‘Smooth’: un éxito atemporal, como el amor al que rinde homenaje
Por Rob Tannenbaum, New York Times. “Para apreciar realmente ‘Smooth’, hay que aceptarla con todo lo cursi que es”, dijo Rob Thomas. “No se anda con sutilezas”.
La voz del cantante bajó a un sedoso barítono, como si estuviera emulando al presentador de un infomercial o a un locutor de radio nocturna, para canturrear, no sin cierto dramatismo, la primera línea de la canción: “Man, it’s a hot one”.
“Smooth” fue la pieza central de Supernatural, el álbum con el que Santana, y su líder, Carlos Santana, reaparecieron en 1999. La banda del guitarrista nacido en México había sido reconocida como una fuerza innovadora en la música desde su debut en 1969 y contaba con varios clásicos del rock radiofónico dentro de su repertorio, como “Evil Ways”, “Black Magic Woman” y “Oye Como Va”. Sin embargo, Santana no había colocado un solo sencillo en el Top 40 desde 1982, y con Britney Spears, Backstreet Boys y Christina Aguilera dominando las listas de popularidad, no parecía haber mucha demanda para un guitarrista legendario de 51 años.
Clive Davis, fundador de Arista Records, quería que Supernatural lograra el máximo efecto comercial. Con esto en mente, emparejó al grupo con artistas más jóvenes como Lauryn Hill, Dave Matthews y Rob Thomas, cuya banda de pop-rock, Matchbox Twenty, acababa de conseguir un notable éxito con cuatro sencillos de su primer álbum, Yourself or Someone Like You.
El plan de Davis funcionó: “Smooth” alcanzó la primera posición en octubre, donde se mantuvo durante 12 semanas, hasta entrado el 2000. Sin embargo, lo que más llama la atención de la canción es su vida posterior como zombi. Generó un meme inexplicablemente divertido, plasmado en camisetas en las que se leía: “Preferiría estar escuchando el éxito de 1999 ganador del Grammy ‘Smooth’ de Santana con Rob Thomas de Matchbox Twenty, del álbum multiplatino Supernatural”. Hasta finales del mes pasado, se había reproducido 1,8 millones de veces en la radio de Estados Unidos, lo que equivale a un alcance de 13.200 millones de personas, de acuerdo con datos de Luminate, el servicio de seguimiento que impulsa las listas de Billboard. Tan solo en una semana reciente, fue escuchada en la radio por 5,2 millones de personas.
En Etsy hay figuras de acción de Thomas y Santana a la venta; también existe un video de “Smooth” cantada al estilo de los B-52’s. Cuando el sol estalle y la vida humana llegue a su fin, solamente quedarán las cucarachas, y esas cucarachas abrirán una emisora de radio y tendrán “Smooth” en constante rotación.
“La grabamos en una sola toma”, recuerda Santana, “y a mitad de la toma, el tiempo se detuvo y entré en un vórtice. Me dije: ‘Cielos, esto es grande’”.
Billboard la considera la tercera canción más popular desde 1958, según un ranking basado en las posiciones en las listas. Solo está detrás de “Blinding Lights”, un tema pop-R&B de The Weekend, y “The Twist” de Chubby Checker, que (y que nos perdone Checker) es casi una parodia. En otras palabras, “Smooth” es la canción de rock más exitosa de todos los tiempos.
¿Por qué?
“El tema es por siempre atemporal: el amante y su amada”, comentó Santana en una entrevista telefónica desde Las Vegas, donde desde hace mucho tiempo es músico residente en el House of Blues. “El amor es algo que necesitamos mucho en la radio. Mires donde mires, hay más películas del Exorcista, más Satanás, más Lucifer”.
La canción fue escrita por un antiguo músico de acid jazz llamado Itaal Shur, pero a Santana no le gustó la letra, así que Thomas se colocó un poco, según dijo, y luego escribió nuevas letras y melodías. Después, él y Shur volvieron trabajar en ella, superponiendo hook sobre hook. Thomas siempre ha dicho que escribió “Smooth” inspirado en Marisol Maldonado, una modelo de ascendencia puertorriqueña nacida en Queens con la que está casado desde 1999.
