La victoria del Frente Renovador en las elecciones del último domingo abre múltiples lecturas sobre el nuevo tablero político. Contra varios rivales, la Renovación logró retener la mayoría propia en la Legislatura provincial, aunque los datos incorporan nuevos actores que reconfiguran el escenario. El oficialismo se quedó con siete bancas -una más que en el escrutinio provisorio-, la Libertad Avanza con cinco, Por la Vida y los Valores con cuatro, el partido Agrario con dos, el partido Libertario con una, lo mismo que Unidos por el Futuro. Así, la Renovación tendrá 21 legisladores, LLA debutará con cinco, con Diego Hartfield a la cabeza, Por la Vida y los Valores, con cuatro bancas, que se sumarán a Miguel Núñez. Con dos bancas se alzó el partido Agrario y Social: Héctor “Cacho” Bárbaro y Elisa Goring, se sumarán a Cristian Castro. EL partido Libertario, pondrá a Martín Arjol en la Legislatura. El radical con peluca aspiraba a una segunda banca, pero no le dieron los números. En último lugar quedó la alianza Unidos por el Futuro, con una banca que quedará para Santiago Koch, quien se sumará a Bibiana Labandoczka, Francisco Fonseca, Pedro Puerta y Rosa Margarita Kurtz.
El triunfo electoral del oficialismo, no tan holgado como otras veces, no deja de ser un triunfo que consolida los provincialismo, en un contexto marcado por un gobierno nacional que retacea recursos a las provincias y diálogo. El resultado refleja tanto la consolidación del respaldo ciudadano a la gestión actual como la emergencia de nuevas voces y demandas dentro del electorado. Mientras el oficialismo logra revalidar su liderazgo, la aparición de nuevos actores sugiere un electorado en movimiento, fastidioso de la economía, atento, que busca ampliar el debate político y representar sensibilidades que tal vez no se sienten plenamente incluidas. Esta convivencia entre continuidad y renovación va a ser desafiante de cara al futuro.
Si no fue la elección esperada para el oficialismo, tampoco lo fue para las oposiciones. El porcentaje de participación es un dato en sí mismo. Pero el 50 y pico por ciento de misioneros que fue a las urnas dijo mucho más: ratificó el modelo misionerista, validó el orden económico que expresa Javier Milei y expuso el descontento del bolsillo con un emergente como Ramón Amarilla. En ese orden.
En su primer análisis de las elecciones, el conductor de la Renovación, Carlos Rovira remarcó que, en un contexto nacional atravesado por tensiones y discursos de odio, Misiones consolida un modelo que apuesta al diálogo, la inclusión y el compromiso colectivo: “Desde aquí hacemos un llamamiento a todo el arco político de la provincia. Porque a los misioneros nos importa nuestra provincia, y nos proyectamos como una vanguardia con talentos jóvenes, con inteligencia joven al servicio de este proyecto amplio y convocante”.
Rovira subrayó que la Renovación Neo -como la definió- refleja un espacio que trasciende las etiquetas tradicionales: “Tenemos jóvenes con pensamiento liberal, peronista, radical, independiente. Esto no lo van a encontrar en ningún otro lugar del país. Por eso, por mandato popular, por decisión del soberano en democracia, somos el verdadero poder”.
Si se analiza un poco más fino, los festejos desmedidos en la oposición no encuentran asidero, lo mismo que el excesivo conformismo de algunos dirigentes del oficialismo, rendidos a la “ola violeta”, como antes fue con la amarilla.
La Renovación soportó bastante bien el embate leonino y donde perdió, fue más por motus propio. Si se comparan los resultados con 2023 -la primera irrupción libertaria-, el respaldo a Milei decreció en mayor proporción. El Presidente ganó las tres elecciones en Misiones. En la general sacó 305.629 votos. Hoy, su referente, Diego Hartfield cosechó 116.300, una caída de 61,95 por ciento. Y perdió en todo el Alto Uruguay, donde en 2023 había ganado. Los efectos de la desregulación yerbatera se hicieron sentir. Ese territorio eligió ahora a Héctor “Cacho” Bárbaro, en las antípodas libertarias.
En Oberá, cuna del ex tenista, donde Karina Milei vino a hacer campaña en forma personal, el resultado también fue escaso. En 2023, el Presidente había sacado 29.977 votos. Ahora, apenas 7.784.
Si se suma el escaso aporte del radical con peluca Martín Arjol, la pérdida libertaria fue de 47,81 por ciento.
