El presidente de la Convención Nacional de la Unión Cívica Radical, Jorge Sappia, se refirió al rol del partido dentro de la coalición Cambiemos. En declaraciones radiales envió mensajes para dentro y fuera de la UCR y un aviso al Poder Ejecutivo: “En la medida de que sigamos sin posibilidades de incidir en la toma de decisiones, yo no tengo argumentos para sostener la continuidad de Cambiemos”.
En diálogo con FutuRock, Sappia se refirió a los cruces protagonizados con la diputada Elisa Carrio la semana pasada, cuando la líder de la Coalición Cívica se mofó del rol actual de la UCR, y lo calificó como “un hito más dentro de una serie de situaciones que, evidentemente, demuestran que no hay una voluntad de considerar a la UCR como una parte integrante de Cambiemos”.
Mauricio Macri compartió anoche (10/7) una cena en Olivos con dirigentes radicales para limar asperezas por las últimas declaraciones públicas de Elisa Carrió, pero especialmente también para ponerlos al día con las negociaciones con el peronismo por el Presupuesto 2019 y calmar las críticas radicales a su poca participación en el Gobierno, por caso molestó mucho una reunión secreta en San Isidro con Miguel Pichetto y Sergio Massa a la cual ningún hombre de la UCR fue invitado. Pero tras la comida, el titular de la Convención Nacional de la UCR -órgano que aprueba las alianzas partidarias-, Jorge Sappia advirtió que “no hay argumentos para sostener Cambiemos”. Por su parte, Carrió se burló de la cena con los radicales a través de las redes sociales y de paso se mostró dejando propina.
Este martes (10/7) a la noche el presidente Mauricio Macri recibió en la residencia de Olivos a los gobernadores de Mendoza, Alfredo Cornejo; de Jujuy, Gerardo Morales, y de Corrientes, Gustavo Valdés. También participaron del encuentro el jefe de Gabinete, Marcos Peña; el ministro del Interior, Rogelio Frigerio; el referente de la UCR, Ernesto Sanz; el diputado Mario Negri y el senador Angel Rozas.
La invitación tenía como propósito calmar las tensiones y el malestar con los socios radicales por las últimas declaraciones públicas de Elisa Carrió y los constantes reproches por la falta de información y participación en el Gobierno, especialmente con relación al debate parlamentario que se viene por el Presupuesto 2019.
Sobre este último tema, los radicales le acercaron a Macri su propuesta para negociar con los gobernadores peronistas del sector denominado ‘racional’ y que se referencia con Miguel Pichetto en el Senado.
Ahí se sumó el ministro de Hacienda Nicolás Dujovne con quien se analizó el alcance del ajuste y las negociaciones con el PJ no kirchnerista con quienes hubo una cena entre la mesa política del Gobierno y referentes como Pichetto y Sergio Massa.
De ese encuentro que se realizó en San Isidro, provincia de Buenos Aires, los radicales se enteraron por los medios de comunicación y eso generó más ríspideces con la Casa Rosada. La cena de anoche fue la oportunidad también de limar esas asperezas.
“Hay consenso de llegar al 15 de septiembre con un acuerdo político con los gobernadores”, se dijo tras la cena en Olivos en relación al Presupuesto, aunque los radicales reconocieron que las negociaciones con los peronistas serán arduas.
En ese marco, también se habló del traspaso de subsidios de energía y transporte a la ciudad y la provincia de Buenos Aires, un pedido de los gobernadores peronistas que Larreta y Vidal resisten.
Por otro lado, los representantes de la UCR también recibieron contención por parte de sus socios del PRO a los dichos de Elisa Carrió, que días atrás bromeó con que ella y el macrismo manejaban a los radicales. En verdad, las declaraciones de la exradical molestaron menos a los socios del radicalismo que la cena secreta con Massa y Pichetto.
Antes de la cena, el Jefe de Gabinete Marcos Peña había dicho con relación a los dichos de Carrió: “Hay que tener cuidado con los chistes”.

Los radicales le habrían pedido a la Casa Rosada que interceda con la líder de la Coalición Cívica (CC) para moderar sus dichos que consideran lesivos para la alianza gobernante. Pero la diputada volvió a la carga tras conocerse la foto de la cena e ironizó a través de sus redes sociales, donde además se intentó reivindicar dejándole una buena propina al mozo, lo que también reflejó en su cuenta oficial de Twitter.
Pero más importante que las burlas de Carrió fue la advertencia de Jorge Sappia titular de la Convención Nacional de la UCR -órgano que aprueba las alianzas partidarias-, quien puso en duda la continuidad de la alianza gobernante. “Habrá que ver qué se hace con esta coalición que no ha funcionado” dijo y agregó que “no hay argumentos para sostener Cambiemos”.
Según recuerda el portal Noticia Uno, Sappia llegó a su cargo en abril del año pasado en reemplazo de Lilia Puig de Stubrin.
“Si estamos encerrados en un mutismo absoluto de origen propio porque los socios mayores no nos quieren escuchar, dediquémonos al fútbol o el básquet a ver si nos va mejor”, lanzó Sappia. “Habrá que ver qué se hace con esta coalición que evidentemente no ha funcionado como debiera”, analizó ayer.
“Lo que pasó con Carrió es un dislate más al que nos tiene acostumbrados. Demuestra que no hay una voluntad seria de continuar avanzando para mejorar las condiciones de ejecución de la coalición”, contestó Sappia después de que Carrió sostuviera que maneja “desde afuera” a la UCR.
“Siempre existe la posibilidad de que se rompa como de que no se rompa Cambiemos. Vo y a rescatar las palabras de (Leandro) Alem: ´Que se rompa, pero que no se doble´. Y en este momento está bastante doblada”, completó.
 

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