El vivero boutique que “floreció” con la pandemia
Viverarte es uno de los viveros que más está creciendo en Posadas a partir de la pandemia del Coronavirus y el aislamiento que trajo aparejado.
Asesoramiento, venta on line y delivery de plantas se combinan en este negocio familiar pujante, que fusiona botánica y decoración; mediante una producción basada en abonos naturales, amigable con el medio ambiente.
“Mucha gente se volcó con la cuarentena a mirar la casa con más cariño, el que puede pinta, o mejora algo, compra utensilios para la cocina o un mueble y esa tendencia también se nota mucho en la renovación del jardín o espacios como el balcón o un pequeño patio. Aumentó el interés por tener plantas y cuidarlas, ya que al pasar tanto tiempo en casa hace falta un poco de naturaleza y de verde”, explica la nutricionista y viverista Florencia Orlando.
Atendido por sus dueñas, las hermanas Florencia, Rocío y Lucia Orlando y su mamá, María Teresa Zamora -quien fundó el vivero en 1989-, Viverarte queda sobre av. Lucas Braulio Areco 4226 , esquina Chacabuco (a 2 cuadras de la capilla Santa Rita) y es todo un oasis en plena ciudad.
Posadas no carece de verde -es cierto-, pero el espacio de las Orlando ofrece la posibilidad de relajarse en un ambiente que se asemeja a un jardín botánico o a una huerta bien surtida, pero sobre una avenida transitada de la capital misionera.
En un predio que ocupa casi toda una manzana y rodeado de tacuaras que le dan un marco natural a la calidez de sus dueñas.
Asesoramiento y delivery de plantas
Con la pandemia, este que ya era uno de los principales viveros de la ciudad, experimentó un incremento de las ventas por canales digitales, en especial la página de Instagram (viverarteenlatierracolorada). También están presentes en Facebook y Whatsapp.
Las hermanas Orlando brindan asesoramiento personalizado y se definen como un “vivero boutique”, que combina botánica y diseño y donde se consiguen sets armados y objetos exclusivos, ideales para ambientar espacios.
El vivero mantiene una línea de cultivo orgánico, amigable con el medio ambiente. Además, hacen entregas a domicilio y fueron aceitando la logística para brindarle al comprador todas las posibilidades de renovar su casa o hacer regalos “verdes”, sin moverse del hogar.
Con atención al público on line, Viverarte está siempre abierto en canales digitales. Pero ahora también abre al público dos días a la semana (miércoles y sábados) y cada vez se acercan más clientes nuevos que están experimentando eso de poner flores o plantas en espacios chicos,
como un balcón o un patio pequeño.
No son pocos los que optan por quedarse disfrutando del verde y eligiendo plantas o flores por más de una hora, gozando también de una experiencia que es un cable a tierra.
“Creemos que las huertas son una invitación a vivir de un modo más sustentable. El sueño de la huerta propia se puede hacer realidad y es accesible al bolsillo, prácticamente cualquier espacio es apto para hacerlo y cada vez más gente busca mejorar su alimentación, tener sus propias plantas o producir romero o albahaca para usar cuando cocinan”, dice Florencia, una nutricionista que trabajó en Formosa con la comunidad QOM y trajo también enseñanzas que volcó a Viverarte.
Precios acomodados a la crisis
A la hora de los precios, Viverarte trabaja con valores acomodados al bolsillo del posadeño, y a la situación actual que atraviesa el país.
“Es la mejor inversión, con menos de 1.000 pesos se puede hacer una pequeña transformación y es calidad de vida”, asegura Florencia.
Los plantines de flores cuestan 45 pesos, aromáticas para armar una huerta están a 70 pesos (romero, orégano, tomillo, ciboulette, perejil, etc.) o una planta armada para regalos personales o empresariales, desde 500 pesos en adelante.
Se promueven además de plantas ornamentales, árboles y arbustos de sombra, frutales nativos y de América.
Tips para armar una mini-huerta en el hogar
Como no podía ser de otra manera, le pedimos a las viveristas, algunos consejos para quien esté comenzando y tenga intenciones de armar su propia huerta.
Esto es lo que nos recomiendan tener presente:
- Elegir un lugar que tenga, como mínimo, 4 horas de sol al día. Lo ideal es el sol de la mañana, con ubicación Noreste.
- Contenedores: macetas, jardineras plásticas, fibrocemento, madera. Todas con muy buen drenaje para el agua y la salud de las plantas.
- Si el contenedor es de madera, protegerlo con alguna pintura impregnante, como aceite de lino. La profundidad ideal es de 40 centímetros (para cultivos de raíces, como zanahoria, rabanitos, remolacha o maní).
- Elegir las semillas o plantines a trasplantar de acuerdo al consumo/gustos y a la época del año.
- Elegir un buen suelo, con materia orgánica, cenizas, suelo rojo profundo, suelto, para buen desarrollo de raíces.
- Siembra directa o realizar germinadores para luego trasplantar al espacio definitivo.
- Tratar de asociar en un mismo espacio diferentes especies. Ejemplo: plantas de hoja como lechuga, de fruto (tomate o morrón), de raíz como zanahorias o rabanitos y flores (caléndulas, cosmos, girasol).
- Cubrir el suelo con hojas secas o pasto seco, para evitar su erosión por acción de las lluvias y vientos, lo cual ayuda a mantener la humedad y se convierte en alimento para las plantas.