La política, que hasta aquí había sido condescendiente con el presidente Javier Milei, de repente le puso un freno de un modo inesperado, con una alianza impensable y consecuencias impredecibles ante la inminencia de las primeras evaluaciones de medio término: Salta, Chaco, Jujuy, San Luis y la madre de las batallas, en Capital Federal, irán a las urnas en mayo. Misiones el próximo 8 de junio.
El revés del Gobierno en el Senado no por inesperado fue menos aparatoso: la designación por decreto de dos integrantes de la Corte Suprema, el cuestionado Ariel Lijo y Manuel García-Mansilla, quien pretende atrincherarse en su despacho, fue rechazada por una amplia cantidad de votos, en una confluencia entre el PRO, radicales y el kirchnerismo, además de disidencias dentro de la propia Libertad Avanza.
Es un desplante que va más allá de los nombres, aunque Lijo cosecha rechazos en todo el universo jurídico. Fue un freno al modo irreverente y con poco apego a la institucionalidad. La designación “en comisión” es una herramienta que se usó de modo forzado, a pocos días de que comiencen las sesiones ordinarias y sin acordar con los senadores de la oposición. Fueron muchas las advertencias de que los pliegos iban a ser rechazados, pero el Gobierno siguió fiel a su libreto. Con la negativa puesta, la única apelación de Milei fue volver a la muletilla de “la casta”. Pero lo más probable es que si el resultado hubiera sido distinto, salía asado de festejo, como cuando los diputados rechazaron el aumento a los jubilados.
“Por primera vez en la historia, el Senado de la Nación ha rechazado pliegos propuestos por un Presidente, por motivos meramente políticos y no por cuestiones de idoneidad, lo que evidencia una vez más que la Cámara Alta es el refugio de la casta política en el Congreso de la Nación. Convertido en una máquina de impedir, el Senado no actúa en favor del pueblo, sino que tiene como único fin obstruir el futuro de la Nación Argentina. Es evidente que la politización de la justicia representa una amenaza para la democracia. Mientras la clase política anteponga su protección penal y no la normalización del sistema judicial, el derecho a la justicia continuará limitado en la República Argentina”, fue la respuesta del Gobierno, en un mensaje poco encriptado que parece apuntar por igual a Cristina Fernández y a Mauricio Macri, ambos con problemas no resueltos en la Justicia.
La intransigencia oficial abre un escenario de conflicto de poderes. No hay jurista que avale la continuidad de García-Mansilla, quien ya había jurado previamente y ahora no quiere abandonar la Corte. Los que piden su salida, advierten que todo lo que decida estará viciado de nulidad. El tiempista Ricardo Lorenzetti dijo que él no hubiera entrado por decreto. Justo la imagen que necesita la Argentina en momentos -casi desesperados- en los que debe dar garantías de seguridad jurídica y cohesión política para conseguir los auxilios financieros de los que depende la supervivencia del propio Gobierno.
Los senadores que votaron en contra de García-Mansilla dejaron otro argumento difícil de contrarrestar: la senadora larretista Guadalupe Tagliaferri, presidenta de la Comisión de Acuerdos, disparó “¿Nos mintió o es manipulable por el Poder Ejecutivo y por eso asumió? En cualquier caso, se demuestra la falta de idoneidad”. Es que el hoy okupa en la Corte, había dicho que no quería entrar por decreto, como finalmente hizo. ¿Qué lo hizo cambiar de parecer?
Los que votaron a favor, como los senadores de Innovación Federal, lo hicieron con la premisa de dar gobernabilidad. Pero lejos estuvo de alcanzar.
Con respecto al pliego del juez que ya forma parte del máximo tribunal de justicia, tuvo 20 votos a favor, pero 51 en contra. Eduardo Vischi, Carolina Losada, Martín Lousteau, Maximiliano Abad, Pablo Blanco, Flavio Fama, Mariana Juri, Daniel Kroneberger, Stella Olalla y Rodolfo Suárez del radicalismo rechazaron cada pliego en ambas votaciones. Misma postura tomaron Alfredo de Ángeli, Martín Goerling Lara, Guadalupe Tagliaferri y Victoria Huala del Frente Pro, habitual aliado de La Libertad Avanza.
