Con el envión del dólar, cinco empresas tealeras medianas fueron a reconquistar el mercado de Rusia
Dicen que crisis es también oportunidad. Con el envión que da el dólar alto, cinco empresas tealeras de Misiones viajaron a Rusia para re conquistar ese mercado, que supo ser un gran comprador del producto.
“En su momento Rusia fue uno de los principales compradores del té argentino, pero cuando se encareció el té nuestro, lo buscaron en otros mercados”, explicó Renzo Klimiuk, en diálogo telefónico con Economis desde la mismísima Plaza Roja. Klimiuk Infusiones es una de las cinco firmas que participan de la iniciativa.
Además de Klimiuk, el grupo está integrado por Don Layo SRL, Empro SRL, WK1 S.A. y la Cooperativa Ruiz de Montoya.
Estas empresas formaron hace más de un año un consorcio tealero que busca oportunidades para exportar té en mercados no tradicionales. Estados Unidos es el gran comprador de té misionero en la actualidad. El consorcio está buscando abrir negocios en países como Rusia o Siria.
El consorcio apunta a unir esfuerzos y que todos juntos actúen como una empresa más grande, sumando volúmen en la oferta exportable y esfuerzos comerciales. Le venderán todos juntos a los mismos clientes.
Como se sabe, los grandes exportadores de té argentino son las firmas Don Basilio, Casa Fuentes, El Vasco y Urrutia. Algunas de estas empresas actualmente venden pequeñas cantidades de té a Rusia, pero es una oferta muy chica en relación al tamaño de este mercado. Los rusos son grandes aficionados al té.
“Son el segundo importador a nivel mundial, hoy con un dólar competitivo podemos de vuelta ingresar té argentino, por el interés que están mostrando tenemos posibilidades de ingresar, té negro con volúmenes interesantes”, detalló el empresario que tiene su planta en Campo Viera.
Después de visitar a nueve empresas rusas -todos potenciales compradores-, organizar degustaciones y muestras, los empresarios visitarán también Polonia y Alemania. “Estas empresas también están interesadas en yerba mate”, explicó Klimiuk.
Además de Klimiuk, integran la misión Helmuth Kummritz (Coordinador del Consorcio), Leandro Budemeyer (vendedor de Klimiuk), Javier Vancskik de WK1. Todos ellos recibieron apoyo de la Embajada Argentina en Moscú, que ayudó a contactar a las firmas rusas.
“Sin dudas, la suba del dólar ayuda para la competitividad de las exportaciones, pero estamos sorprendidos con las noticias que llegan de Argentina. La incertidumbre y la crisis no es buena”, aclaró Klimiuk, refiriéndose a la disparada de la divisa en la Argentina.
Además del mercado externo, el consorcio -que se llama Conextea- está trabajando con la reconocida sommelier Inés Bertón, para diseñar un blend para el mercado local.