Aclaran sobre el uso de la Crotalaria en los sistemas agroecológicos
Ante lo expuesto por Yanina Rodríguez, técnica del Instituto Municipal de Vigilancia y Control de Vectores de la División de Educación de Posadas sobre el mito de la crotalaria como planta que previene el dengue, desde la Secretaria de Estado de Agricultura Familiar recordaron cual es el uso que se da a la mencionada planta en los sistemas agroecológicos.
El profesor Bruno Leite Tacarambi explicó a través de un comunicado el uso de la planta, comenta de donde sale la asociación con la prevención del dengue y remarca la importancia de la limpieza como mejor modo de eliminación del vector de la enfermedad. A continuación el comunicado:
Desde la Subsecretaría de Desarrollo Productivo tenemos la especies del género Crotalaria en alto aprecio por los servicios ambientales ofrecidos, dentro los cuales se destacan la atracción de agentes que incrementan la biodiversidad del sistema, la fijación del nitrógeno atmosférico al suelo (cerca de 300kg/ha) y posterior a su desarrollo completo el acumulo de materia orgánica (hasta 3,3t/ha). El uso de Crotalaria como abono verde ya es consagrado entre agricultores hace décadas, también tiene su eficiencia comprobada en programas de recuperacion de areas degradadas como bosques y zonas costeras a ríos y arroyos.
Adyacente a la agroecología, la introducción de especies de Crotalaria en el ambiente han demostrado correlación entre el decrecimiento de casos de dengue con la generación de condiciones ambientales que atraen a depredadores naturales del vector del virus, llevando a una búsqueda científica de justificativa al hecho, que se ha logrado desde la publicación de “La biosíntesis rápida de nanopartículas de plata usando hojas de Crotalaria contra el vector del dengue Aedes aegypti…” (Murugan, K en 2016) y también la determinación legislativa de muchas municipalidades en Brasil que sistematizaron la distribución de Crotalaria en superficies remotas como alternativa de combate debido a la evidencia demostrada en los índices de salud pública.
El Aedes aegypti es un insecto pequeño pero que se a ha convertido en un gran problema por ser el vector de enfermedades virales que pueden ser fatales para los seres humanos, lo que se lo convierte en el principal problema de salud pública de la actualidad. Odonata es un depredador natural de hábitos cazadores, vuela hasta 6 horas por día con una maniobrabilidad implacable y un sofisticado aparato visual, está por encima de los mosquitos en la red trófica de cualquier ecosistema, sea acuático o aéreo el encuentro entre esas dos especies culminará fatalmente en la depredación del Aedes. Por desgracia el Aedes se ha evolucionado en el sentido de que puede reproducirse en ambientes degradados (agua sucia) o artificiales, hostiles a la presencia de Odonata que requiere de un ambiente equilibrado (agua limpia) para su desarrollo, siendo así la distribución de las poblaciones de mosquito son más amplias que la de alguaciles lo que no asegura un control biológico absoluto que resuelva la problemática de las epidemias tropicales.
Se resalta que la manera más eficiente de combatir al mosquito Aedes es atacar su mecanismo de reproducción y no la cacería a individuos ya concebidos. Entre las estrategias de combate, la que presenta mejor eficiencia es la eliminación de los criaderos artificiales del mosquito, que en general se dan en lugares con acumulo de basura por descuido o abandono. En ese sentido las secretarías de salud trabajan incesantemente desde la concientización hasta en procedimientos de descacharrización.
Actualmente se popularizaron como “the trash challenge” (el desafío de la basura), las campañas de recolección de residuos libres en el ambiente (latas, botellas, recipientes plásticos) que puedan estar acumulando agua y proliferando mosquitos. Se trata de sacar una fotografía previa con el lugar sucio y luego una otra con el lugar limpio, y postear en redes sociales acompañado de la hashtag #trashchallenge y la descripción del grupo que realizó la tarea.