“Hay algo mágico en nuestra relación”, dijo Thomas de de su esposa durante una animada entrevista en video desde su casa en el condado de Westchester, Nueva York. “Nos consideramos una gran historia de amor”.
Sin embargo, reveló Thomas, cuando empezó la letra no estaba escribiendo sobre Maldonado, sino sobre Carlos Santana. Gran parte del estribillo —“You’re so smooth” (eres tan encantador) y “It’s just like the ocean under the moon” (es como el océano bajo la luna)— se inspiró en cómo veía al guitarrista. “Todo eso se trataba de Carlos. Pero no quería una canción en la que le estuviera cantando a él, así que la reformulé. ‘Smooth’ se escribió para poner una pancarta que dijera: ‘Este es el amor que tengo’”.
Casi todas las canciones de “Supernatural” eran guajiras, un ritmo afrocubano “compuesto para que los amantes se prodiguen amor”, dijo Santana. “No hay nada más sensual o delicioso que una guajira. Vuelve locas a las mujeres”.
El arreglo de “Smooth” incluye congas, timbales, un cencerro y un güiro, instrumentos ampliamente asociados a la música latina. Sin embargo, Santana rechaza la idea de que la canción tenga un aire latino. “‘Latino’ es una palabra que vino de Hollywood, para los latin lovers como Fernando Lamas y César Romero. Son solo ritmos africanos. Mi música es africana en un 90 por ciento”.
Aunque “Smooth” se benefició de los efectos del éxito de estrellas como Ricky Martin, Jennifer Lopez y Marc Anthony, una de las razones por las que ha perdurado es su pieza central: la guitarra.
El tema salta casi de inmediato a un ritmo serpenteante y distorsionado, tocado por Santana, que domina la mezcla. “Está estructurada en torno a la estrella de la canción, que es Carlos”, dice Thomas. “La guitarra es la protagonista”. Entre otras cosas, “Smooth” es uno de los últimos vestigios de cómo se escribían las canciones en la era del rock. “Hace 25 años, la estructura de las canciones era muy diferente a como es ahora la radio pop”, añadió. “Las canciones son más cortas, no hay muchos puentes y en realidad no hay solos de guitarra”.
El fraseo de Thomas en el preestribillo (“And if you said, ‘This life ain’t good enough’”) es astutamente convincente porque es casi una oración corrida: “Y si dijeras, ‘esta vida no es suficientemente buena’”. Su inusual síncopa, que según Thomas se asemeja más a una línea de trompeta que a una vocal, lo hace sonar jadeante por la excitación. El efecto es más apasionado y sincero que cool. “Me alimenta lo no-cool”, confirma.
Santana y Thomas se beneficiaron enormemente de “Smooth”. Supernatural ha vendido más de 15 millones de copias en Estados Unidos y ganado la cifra récord de nueve Grammys, superando incluso a Thriller de Michael Jackson. Y de acuerdo con Thomas, la gente dejó de pararlo en la calle para preguntarle, con cara de confusión, si es el cantante de Goo Goo Dolls o Third Eye Blind.
Los dos colaboradores, nacidos con 25 años de diferencia, tienen personalidades muy distintas. Santana es un trascendentalista que habla con metáforas poéticas y dice cosas como “Dios es mi representante” y “Desde que nací, he sido ordenado y he sido ungido”.
“Todo lo que dice Carlos parece la letra de una canción”, comenta Thomas.
Por su parte, Thomas es un sentimental con un espíritu libre y una risa fácil con la que adereza sus anécdotas sobre cantar “Smooth” en un karaoke o con una banda de boda. Es el Mick Jagger de las estrellas de rock que se ríen de sí mismas; incluso tiene una anécdota sobre una ocasión en la que el mismo Jagger le sugirió que se cambiara una fea camisa azul que llevaba, pero él no captó de inmediato de qué le estaba hablando.
Santana y él siguen en contacto por teléfono y han hablado de otras colaboraciones. “Hablamos todo el tiempo de hacer una gira juntos. Hay al menos cinco o seis álbumes diferentes que quiere que hagamos juntos”, dice Thomas. El siguiente paso sería visitar a Santana en Háwai y escribir.
“Podemos sentarnos en la playa, beber tequila, fumar hachís y hacer canciones pop mediocres que duren para siempre”, dice riendo con complicidad.