Otras 58 personas murieron y 3.099 fueron diagnosticadas con coronavirus en el país
Otras 58 personas murieron y 3.099 fueron diagnosticadas con coronavirus en las últimas 24 horas en la Argentina, con lo que suman 1.903 los fallecidos y 103.265 los contagiados desde el inicio de la pandemia, informó hoy el Ministerio de Salud.
La cartera sanitaria indicó que son 752 los internados en unidades de terapia intensiva, con un porcentaje de ocupación de camas de adultos de 52,7% en el país y del 60,8% en la Área Metropolitana Buenos Aires (AMBA).
El Ministerio de Salud informó que desde el inicio de la pandemia suman 1.903 los fallecidos y 103.265 los contagiados.
El Ministerio de Salud agregó que del total de infectados, 1.082 (1%) son importados, 34.293 (33,2%) contactos estrechos de casos confirmados, 50.637 (49%) casos de circulación comunitaria y el resto se encuentra en investigación epidemiológica.
La cartera sanitaria precisó en el reporte vespertino que murieron 28 hombres, 15 residentes en la provincia de Buenos Aires de 46, 86, 51, 91, 40, 94, 85, 65, 72, 79, 84, 58, 95, 69 y 62 años, y 13 en la Ciudad de Buenos Aires de 26, 35, 86, 84, 86, 55, 74, 81, 55, 96, 65, 62 y 86 años.
Además, fallecieron 16 mujeres, 7 residentes en la provincia de Buenos Aires de 72, 30, 65, 82, 76, 86 y 70 años; y 9 residentes en la Ciudad de Buenos Aires de 66, 84, 75, 68, 75, 77, 43, 80 y 87 años.
El parte matutino señaló que murieron 7 hombres, tres en la provincia de Buenos Aires de 87, 77 y 100 años; cuatro en la Ciudad de Buenos Aires de 67, 89, 76 y 86, y siete mujeres, dos en la provincia de Buenos Aires de 80 y 74 años y cinco en la Ciudad de Buenos Aires de 86, 81, 75, 91 y 97.
En tanto, el presidente Alberto Fernández resaltó hoy que “la Argentina, en términos técnicos, está preparada para llevar adelante esta etapa de prueba de la vacuna” para prevenir el coronavirus y expresó su anhelo de que, cuando ya esté aprobada, “llegue al país” en simultáneo con las naciones centrales.
En una entrevista con radio FM La Patriada. Fernández sostuvo que aspira a que “cuando la vacuna esté en condiciones, esa tecnología se socialice para que todos puedan producirla porque hay mucha gente muriendo” en el mundo, como consecuencia de la pandemia.
Sobre este tema, el infectólogo, Tomás Orduna, miembro del equipo asesor del Gobierno nacional, afirmó hoy que en Argentina “se reclutarán entre dos y tres mil personas para probar la vacuna” de las compañías farmacéuticas Pfizer y BioNTech, y agregó que la pruebas comenzarán “entre fin de mes y principios de agosto”.
En tanto, el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, acordaron hoy que se decidirá “coordinadamente” entre ambas administraciones la forma en que continuará en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) la cuarentena más allá del viernes próximo, cuando finaliza la actual fase.
El vicejefe de Gobierno porteño, Diego Santilli, dijo a radio La Red que a partir del 18 de julio se “deberían empezar a recuperar comercios esenciales e industrias con protocolo” e, incluso “la actividad deportiva”, para regresar a una fase similar a la 3, previa a la estricta que comenzó el 1 de julio en el AMBA, pero en forma “paulatina, gradual y escalonada”.
Por su parte, el ministro de Salud porteño, Fernán Quirós, estimó que un 12% de la población de la ciudad de Buenos Aires “ya ha tenido” coronavirus, en base a estimaciones válidas en grandes urbes según las cuales hay diez contagios por cada persona positiva a un test.
En rueda de prensa, agregó que “hay una evidente estabilización de los casos” de coronavirus en el distrito y desestimó la posibilidad de que en la próxima etapa de la cuarentena se permitan reuniones sociales.
En el plano global, se reiteró hoy un panorama de contraste entre el sostenido avance del nuevo coronavirus en América e India, y la precaución adoptada por varios países, principalmente europeos, ante la reciente detección de nuevos brotes de contagios.
En Estados Unidos -por lejos el país con mayor cantidad de casos y de muertes- se confirmó el cambio de epicentro, desde el estado de Nueva York, cuya ciudad homónima tuvo hoy su primer día sin muertos por Covid-19 desde el comienzo de la pandemia, hacia los estados del sur.
En Brasil -segundo país con más contagios y más decesos por coronavirus- la pandemia volvió a repercutir con fuerza en el delicado equilibrio político, donde el vicepresidente Hamilton Mourao, y la cúpula militar condenaron una declaración de un juez del Supremo Tribunal Federal (STF, corte suprema) que asoció al Ejército a un “genocidio” en el desempeño del gobierno por su controvertida gestión de la pandemia de coronavirus.
En México, el presidente Andrés López Obrador volvió a defender la reapertura y exhortó a sus conciudadanos a seguir “saliendo a la calle” pese a que el país ascendió al séptimo puesto mundial entre los que tienen más casos de Covid-19.
En Bolivia se informó hoy que se contagiaron la canciller, Karen Longaric, y el ministro de Economía, Oscar Ortiz, por lo que ya están infectados la presidenta de facto, Jeanine Áñez; seis ministros de su gabinete; la titular del Senado, Eva Copa, y el presidente del Banco Central, Guillermo Aponte, entre muchos otros funcionarios y legisladores.
En India -tercer país con más casos y octavo con más fallecimientos en todo el mundo- se batió hoy por quinto día consecutivo el récord de nuevos contagios, con más de 28.000.
Portugal prorrogó por dos semanas más la cuarentena en Lisboa y cuatro municipios vecinos que concentraron 83% de los casos detectados en las últimas 24 horas.
Asimismo, Francia programó para mañana una austera celebración de su Fiesta Nacional -aun cuando estará dedicada nada menos que al general Charles De Gaulle-, con un desfile reducido que rendirá homenaje a víctimas del coronavirus y sin la presencia de público.
El mundo rondaba hoy los 13 millones de contagios de coronavirus y los 570.000 muertos por la enfermedad, con 12,77 millones de casos y 566.654 decesos según la Organización Mundial de la Salud (OMS) o 13,01 millones de infectados y 570.776 defunciones, según la universidad estadounidense Johns Hopkins.