Entrevista al gobernador de La Rioja: “Apoyamos al Gobierno, pero no recibimos reciprocidad”
Sergio Casas cuida cada palabra. Y hace equilibrio. Destaca el “apoyo” de La Rioja al gobierno de Mauricio Macri, pero enseguida advierte que ese respaldo no tiene contrapartida para la provincia y que la distribución de fondos federales sigue siendo desigual. Detrás de la queja, llegan los elogios a figuras del oficialismo y, más adelante, nuevas críticas.
-¿Cómo evalúa la primera mitad del gobierno de Macri?
-Soy muy respetuoso de la voluntad popular. Somos democráticos y hemos decidido apoyar a este gobierno porque entendemos que si les va bien a ellos nos va bien a todos. También entendemos que debería ser recíproco: nosotros apoyamos la gobernabilidad y ellos nos tienen que apoyar a nosotros. De hecho, nuestros legisladores votaron las leyes que necesitaba el Poder Ejecutivo y en La Rioja seguimos teniendo el problema del punto de coparticipación que nos arrebataron en 1988, que significa entre 30 y 40 por ciento del presupuesto total de la provincia. Para nosotros estos dos años han sido bastante complicados. Queremos que le vaya bien [al Gobierno], pero no hemos recibido la reciprocidad del caso.
-¿Por qué los diputados peronistas de su provincia votaron en contra de la reforma previsional?
-Entendemos que no tenía por qué afectarse a los jubilados habiendo otras variables económicas que se pueden tocar, sobre todo el endeudamiento. También hubo una decisión en conjunto por no haber recibido apoyo por el punto de coparticipación.
-Por primera vez en 30 años el Poder Ejecutivo puso cero en esa partida del presupuesto. No tuvo en cuenta los 2500 millones de pesos que había puesto el año pasado. Haber conseguido 300 millones más es todo un logro por el que quiero agradecer a Miguel Pichetto, a los integrantes del Bloque Justicialista y muy especialmente al presidente de la Cámara, Emilio Monzó, y a Nicolás Massot, que han contribuido para que se restituya esto.
-Pero el reclamo es por $5600 millones.
-Es cierto. Son apenas 300 millones más respecto del año pasado. Eso, a una provincia totalmente dependiente de recursos nacionales, la afecta muchísimo.
-¿Teme represalias del Gobierno?
-No me atrevería a decir eso. El gobierno de La Rioja vino dando gestos acabados de apoyo desde el comienzo de la gestión nacional. Pero la reciprocidad con la provincia nunca se dio.
-¿Cuál es la ventaja de apoyar al Gobierno si no hay reciprocidad?
-Como le dije, somos muy respetuosos de la voluntad popular y entendíamos que teníamos que acompañar con las leyes, pero también entendíamos que tenía que existir reciprocidad. En el presupuesto actual, por ejemplo, La Rioja tiene asignadas 370 viviendas, cuando el déficit habitacional es de 10.000.
-Algunos gobernadores opinan que Macri se maneja con la chequera y el látigo, igual que el kirchnerismo.
-Siempre fui prudente y respetuoso. Siempre apostamos al diálogo. Entendíamos que Macri tiene un discurso de federalismo, pero no hay nada más injusto que distribuir igual a los que somos desiguales.
-¿Macri contribuye a esa distribución desigual?
– No quiero ser grotesco ni irrespetuoso. Apuesto a que tiene que haber equidad y políticas que corrijan los desequilibrios naturales que tenemos en el país. No puedo culpar al presidente Macri de todo lo que nos pasa a los riojanos por el punto de coparticipación, porque esto es histórico. Macri no es responsable de todo, pero como tiene el recurso del federalismo apostamos a que esto se concrete.
-¿Va a apoyar la reforma laboral?
-Todavía no hemos hablado del tema. Tengo entendido que la CGT ha acordado con el Gobierno.
-En su provincia dicen que el gobernador “real” sigue siendo Beder Herrera. ¿Cómo le cae?
-Tengo una amistad de años con el doctor Beder Herrera. Siempre hemos trabajado juntos. Eso lo dicen quienes denuestan nuestro proyecto, que es exitoso para la provincia. Está perfectamente claro que el gobernador electo soy yo y que el doctor Beder Herrera es un gran hombre que conduce el partido y cada uno tiene su lugar. Lo que diga la oposición corre por cuenta de ellos.
-¿Cómo quedó la relación con Macri después del debate de la reforma laboral?
-Tengo una excelente relación con el ministro [del Interior, Rogelio] Frigerio, con Monzó y con Massot. Les tengo respeto y agradecimiento frente a lo que hemos vivido en los últimos tiempos.
-¿Cómo debe seguir la “renovación” del peronismo?
-La renovación no quiere decir que todos los días se tiene que tirar a un viejo por la ventana. Tiene que basarse en hechos concretos para ser alternativa de poder.
-¿Quién podría liderar el proceso?
-Ay… si lo supiera. Lo ideal sería llamar a elecciones internas para que salgan los mejores y con el mayor consenso.
Fuente: LN