En la Renovación, hubo una mengua del 44,31 por ciento en relación con el resultado obtenido en 2023. Si se computa como “cercano” el voto agrario que fue para Bárbaro, con otra propuesta territorial, la sangría se reduce a 27,25 por ciento.
La fuga estuvo explicada más por la irrupción del ex comisario Ramón Amarilla, quien logró capitalizar el descontento de los estatales por la pérdida de poder adquisitivo, situación que debe imputarse principalmente a las políticas nacionales y no a las locales. La pregunta es si, más allá del protagonismo actual, el ex uniformado podrá consolidar su figura política o se convierte en un emergente momentáneo. Amarilla el viernes recuperó la libertad por decisión del Superior Tribunal de Justicia ante la recomendación del procurador Carlos Giménez.
Mal le fue a la alianza Cambiemos, rebautizada Unidos por el Futuro. No ganó en ni un sólo municipio y quedó relegada al último lugar en la disputa por una banca en la Legislatura. En 2021, de la mano de Mauricio Macri habían sacado 144.747 votos. En 2023, 159.011. Ahora 30.827. Un retroceso a tono con su jefe político, hoy relegado a partenaire libertario. Un castigo a la falta de ideas y a la confusión identitaria. El diputado Martín Arjol se hizo libertario de apuro y Ariel Pianesi, quien se adueñó del partido, quedó fuera del Concejo Deliberante posadeño. Sacó apenas 4803 votos, apenas por encima del voto en blanco, que llegó a 4540 y un tercio de Daniel Vigo, que cosechó 11.544 y fue el más votado de la ciudad, en una muestra de respaldo al intendente Leonardo Stelatto.
El otro radical con peluca, Pablo Argañaraz sacó 9.702 votos, pero Pianesi también perdió con los sublemas casi desconocidos de Por la Vida y los Valores: Angel Mario Martinez, de Lealtad Azul sacó 5.549 y Francisco Wipplinger, cuyo sublema, valga la paradoja, se llamó Algo Nuevo, obtuvo 5.736 -bastante más que su hijo Claudio, candidato en Hacemos Futuro, que solo cosechó 1.564-.
La Renovación ganó en medio centenar de municipios. El partido Agrario en 14 municipios y quedó segundo en Panambi, Mojón Grande e Itacaruaré. La Libertad Avanza ganó en ocho. Por la Vida y los Valores, en cinco.
La participación electoral es un dato insoslayable. Mejor que en Capital Federal y en varias provincias que votaron previamente, el 55 por ciento que fue a las urnas marca un descontento generalizado con la política y su falta de respuestas en el bolsillo.
La Libertad Avanza se encarama en la contención de la inflación como “éxito” de su modelo, pero lo cierto es que el 1,5 por ciento de mayo, el dato más bajo en cinco años, no es suficiente ante el derrumbe del poder adquisitivo y la pérdida constante de puestos de trabajo. Al mismo ritmo que la inflación, las ventas minoristas cayeron 13,1% desde que asumió Milei y bajaron en diez de los 17 meses de gestión. Las de supermercados bajaron 6,5% y fueron negativas en nueve meses, mientras que los autoservicios registraron caídas del 16,9% y nueve meses en terreno negativo.
Desde la asunción de Javier Milei a marzo 2025, se destruyeron 115.353 puestos de trabajo registrados en el sector privado. En particular, en marzo, se destruyeron 7.310 puestos. El dato es fuerte, ya que luego de la doble crisis de empleo originada por el gobierno de Cambiemos y por la pandemia, a noviembre de 2023, se habían recuperado todos los puestos de trabajo perdidos.
En Misiones, la situación de la yerba es paradigmática. Para el Gobierno nacional, la política es un éxito. El ministro desregulador, Federico Sturzennegger, lo celebra cada vez que puede. Ahora dijo que el precio bajó 40 por ciento en góndola gracias a la desregulación. Pero eso es una verdad a medias. La yerba en góndolas aumentó menos que la inflación acumulada y en mayo se metió entre los productos que más aumentaron, con una suba de 2,9 por ciento, por encima del 1,5 festejado.
En contraste, el precio de la materia prima se derrumbó desde los 380 pesos que se pagaron en febrero del año pasado a 280 pesos en promedio -son pocas las industrias y cooperativas que pagan 305 pesos. Es decir, la producción primaria recibe mucho menos que hace un año, con costos que se triplicaron en el mismo período. Ese descontento explica mucho del voto contrario a Milei en la zona productiva, salvo Andresito, donde la Libertad Avanza se impuso por sobre la Renovación.
