Comunidad científica internacional preocupada por la política ambiental de Brasil
La comunidad científica internacional está “profundamente preocupada” por los “retrocesos” en materia de política ambiental en Brasil bajo el gobierno de Michel Temer, afirma Bethanie Walder, directora ejecutiva de la Sociedad para la Restauración Ecológica (SER).
“Es un poco perturbador, o decepcionante (…) enterarnos de estos retrocesos en momentos en que traemos investigadores de 65 países para ver de cerca el liderazgo de Brasil en el campo de la restauración ecológica”, dijo Walder en una entrevista telefónica desde Foz de Iguazú (sur), donde participó en el 7º Congreso Internacional de la SER.
La investigadora estadounidense sostiene que Brasil no presta suficiente atención a las consecuencias de la destrucción de los ecosistemas.
“Un ejemplo de ello es la sequía de 2014 en Sao Paulo, cuando la represa de Cantareira disminuyó sus niveles. Tenemos que entender la relación entre la floresta y el agua: si destruimos las florestas, destruimos nuestra fuente de agua”, expuso.
Medio ambiente en la agenda política
Más de mil especialistas participaron en los cuatro días de la primera conferencia de la SER en Brasil, que concluyó este viernes en la ciudad situada en la frontera con Argentina y Paraguay, a proximidad de las gigantescas cataratas del Iguazú y de la descomunal central hidroeléctrica de Itaipú.
El comunicado final del evento insta a ejecutar obras de restauración de forma inmediata, pero advierte que “la restauración ecológica no será suficiente para revertir una crisis ambiental global si no detenemos la destrucción del ecosistema”.
La SER pidió crear legislaciones apropiadas con ese fin y garantizar un rol activo a las comunidades indígenas en la implementación de las políticas ambientales.
La Conferencia se realizó en momentos de polémicas ambientales en Brasil.
El gobierno paralizó el jueves, cediendo a las críticas dentro y fuera del país, la ejecución de un decreto que autorizaba la explotación minera en una reserva amazónica de 47.000 km2, tras un arsenal de críticas.
La semana pasada, se expuso a nuevos reclamos, tras anular la demarcación de un área indígena en el Estado de Sao Paulo.
Fuente ElUniverso