Dejar el mundo atrás
“Nos quedamos fuera del mundo”, despotricaban hace algunos años quienes hoy asienten silenciosos a las decisiones unipersonales del presidente Javier Milei de retirar a la Argentina de la Organización Mundial de la Salud, con la acusación de “delitos de lesa humanidad” por la gestión de la pandemia y las cuarentenas.
En enero la OMS contaba con 194 estados miembros, con todos los países que integran la Organización de Naciones Unidas, excepto Liechtenstein. Ahora se sumaron a ese selecto grupo, Estados Unidos y Argentina.
Argentina también se dispone a abandonar el acuerdo de París que busca mitigar las consecuencias del cambio climático, con el sólido argumento presidencial de imponer “una agenda inspirada en el marxismo cultural”.
Ajeno a la abundante evidencia científica, el Presidente le dijo al diario francés Le Point:“No estoy de acuerdo con la agenda ambientalista, que me parece un completo fraude”.
El Acuerdo de París es un tratado internacional sobre el cambio climático jurídicamente vinculante. Su objetivo es limitar el calentamiento global a muy por debajo de 2, preferiblemente a 1,5 grados centígrados, en comparación con los niveles preindustriales. Bajo el mandato de Mauricio Macri, la Argentina ratificó el convenio en 2016 y forma parte desde entonces. Si abandonara el foro -aunque hay pasos legales inevitables- Argentina perdería credibilidad en foros internacionales y podría ser vista como un actor irresponsable en materia ambiental. También podría afectar las relaciones comerciales: muchos países priorizan acuerdos comerciales con naciones comprometidas con la sostenibilidad ambiental y podría generar críticas de la sociedad civil, organizaciones ambientales y sectores económicos interesados en la transición hacia una economía baja en carbono.
De retirarse, el país se unirá a Estados Unidos, Irán, Libia y Yemen, los únicos integrantes de las Naciones Unidas que no forman parte. Podría sumarse Brasil, si es que Jair Bolsonaro elude sus condenas y vuelve al poder. El ex presidente de Brasil también prometió permitir la instalación de una base militar de Estados Unidos en la Triple Frontera y salirse de los BRICS -acrónimo de Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, los países que conforman el bloque. Se trata de cinco de las economías emergentes más poderosas del mundo, un espacio internacional alternativo al G7, manejado por Estados Unidos. Milei ya desdeñó la invitación para sumarse al Brics, para alinearse con Donald Trump. Seguirá la Argentina, eso sí, como socia activa del Fondo Monetario Internacional al que ya se le pagaron 12.500 millones de dólares solo en intereses, a cambio de fondos frescos que se hacen rogar.
Bienvenidos al mundo nuevo.
La andanada de anuncios presidenciales sirvió para aplacar los efectos no deseados del discurso de Milei en el foro de Davos. El discurso antiderechos y minorías generó revuelo y la imagen presidencial sintió el golpe en las encuestas e incluso en redes sociales, donde suele dominar el escenario. La valoración de la gestión perdió fuerza y según una encuesta, de la consultora M&F, el 41,2% de los consultados considera que la situación económica del país es “mala” o “muy mala”, aunque un 53,3% cree que mejorará en el futuro. La inflación se mantiene como el problema más mencionado, con un 22,2% de las respuestas, seguida por la corrupción (16,9%) y la pobreza (16,3%). En paralelo, Analogías dio a conocer un punto de vista preocupante para el oficialismo: hay un “apoyo distante al Gobierno”, en el que sólo la mitad de los que acuerdan con sus políticas se consideran oficialistas.
Un adelanto de la encuesta de Zuban & Córdoba que se conocerá este domingo, marca un fuerte rechazo de la población a las principales medidas de la reforma laboral que impulsa el gobierno de Javier Milei. La encuesta también indagó en la percepción sobre quiénes serían los principales beneficiarios de la administración Milei. Un 53,3% de los consultados consideró que gobierna para los multimillonarios. Apenas 1,4% opinó que su gestión está enfocada en la clase media, mientras que solo un 1% sostuvo que su gobierno favorece a los sectores de bajos ingresos.