Patricia Bullrich habló de una “vendetta” de Mauricio Macri: “Se juntó con el kirchnerismo para voltearle un decreto a Milei”, se quejó la ministra de Seguridad le adjudicó al expresidente un rol decisivo en la votación del Senado. “Él está con bronca, no quiere aceptar que al Gobierno le va bien”, apuntó sobre el fundador de PRO. Más allá de la interna expuesta, la hoy fanática libertaria -como antes macrista y antes aliancista y…-, podría haber elegido mejores palabras: vendetta significa venganza, y se refiere a rencillas entre grupos, clanes o familias, particularmente de la mafia italiana, la tierra de origen del apellido del ex presidente.
Lo cierto es que más que una vendetta, la votación en contra se veía venir desde hace tiempo. “Desde el primer día que presentaron el pliego dije públicamente que iba a votar en contra de Lijo. Y de García-Mansilla, porque aceptó ser designado por decreto cuando él mismo dijo en la audiencia del Senado, que no aceptaría ser designado por decreto en comisión. No es correcto utilizar la vía del decreto estando el Congreso en funcionamiento. En todo caso, el Ejecutivo debería haber retirado los pliegos, al no haber alcanzado los consensos necesarios y enviar otros jueces. También considero que es indispensable una mujer en la Corte”, detalló Goerling, un hombre de las filas de Bullrich y oficialista desde el minuto cero.
Lejos de las teorías conspiracionistas, el fallido del Senado es un reflejo de la sinuosa gestión del Gobierno, que no construye vínculos políticos y que se encierra en resultados económicos que todavía no están sólidos. La contención de la inflación ha sido la gran bandera, pero no es una batalla ganada ni mucho menos. La inflación de alimentos acumulada en las últimas cuatro semanas trepó a 3,8%, el valor más alto desde mayo de 2024. El promedio mensual se mantiene en torno al 3%, en línea con la dinámica de febrero, anticipan las principales consultoras.
La urgencia con la que el Gobierno pidió auxilio al Fondo Monetario Internacional es una señal clara de que los resultados económicos no son los deseados. La falta de dólares es acuciante y los respaldos son más simbólicos que concretos. El directorio del FMI no logró llegar a un acuerdo sobre el primer desembolso del préstamo para la Argentina, que quiere una cuota “generosa” para fortalecer reservas en momentos en que la economía global está entrando en una etapa de incertidumbre por la guerra comercial desatada por los aranceles de Donald Trump. El amigo del norte no dejó fuera a la Argentina de sus tributos, lo que encarece las exportaciones argentinas, ya golpeadas por un tipo de cambio anclado y costos internos que se dispararon. La industria forestal atraviesa su “peor momento” señaló en un documento la Apicofom, una de las entidades empresarias emblemáticas de la actividad. “El mercado interno está paralizado, las ventas son casi inexistentes y los plazos de pago se alargan indefinidamente. A la vez, el mercado internacional se vuelve inaccesible por falta de competitividad, agravada por una guerra comercial entre las principales potencias que alimenta la incertidumbre y paraliza las decisiones de inversión y producción”, alertaron los empresarios.
La guerra comercial no es una buena noticia para las exportaciones argentinas ni para el comercio mundial. Se espera una caída del 1 por ciento global. Arancel por arancel, el mundo quedará pobre, definió hace unos días en una columna de Economis, Guillermo Knass. El aumento de aranceles sube costos y esto aumenta la inflación en Estados Unidos y anticipa tasas de interés al alza. El costo de endeudarse será más alto, justo cuando Argentina necesita ir al mercado.
Milei viajó a Washington con la esperanza de tomarse una foto con Trump y traer alguna noticia que alivie las tensiones. No la consiguió y su visita terminó en un escándalo poco diplomático según relató Glenn Parada, uno de los responsables de la gala “American Patriots” realizada en Mar-a-Lago, la residencia del Presidente de Estados Unidos. “Todo estaba planeado para que se encontraran. Milei aceptó venir por eso. Los pusimos juntos para que se puedan reunir. Pero a los 15 minutos de que se fue la delegación argentina, llegó Trump”, señaló.
Cuando se le preguntó específicamente por la actitud del canciller Gerardo Werthein, Parada no dudó: “Sí, estaba muy enojado. Se lo notaba molesto, se fue a los gritos”. ¿Habrá sabido Milei que Trump no iba a hacer concesiones? Como fuere, el enésimo viaje presidencial no arrojó resultados positivos para mostrar.
