Crucero licenció al plantel y abonará los sueldos hasta marzo
El conjunto misionero también sufre las consecuencias que va dejando el coronavirus y con el campeonato del Federal A finalizado, o mejor dicho suspendido, ya que la AFA y el Consejo Federal instan a que los ascensos se disputen en el verde césped cuando las autoridades sanitarias lo permitan.
Por ello, los directivos del Club Crucero del Norte decidieron licenciar al plantel hasta nuevo aviso y avisó que solamente abonará los salarios correspondientes al mes de marzo. Sin embargo nueve contratos profesionales, por intermedio de AFA, finalizan el 30 de junio (el resto de los jugadores tienen vínculos directos con el club) y varios players recurrirán al gremio para cobrar la totalidad.
“Lógicamente por no saber que pueda pasar en días más o meses venideros, el Club Crucero del Norte como otros tantos clubes se ve en la obligación de tomar medidas por más duras que sean. En este caso licenciar a los jugadores, que cada uno de ellos perciban sus haberes hasta el mes de marzo y trasladarse hasta sus respectivos domicilios”, expresó la institución a través de un comunicado en su página web.
En las próximas horas, los jugadores con domicilio fuera del territorio misionero, recibirán un permiso especial del gobierno provincial para retornar a sus hogares en unidades de la empresa de micros de Crucero del Norte o en autos particulares de aquellos que lo posean.
“Los jugadores del ascenso son trabajadores del fútbol, dependemos de la remuneración mensual para llevar el pan a nuestra familia”, dijo el capitán colectivero en diálogo con Zona Mixta, programa de Canal 12. Asimismo expresó que se encuentran en una etapa de negociación con los directivos y mostró optimismo en que podrán percibir la totalidad de lo pactado.
“Hablamos con el gremio para que nos ayuden los meses que no vamos a tener ingresos que sería desde julio hasta diciembre”, mencionó el cordobés.
“… el club no puede seguir facturando en cuanto a sponsors importantes, cuotas societarias y otros ingresos que hacen del sustento en sueldos, alquileres y gastos varios que representa la participación del primer equipo en el torneo. A partir de este momento, todos los integrantes del plantel, cuerpo técnico y allegados al mismo, están oficialmente dados de licencia hasta nuevo aviso”, reza uno de los fragmentos crudos del comunicado.
Sin lugar a dudas la realidad económica de los jugadores del ascenso es distinta a la de unos pocos de primera división, no obstante los clubes caminan por los mismos senderos que ellos y sin actividad los ingresos se ven reducidos prácticamente a la nada misma. Una guerra entre pobres que, lamentablemente, tendrá varios capítulos que se resolverán a través de acciones legales.