Ajeno a la percepción, el Presidente ratificó su modelo económico y descartó la posibilidad de una devaluación como sugiere el FMI para liberar fondos. “Econochantas”, disparó en una columna publicada en La Nación, sobre el supuesto atraso cambiario y la fragilidad del modelo. Sin embargo, en las últimas horas arreciaron los rumores de renuncia del ministro de Economía, Luis Caputo, tanto que el vocero Manuel Adorni, en chiste, posteó en la red de Elon Musk hasta el nombre de su sucesor.
Pero la evidencia parece coincidir con la percepción de que los problemas económicos son más agudos de lo que el Presidente admite. Se bajaron los impuestos a los autos de alta gama, pero se mantiene a los de media y baja. Se perdieron 120 mil empleos registrados en el primer año de la gestión y la contención de la inflación se hace inconsistente ante la constante suba de servicios regulados por el Estado, como energía, peajes o combustible. La construcción cerró el año con una caída del 27,4 por ciento y la industria cayó 9,4 por ciento. Los corredores inmobiliarios, que celebraron la eliminación de la ley de Alquileres, ahora están en alerta por una amenaza de desregulación de la actividad, diseñada por Federico Sturzenegger. En la yerba mate sintieron de lleno los efectos de la desregulación: derrumbe del precio de la materia prima y un mercado interno que tuvo su peor año desde 2017. El inicio formal de la cosecha, en marzo, está a la vuelta de la esquina y los productores esperan algún salvavidas. La Provincia está trabajando contrarreloj en un sistema de trazabilidad que permita conocer costos de producción, establecer un precio de referencia y estimular a las industrias a respetarlo, con un mecanismo de premios, como créditos baratos o aportes directos para cooperativas. Batalla con desiguales contendientes. Salvo la Renovación, el resto de los espacios políticos miran para el costado, con la idea de que si hay un nuevo tractorazo, las pérdidas políticas serán del otro. En realidad, hay coherencia: durante la gestión Cambiemos, Macri intentó desregular el mercado y sus referentes locales impulsaron una ley en el Congreso. En el radicalismo, partido que mucho tuvo que ver con la génesis del Instituto Nacional de la Yerba Mate, ahora recomiendan a los productores una “cosecha por goteo” que haga faltar materia prima en secaderos e industrias. Pero nada dicen de los efectos de la desregulación impuesta por Milei. “El camino correcto”, según el ex presidente de la UCR.
Es muy fácil sugerir “soluciones alternativas” a los productores sin advertir que se trata de un modelo económico de un Gobierno al que el radicalismo no cuestiona, sino que busca desesperadamente pertenecer. Rodrigo De Arrechea lo dejó claro en su carta de renuncia como presidente de la UCR. Con “la convicción de que este es el camino correcto“, dijo el nuevo radical con peluca, quien despreció la conducción partidaria que asumió hace menos de un año para asumir como nuevo consejero de Yacyretá, designado por decreto de Milei y el ministro de Economía, Luis Caputo.
En el paquete Caputo, también nombró a Diego Luis Adúriz y a Facundo Palma como consejeros del organismo encargado del aprovechamiento hidroeléctrico conjunto con Paraguay. Adúriz es primo y socio de Caputo, con quien en otros tiempos operaba una mesa de dinero.
El precio de la lealtad, reprochó una joven dirigente radical en una carta abierta. No fue la única enojada con el bueno de De Arrechea, quien admitió que desde noviembre sabía de su designación. La diputada Rosi Kurtz exigió que los que quieran pasarse a la Libertad Avanza, lo hagan “sin seguir usando a la UCR”. El ex presidente del partido, Gustavo González, también cuestionó a De Arrechea: “El presidente de la UCR no puede ser funcionario del gobierno nacional que el partido no integra. Renunciá y ponete la peluca del todo”, le exigió apenas se conoció el nombramiento.
Con convicciones a la carta, González pidió que la oposición, incluída la Libertad Avanza y el puertismo residual, arme una alianza electoral en Misiones para enfrentar a la Renovación. Todo un proyecto de provincia.
