Misiones duplicó la población de yaguaretés en los últimos años
Hoy se celebra el 20º aniversario del Yaguareté como Monumento Natural Nacional: en Argentina, la conservación de la panthera onca, más conocida como yaguareté, es política de Estado. Dueño de una silueta que se desdibuja en el monte, pasando inadvertido ante sus presas, el formidable cazador posee desde 2001 una herramienta legal que aboga por su cuidado y preservación.
Le ley encomendó a la Administración de Parques Nacionales compatibilizar con la Dirección Nacional de Fauna y Flora Silvestres o el organismo que corresponda, el plan de manejo para la especie en las áreas bajo su jurisdicción, ajustándolo a la política faunística nacional.
El gran gato solitario y esquivo, que supo estar presente a lo largo y ancho del país durante el siglo XX, actualmente sobrevive únicamente en la selva misionera, las yungas salteñas y algunos pocos lugares de la región chaqueña.
“En nuestro país se lo considera en peligro crítico, ya que enfrenta un riesgo extremadamente alto de extinción en estado silvestre en un futuro inmediato, siendo las principales causas de ello la destrucción y degradación de ambientes, la caza furtiva y la escasez de presas naturales” señalan desde el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación.
En Misiones, el actual ministro de Ecología, Mario Vialey, declaró hace algunos días declaró a la prensa misionera que la población del yaguareté se duplicó como resultado del tratamiento que reciben tanto los corredores biológicos como en las reservas ecológicas. El hecho de que pueda caminar libremente y que haya alimento en el monte, serían cuestiones centrales para que este crecimiento sea posible.
El Proyecto Yaguareté del CeIBA es un programa de investigación desarrollado desde el Centro de Investigaciones del Bosque Atlántico (CeIBA) que busca generar información sobre la situación de la especie, el estado de su hábitat y entender sus amenazas, para implementar medidas de conservación en la Selva Paranaense, en la Región Chaqueña y en las Yungas de Salta y Jujuy, y la reintroducción de la especie en la provincia de Corrientes.
En comunicación con Economis, Carlos De Angelo, referente del proyecto, explicó que desde 2002 se realiza el seguimiento a la población de yaguaretés en la provincia. Inicialmente se registraron 50 ejemplares y actualmente estiman que existen alrededor de 105 individuos adultos. “La población creció gradualmente y a través del trabajo articulado con autoridades e instituciones varias”, señaló.
Otra organización clave en la provincia es la Red Yaguareté, creada por naturalistas de vocación e integrada por personas decididas a conservar la naturaleza y, particularmente salvar al Yaguareté de la extinción en Argentina. Hace 10 años trabaja con productores ganaderos en la zona del valle del Cuña Pirú, donde incluso algunos productores tienen sus campos bordeando el parque provincial.
“La importancia de que haya una política de Estado, ha permitido que el yaguareté haya sido objeto de acciones para conservarlo entre nosotros” señaló Nicolás Lodeiro, en línea con el trabajo que vienen desarrollando diversas organizaciones desde hace más de 30 años. Además, destacó el hecho de que Misiones cuenta con un Ministerio de Ecología, hecho único y que sin dudas marca el rumbo de la provincia.
Recientemente, su coordinador expresó que es tiempo de ajustar la legislación que favorece la compensación ante depredaciones y la ampliación de los sistemas anti depredaciones exitosos a todas las áreas ganaderas de Misiones. Eso, sumado a capitalizar y afianzar las experiencias exitosas son los principales ejes de trabajo que se avizoran para profundizar la conservación de la especie.
Fotos: gentileza Emilio White y Proyecto Yaguareté (CeIBA – CONICET)