieran crecer… y que no sintiera que ella es la única en el mundo”.
En lugar de eso, inmediatamente pensó: “Natalia se veía físicamente muy bien desarrollada… mi primera impresión fue que su cara no parecía la de una niña pequeña. Tampoco puedo decir que de una adulta, pero al menos una adolescente”.
“Era muy vocal, al hablar, como si pudiera llevar una conversación muy bien… una niña muy inteligente para tener seis años”.
Actualmente su hija con 14 años, Therese, mira las fotos que quedan de ellas y: “Definitivamente, no creo que se vea de la misma edad que yo. Definitivamente yo tenía esa mirada de bebé en la cara”.
Más allá de la edad, todo empezó a empeorar aún más de acuerdo a los Barnett. Según ellos, Natalia los amenazaba con cuchillos; aterrorizaba a su hijo menor y lo defecaba y orinaba; y cometió atentados contra sus vidas, como supuestamente intentar envenenar el café de Kristine y arrastrarla hacia una cerca eléctrica. Los Barnett dicen que los profesionales les dijeron que Natalia era sociópata y que su familia estaba en peligro.
Por otro lado también los Barnett trataban de manera cuestionable a la niña. Michael describe cómo Kristine obligó a su hija adoptiva a permanecer de pie junto a la pared durante horas, sin ir al baño. También hicieron que Natalia durmiera afuera en la terraza como castigo, lo que llevó a un vecino a llamar a los servicios sociales.
Según Michael en la serie, un detective involucrado (que ya falleció) recomendó que reajustaran la edad de su hija, un proceso del que los Barnett afirmaron no saber nada. Sin embargo, en 2012, un juez de Indiana acordó modificar su fecha de nacimiento de 2003 a 1989, elevando su edad a 22 años, aparentemente con base en pruebas que incluyen el hecho de que no había crecido en dos años.
De esta manera la familia ya no tenía obligaciones financieras con Natalia. Aun así, la familia, le proporcionó beneficios federales y le alquilaron un apartamento en las cercanías de su casa. Kristine, dejaba comida para su hija adoptiva en la acera ya que no querían tener contacto por las denuncias cruzadas, hasta que por malos entendidos con los vecinos e internarse en un centro psiquiátrico, decidieron volver a mudar a la niña.
Posteriormente los ficales del distrito donde vivía la familia, denunció a los padres por desentenderse de una persona incapacitada por su enanismo. Lo que al tiempo terminó afectando al matrimonio que se divorció en 2013.
Si bien Michael acusa a su esposa Kristine de abuso, de ser la causal de todos los problemas con Natalia, además de ser abusiva con sus propios hijos, esto no ha sido demostrado.
Las autoridades locales investigaron las denuncias de ambos lados y, tras un largo proceso legal, los Barnett fueron absueltos de los cargos de negligencia. Sin embargo, la historia sigue generando dudas y preguntas sin respuesta.
En The Curious Case of Natalia Grace, los cineastas hablan a través de una videollamada con la madre de Natalia en Ucrania, quien detalla cómo los médicos le aconsejaron que abandonara a la recién nacida discapacitada porque ella nunca sería capaz de mantenerla como es debido. Lamenta la decisión antes de que se corte la transmisión por los apagones continuos en la nación devastada por la guerra.
En un adelanto de otro documental lalamdo Natalia Speaks, Natalia dice: “Esta es mi versión de la historia, y voy a contar lo que sucedió porque nunca tuve la oportunidad de explicar lo que sucedió”.
“Las cosas que Kristine y Michael han dicho que yo he hecho es mentira. Nunca he hecho nada de lo que Kristine y Michael han alegado que hice”.
La docuserie “The Curious Case of Natalia Grace” ha profundizado en este extraño caso, presentando entrevistas con los protagonistas y expertos legales. Sin embargo, la serie ha dejado más preguntas que respuestas, y la verdad sobre lo que realmente sucedió puede que nunca se conozca.
Fuente: Independent en Español