Para que quede clara su firme posición política, el ex diputado eldoradense también cuestionó la suspensión de las PASO y que Argentina se retire de la OMS, ambas decisiones exclusivísimas del Presidente.
Anita Minder, con la experiencia a cuestas, advirtió que el radicalismo debe decidir si es oficialista u oposición, pero, dijo, “eso no lo deciden las personas individualmente”, sino que “lo debe resolver y tratar el plenario de la Convención”, remarcó. De todos modos, las fugas -o premios- son varias: la licenciada en Letras Claudia Burg asumió hace poco como delegada regional del NEA en la lucha contra la Trata y Explotación de Personas y para la Protección y Asistencia a las Víctimas. “Hay cuestiones que son completamente nuevas para mí, y esto requiere formación continua”, admitió.
Martín Arjol fue pionero en abandonar el barco para sumarse a las fuerzas del cielo. También despreció el partido que lo premió como candidato a gobernador. Ahora busca colarse en una lista del oficialismo nacional para seguir perteneciendo. Arjol acaba de ser acusado de pretender frenar una denuncia de corrupción en la Aduana de Iguazú, que involucra a funcionarios vinculados al Gobierno nacional. Para silenciarlo, al denunciante -un concejal radical- hasta le ofrecieron quedarse al frente de las obras de ampliación del Centro de Frontera. Hay presupuesto para algunas cosas.
Para otras, muchas demoras. Varios gobernadores se reunieron con el ministro de Economía, Luis Caputo, para intentar recuperar inversión nacional ya acordada en muchos casos y con obras en marcha. Por Misiones estuvo el ministro de Hacienda, Adolfo Safrán, quien reclamó reactivación de obras y compensaciones previsionales.
Entre las obras prioritarias para Misiones, Safrán mencionó la autovía de la ruta 105 entre Posadas y San José, que se ha reactivado, pero señaló demoras en la travesía urbana de Posadas y Gobernador Roca, así como en obras hídricas en Corpus. También advirtió sobre retrasos en los programas de vivienda financiados por el Gobierno nacional. Uno de los planteos realizados en la reunión fue la posibilidad de que algunas obras sean ejecutadas por la provincia con fondos nacionales, lo que podría agilizar los procesos. “Se propuso que, para ganar tiempo, algunas obras sean transferidas a la provincia y que la Nación solo gire los fondos”, explicó.
La relación de Misiones con el Gobierno nacional es de cordialidad mutua. En definitiva, las metas de Milei son muy parecidas a las conquistadas en la tierra colorada, como el equilibrio fiscal y la autonomía financiera. De hecho, los datos económicos de Misiones son los mejores de la región, con el mayor volumen de empleo -particularmente en el segmento joven- y una rápida recuperación de sectores golpeados, como la construcción, con Posadas a la cabeza. En medio de un año malo para la construcción, Misiones se ubicó tercera en el crecimiento porcentual y sexta en el país con mayor cantidad de permisos de construcción, con un crecimiento del 13,4%. En cantidad de permisos, en Misiones fueron 314 -en alza-, en Corrientes 155, en Chaco 199 y Formosa 234, pero todas con caídas. Misiones cerró noviembre con un crecimiento de la superficie aprobada para la construcción del 5,3 por ciento. Según las cifras recopiladas, Posadas experimentó un aumento del 44,4% interanual en la cantidad de permisos de construcción, consolidándose como una de las ciudades con mayor dinamismo en el rubro. En términos absolutos, los permisos pasaron de 141.897 en 2023 a 204.931 metros cuadrados en 2024, lo que refuerza la expansión del sector en la capital misionera.En el plano político también hay coincidencias. La suspensión de las elecciones primarias contó con el respaldo decidido de los diputados de la Renovación. El oficialismo misionero siempre sostuvo que las internas de los partidos, las tienen que resolver los partidos y no trasladar a la sociedad temas que, a la gran mayoría, no les interesa. Por eso, pese a que en su momento se puso “de moda” modificar en igual sentido los sistemas electorales provinciales, en Misiones nunca se avanzó.