Por segunda vez desde la desregulación del mercado, el Instituto Nacional de la Yerba Mate marcó que el valor de referencia del kilogramo de hoja puesta en secadero asciende a 379,26 de pesos de acuerdo con la matriz de costos. Con ese dato, el precio de la materia prima, cargando un porcentaje de rentabilidad, debería estar en 493,04 pesos. De acuerdo a la zona, hoy se paga entre 170 y 280 pesos. Ninguna industria está obligada a pagar más.
Es la Provincia la que brinda respuestas, aunque escasas, por la imposibilidad de “meterse” en la política productiva de Corrientes -la otra provincia yerbatera-. El incentivo es dar créditos a tasas blandas para las industrias y cooperativas que pagan el precio de referencia.
Los pedidos alcanzaron a 17 mil millones de pesos, pero muchos se rechazaron justamente por no cumplir con ese precio base.
Las negociaciones por una solución se mantienen intensas. Se aguarda un último intento con Nación -casi formalidad- y después avanzar en una salida más local, en sintonía política con el Partido Agrario.
La crisis yerbatera amenaza con replicarse en la industria forestal. La Asociación Maderera, Aserraderos y Afines del Alto Paraná emitió un comunicado en el que advierte sobre la “clara emergencia” que vive el sector y solicita la intervención urgente del Gobierno nacional y provincial para evitar el colapso de las empresas y la pérdida de empleos.
“Estamos padeciendo una baja de demanda en el mercado interno por el freno de la obra pública y la construcción de viviendas”, indicaron desde la entidad en respuesta a la política de motosierra del Gobierno nacional, que cercenó fondos para viviendas en todo el país. La caída de actividad local se combina con un “parate total” del mercado externo, afectado por la incertidumbre en torno a las políticas arancelarias internacionales y el dólar planchado que fomenta el ministro de Economía, Luis Caputo. “Lo poco que se estaba moviendo era con precios mínimos para mantener el sistema en marcha, pero ya los stocks están llegando al límite. El mercado no absorbe más”, alertaron.
Además del desplome en las ventas, el comunicado -firmado por el presidente de AMAYADAP, Enrique Bongers, y el secretario Cristian Gruber- denuncia un incremento sostenido en los costos de insumos, fletes y servicios esenciales como la energía eléctrica, por la caída de los subsidios y los precios liberados. A ello se suman las paritarias sectoriales, que imponen aumentos que “en esta situación son impagables”.
La situación se refleja en un dato preocupante: crecen las consultas para iniciar Procedimientos Preventivos de Crisis, una herramienta legal para evitar despidos masivos. También se multiplican los pedidos de créditos para poder afrontar el pago del medio aguinaldo de junio. “Ya hemos visto colegas que cerraron sus fábricas, y la industria no puede absorber esa mano de obra”, indicaron.
En los últimos años, la cadena forestal había mostrado signos de recuperación e incluso había encarado inversiones para la incorporación de tecnología. Sin embargo, el freno en la construcción, la volatilidad del dólar y la parálisis del comercio exterior terminaron golpeando con fuerza a un sector históricamente competitivo. Ahora, sus representantes advierten que sin asistencia pública, el escenario será de recesión profunda, cierres de plantas y desempleo. Esa ayuda estatal, no llegará desde Nación. Sturzenegger insiste en que habrá más desregulación y menos Estado.
En cambio, el gobernador Hugo Passalacqua anunció la ampliación de una línea de créditos para capital de trabajo y que las pymes puedan pagar el medio aguinaldo. Se amplió el cupo del Banco Macro a $2.000 millones con tasas del 28 por ciento, bonificadas por la Provincia.
La línea de crédito contempla dos destinos:
- Capital de trabajo: con una tasa anual del 28% y plazo de hasta 13 meses.
- Pago de aguinaldos: con tasa del 28,25% y plazo de hasta 6 meses.
Cada empresa podrá solicitar hasta $80 millones y acceder de forma directa a través del Banco Macro. La ayuda es sustancial en estos momentos. En el mercado tradicional, los créditos tienen un costo financiero de 120 a 150 por ciento.
No es la única diferencia entre el escenario local y el nacional. La irrupción del ex comisario Ramón Amarilla en el escenario electoral, puso a prueba los valores democráticos en Misiones. La respuesta institucional fue primero habilitar a los policías a votar y, una vez consumado el resultado, ordenar la liberación del ex uniformado, detenido por sedición y conspiración. Ambas recomendaciones fueron del procurador Carlos Giménez y avaladas por el Superior Tribunal de Justicia. No hubo proscripción.
