No todos se recuperan igual
Escribe Nuria Susmel, economista Senior de FIEL y experta en Economía Laboral, Previsión y Pobreza
La implementación del aislamiento obligatorio tras la aparición de la pandemia tuvo un fuerte impacto en la actividad económica y, en consecuencia, sobre el mercado laboral.
De acuerdo con los datos publicados recientemente por INDEC, en el segundo trimestre del año pasado, los grandes perdedores en materia de empleo, en proporción al tamaño del grupo, fueron los trabajadores autónomos, entre los cuales el empleo se redujo casi un 30% (1,4 millones de puestos), mientras que entre los asalariados la reducción alcanzó al 15% (2,1 millones).
Pero aún dentro de cada grupo hubo una gran diferencia, tanto en el nivel como en la evolución, entre el segmento formal e informal.
Entre los asalariados registrados, el sector público no sólo no realizó ajuste alguno, sino que continuó creciendo (poco al comienzo, algo más hacia finales de 2020). En el sector privado, en el primer trimestre de la cuarentena, el empleo apenas se contrajo, hecho que sí sucedió en los siguientes dos trimestres. Es probable que la restricción al despido impuesto al inicio del cierre de la actividad -que podía ser salvada a través de mecanismos alternativos, como el despido por situación de crisis como habilita la ley- y los costos de la pérdida de mano de obra con experiencia específica en la empresa (que deben ser afrontados en la etapa de expansión), hayan desalentado el despido al inicio.
Bien diferente fue el comportamiento en el sector no registrado. Los menores costos de despido respecto al sector formal, hicieron que todo el ajuste se produjera ni bien iniciada la cuarentena, mientras que los subsiguientes trimestres, cuando el sector formal recién comenzaba el ajuste, se inicia la recuperación del empleo informal.
Así, mientras el empleo asalariado privado formal casi se mantuvo en el segundo trimestre del año, en el sector informal la caída llegó al 44%, pero, a pesar de su recuperación posterior y del ajuste que siguió en el sector formal, a finales de 2020 los asalariados formales eran un 7% menos que a comienzos del año (momento previo a la pandemia),en tanto que entre los informales la reducción era más del doble (16% de puestos de trabajo perdidos).
En el caso de los trabajadores por cuenta propia, el análisis del comportamiento es más complicado. Entre los formales, los registros muestran que un 3.4% dejó de aportar a la seguridad social, lo que no significa que los que siguieron aportando hubieran tenido empleo en el período. La estimación de los trabajadores por cuenta propia informales muestra que pasaron a ser menos de la mitad en el mismo lapso. Un trimestre más tarde de ese ajuste, tanto entre los formales como entre los informales, el empleo por cuenta propia comenzó a recuperarse.
En el primer trimestre de este año, la recuperación del empleo privado continuó tanto en el sector formal como en el informal, aunque, otra vez, en diferentes magnitudes. El empleo total creció 4.8% en relación al último trimestre de 2020 -820 mil puestos-, pero logrando ubicarse apenas por encima de un año atrás en 40 mil plazas.
Según los datos de la EPH, poco más de la mitad del incremento del empleo en el primer trimestre corresponde a empleo en el sector privado, con 490 mil puestos más que a fines de 2020, mientras que el resto se debe a un aumento del empleo en el sector público, que sumó 332 mil nuevos ocupados en sólo un trimestre. Dentro del empleo privado, algo más de la mitad del aumento en el primer cuarto de este año -250 mil puestos- tuvo lugar en el segmento formal.
Dados estos movimientos, ¿hubo algún sector que logró recuperar el empleo a los niveles previos a la pandemia? De acuerdo con los datos de INDEC, el empleo por cuenta propia es el único que registra una recuperación en el año del 6.6%. Todo el aumento se debe al crecimiento de cuentapropistas no registrados, que probablemente, hayan ido surgiendo para compensar la pérdida de empleos asalariados en el sector informal. En el sector asalariado informal -donde se registra el mayor impacto- se perdieron en el año medio millón de puestos.
El sector que más aportó a la recuperación del mercado de trabajo según el INDEC es el empleo público, con 344 mil puestos respecto de comienzos de 2020, y casi toda esta expansión tuvo lugar en el primer trimestre de este año.
Cabe señalar que los datos que elabora el Ministerio de Trabajo no reflejan lo mismo en relación al empleo público, ya que muestran un crecimiento muy inferior al de INDEC. Este resultado, en definitiva, significaría un aumento del empleo total menor al comentado en esta nota.