Ese caótico escenario obliga a refugiarse en el territorio. La suerte de las economías regionales está atada a la gestión local. El Gobierno provincial busca abrir canales de negociación para fortalecer empresas locales. En esa línea, el vicegobernador Lucas Romero Spinelli y el secretario de Hacienda, Adolfo Safrán, se reunieron con el Banco Interamericano de Desarrollo para gestionar líneas de crédito en dólares para empresas misioneras. En el paquete hay 200 millones de dólares listos para financiar exportaciones y dar garantía a otras operaciones.
En el plano político, la Renovación marcó el pulso con la presentación en sociedad de sus principales candidatos legislativos. Junto a Sebastián Macías, otros siete nombres ya fueron conocidos, en una amalgama de experiencia, territorialidad y juventud, no exenta de compromiso con el “misionerismo”, aunque las raíces sean diversas. Sobre todo en los jóvenes es donde se aprecia una puntillosa selección: profesionales, especializados y con compromiso social.
En la oposición el escenario es diametralmente distinto. La alianza Unidos por el Futuro no sale de los nombres conocidos ni puede detener la fuga de dirigentes hacia la Libertad Avanza. El macrismo duro también está fragmentado. El diputado Miguel Núñez -vicepresidente del PRO- abrió una nueva fisura al anunciar un espacio propio que desafía a la alianza entre el partido y los radicales. Dijo que como candidato a diputado irá el ex policía Ramón Amarilla, quien está preso a la espera del juicio por sedición y conspiración, durante la revuelta policial del año pasado. Con un video repasando el rol de Amarilla como principal vocero de la protesta y acampe policial durante mayo de 2024, el diputado Miguel Núñez (PRO) confirmó que el ex suboficial mayor tomó “la decisión de dar pelea desde otro lugar” y competirá en las legislativas desde la Unidad Penal VIII de Cerro Azul, donde permanece detenido.
La situación de Amarilla en la justicia es compleja. En el Juzgado de Instrucción Nº 6, Secretaría Nº 2 de la Primera Circunscripción Judicial, se tramita la causa identificada como Expte. Nº 64913/2024 “Agente Fiscal N° S/Eleva Denuncia N° 93, 94, 95 y de la 109 a la 126”, donde se investigan presuntos delitos de usurpación, daños, daños e interrupción de los servicios públicos y de comunicaciones, intimidación e incitación a la violencia, peligro de incendio de arsenal, supresión de datos de comunicaciones, encuadrados en los artículos 181, 183, 184 inciso 6, 186 inciso 3, 153, 194 y 212 del Código Penal Argentino y/o los que surjan de la investigación.
A su vez, en el Juzgado de Instrucción Nº 3, Secretaría Nº 1 de la Primera Circunscripción Judicial de Posadas, se instruye el Expte. Nº 121199/2024, caratulado “Morel, Juan Osvaldo s/ denuncia. Expte ‘J’ Nº 520/2024-UR-X”, causa en la que el magistrado interviniente ordenó la detención de Amarilla mediante el Oficio ID 26323976, de fecha 19/09/2024.
Núñez ratificó la candidatura del referente de la fuerza provincial, aunque no brindó detalles sobre la conformación completa de la lista, ya que “se está definiendo cómo será el lanzamiento de él”, y aseguró que “nada le impide ser candidato“. La ficha limpia no aplica para todos. Sin dudas, los problemas judiciales enturbiaron la base política de la oposición. El escándalo de pedofilia de Germán Kiczka golpeó de lleno a la alianza Cambiemos, hoy mutada en Unidos por el Futuro y las tensiones internas se hicieron más evidentes que nunca. El inicio del juicio al ex diputado de Activar concita la atención de todo el país y desnuda las interrelaciones dentro de la alianza. Los amigos ya no atienden el teléfono y lo desconocen, aunque estuvo en diversas listas y aparecía en todas las fotos. Su amigo y socio político, Pedro Puerta, se negó a presentarse a declarar en el tribunal y amparado en sus fueros parlamentarios -pese a que hace varios meses que no aparece por la Legislatura-, sólo responderá preguntas por escrito. La fiscalía quiere ahondar sobre su relación, mensajes comprometedores y una complicidad que quedó grabada en el célebre streaming en el que el hijo del ex gobernador confesaba usar un “yuyito” del amor para conseguir favores sexuales de “guainas, guainos o gurises”.