La Corte Suprema de Justicia, en cambio, bloqueó la candidatura de Cristina Fernández al dejar firme una condena en una causa plagada de irregularidades.
“El delito es el que se describe en el Código. Si la prueba no indica directa participación no se puede imputar delitos por meros indicios. La figura del garante institucional es usada muy comúnmente en el Derecho Civil. Y ni siquiera allí se hace responsable a la persona sino al Estado. Para un ejemplo común: si el intendente de una localidad cualquiera enviará fondos autorizados por el legislativo municipal a un director que desvía fondos, ¿sería responsable de algo que no participó?”, explicó un jurista de primera línea.
“La puerta que se abre es muy peligrosa. Fue juzgada en Santa Cruz y la sobreseyeron. La vuelven a denunciar en Capital y se arma otra causa. Principios como no ser juzgado dos veces por la misma causa y el de inocencia se ven conculcados. Se le exige prueba a ella y la prueba debe ser del Estado, o sea del fiscal”, agregó.
“La Corte Suprema consagró la “autoría por omisión impropia”: Cristina Kirchner no fue condenada en la Causa Vialidad por actos propios, sino por no impedir fraudes ajenos desde su rol de “garante institucional”. No se probó dolo directo, se criminalizó la actividad presidencial. Con esta jurisprudencia vigente, Macri y Milei también deberán terminar presos. No es opinión, es precedente penal”, marcó César Biondini, que tiene nada de kirchnerista.
El ministro de la Corte Suprema de Justicia de Santa Fe, Daniel Erbetta, lanzó una crítica sin concesiones a la causa Vialidad, que “no puede sostener ningún tipo de validez” desde el punto de vista constitucional y lo calificó como “un grotesco jurídico” que vulneró garantías elementales del derecho penal moderno.
Erbetta enumeró cinco aspectos fundamentales en los que el juicio, a su criterio, vulneró garantías básicas de la ex Presidenta:
- Principio de inocencia: criticó expresiones que invierten la carga de la prueba, afirmando que el imputado debe probar su inocencia”, lo cual “en una facultad de derecho no aprueba ni un examen básico”.
- Admisibilidad de la prueba: cuestionó la incorporación de evidencia en etapa de alegatos, sin haber sido presentada oportunamente ni debidamente controlada. “No se puede traer prueba por la ventana y que el tribunal lo permita. Esto es elemental”, advirtió.
- Imparcialidad del juzgador: vínculos informales entre jueces y actores políticos enfrentados con los imputados, señalando que incluso “uno de los jueces se mostró en televisión con un mate con el escudo de su equipo de fútbol, en una actitud provocadora”.
- Oralidad real: el uso de lecturas de guiones por parte del fiscal, afirmando que “un juicio oral no puede consistir en leer un texto escrito, eso va contra el principio mismo de oralidad”.
- Derechos del imputado: que no se permitiera a la vicepresidenta declarar en un momento clave. “Quizás no querían que dijera lo que dijo”, deslizó.
En clave política, el fallo de la Corte se lee como muy peligroso. No sólo por la inmensidad de que tres personas se impongan por encima de la voluntad popular, sino como una amenaza a cualquier presidente, incluso el propio Milei, que tiene ya un par de causas abiertas. Es decirle a quien se siente en el sillón de Rivadavia, que el poder dado por la sociedad para tomar decisiones, no es el más importante.
La condena de Cristina Fernández debería preocupar a toda la política. Incluso al presidente Javier Milei y a quienes aspiran a sucederlo. El poder le está diciendo a la política qué rumbo debe tomar. Cualquier decisión administrativa será pasible de ser revisada por jueces acólitos -no siempre independientes del poder de turno- y el ejecutor, condenado. Sería una parálisis inmediata de las decisiones políticas.
A Cristina no le encontraron pruebas y hasta el propio ministro de Justicia de la Nación, Cúneo Libarona, admitió previamente que no había elementos de certeza que vinculen a la ex presidenta con sobreprecios o hechos de corrupción. Si los hubiera ¿Qué pena le cabe a los diputados que aprobaron los presupuestos? ¿A la comisión de seguimiento? ¿A los organismos de control? Una inmensa cadena de responsabilidades. ¿El presidente es el que debe controlar que no haya irregularidades? Poco serio.
Si la política acepta sumisa el fallo de la Corte, se someterá al poder tras bambalinas. No es Cristina.