La recuperación del día después
El 70 por ciento de recursos que Misiones invertirá en áreas sociales en el Presupuesto 2021 es un indicador de las necesidades que habrá que atender cuando se corra el telón de la pandemia. Educación disruptiva, salud, recuperación de pymes y emprendedores, apoyo a municipios ocupan buena parte de los 141 mil millones de pesos proyectados por el gobernador Oscar Herrera Ahuad. El récord de recursos destinado a las áreas sociales es una ratificación del rumbo tomado en la tierra roja. Desde hace algunos años la educación tiene la porción nominal más alta y en 2020, el 60 por ciento del dinero fue destinado en conjunto al área educativa, la salud y el desarrollo económico. Desde la industrialización de la producción primaria hasta la asistencia al pequeño autónomo sin acceso al crédito bancario ni a asistencia financiera. La pandemia no hizo más que profundizar una decisión política con el foco está puesto en la recuperación rápida.
Y ahí radica el interrogante del momento. La pandemia causó estragos en la economía mundial y desnudó las vulnerabilidades hasta de los más poderosos.
El PBI de Alemania, donde Ángela Merkel hizo una administración firme de la crisis, cayó 10,1 por ciento en el segundo trimestre, un desastre sin precedentes desde 1979. En Estados Unidos, donde Donald Trump priorizó la economía por sobre la prevención, la actividad se hundió 32,9 por ciento en el segundo trimestre, un dato más negativo que en la Gran Depresión. En España: la economía se contrajo 18,5% en el segundo trimestre, el desplome más abrupto del que se tengan registros. Brasil caería más del 9 por ciento y ya se destruyeron 1,2 millones de empleos. En general, caen las economías de todo el mundo.
Algunos economistas señalan que las crisis obedecen a la cuarentena y no a la pandemia, porque Estados Unidos y Alemania registraron crecimientos en el primer trimestre y tendrán una recuperación más rápida pos pandemia. Como sea, el coronavirus demolió convicciones y se expandió con cuarentena o sin ella.
Los dos países con más contagios y más muertes, son Estados Unidos y Brasil. Ambos presidentes despreciaron las medidas de prevención y acumulan 157 y 92 mil muertes respectivamente.
Al final será relevante el análisis sobre cómo protegió la salud cada país y los planes para recuperar la economía.
La Argentina tuvo tiempo para prepararse y se decidió apostar por la salud. Misiones fue incluso más severa en las medidas de restricción iniciales y el resultado es que la provincia se mantiene como una de las que menos contagios, pese a estar prácticamente rodeada por Brasil, donde la expansión del virus no se detiene.
Esas medidas restrictivas iniciales fueron la llave para poder poner en acción a la economía mucho antes que el resto. La actividad productiva prácticamente no se detuvo y la comercial volvió con medidas adaptadas a la nueva normalidad. La gestión tampoco se detuvo. Posadas estrenó una nueva sala de terapia intensiva en el hospital Favaloro de Villa Cabello, construida con recursos propios y que aporta camas necesarias en el momento justo. Herrera Ahuad es quien supervisa diariamente el avance de cada frente de obra o decisiones en las distintas carteras. Este sábado estuvo en San Javier, donde el ingenio azucarero se reconvirtió durante la pandemia en una enorme fábrica de alcohol. El mandatario insiste cada vez que puede en el rol central que tendrá el Estado en la recuperación pos pandemia.
En Posadas ya hay movimiento relevante en la gastronomía y los pubs, además de los comercios, beneficiados por una frontera que seguirá cerrada por un tiempo más. A eso se suma una intensa gestión que lidera el intendente Leonardo Stelatto, con un despliegue inédito de obras en distintos barrios, calles y avenidas, además de asistencia directa a pequeños emprendedores que necesitan una mano en la pandemia.
El turismo, por etapas y con grupos reducidos, también volvió después de varios meses de parálisis y, pese a todo, se espera una rápida recuperación cuando se habilite la circulación nacional.
El Hot Sale dio algunas positivas sobre la reactivación cuando haya vía libre al transporte. El turismo quedó entre lo más vendido en la feria de ofertas virtuales y las Cataratas del Iguazú entre los cinco destinos favoritos. En tres días se vendieron cuatro mil viajes al atractivo misionero: el 56 por ciento planea venir en verano, entre diciembre y marzo, un quince por ciento en octubre y el resto en Semana Santa de 2021.
El dato es alentador y anticipa un verano hot para Misiones, ya que es poco probable que los destinos extranjeros como Brasil, donde los contagios se multiplican por hora, sean elegidos.
La administración de las restricciones fue fundamental para una reactivación segura. Las Cataratas del lado brasileño, que habían abierto sin restricciones en junio, tuvieron que volver sobre sus pasos ante el crecimiento exponencial de contagios en el estado de Paraná, uno de los más complejos y con récord de contagios en las últimas 24, con 2.605 nuevos casos y 1.899 fallecidos. Ahora reabrirán el 4 de agosto, pero con un protocolo muy similar al aplicado en Misiones. Es un ejemplo de las consecuencias de la falta de coordinación y liderazgo positivo en Brasil. Muchos estados y ciudades recién ahora están tomando medidas restrictivas presionados más por las muertes y la crisis económica que igual ocurrió, que por el coronavirus. Brasil cerró julio con 32.912 nuevas muertes y más de 92 mil fallecidos.
Misiones, con más de 90 por ciento de frontera con Paraguay y Brasil, resultó una barrera de contención para la expansión del virus y un ejemplo del manejo de la crisis en materia sanitaria. Los gobernadores del AMBA, Axel Kicillof y Horacio Rodríguez Larreta adoptaron una estrategia de apertura gradual de las actividades para intentar atenuar la curva de contagios. Obviamente, la situación no es la misma con el núcleo duro de circulación en ambos distritos. Pero, como planteó el presidente Alberto Fernández, si bien los casos se concentran en el AMBA, desde allí se irradia contagios a provincias como el sur de Santa Fe, Entre Ríos y Córdoba y focos en el interior del país, como Jujuy, Chaco y Río Negro.
La estrategia unificada es un acierto de la política. Larreta está codo a codo con Fernández y Kicillof, a contramano de las señales que emite su propio líder, quien desdeña las restricciones de la cuarentena y se dedica a hacer campaña por la liberación de las actividades económicas. “Acá se vive en libertad y con responsabilidad”, dijo apenas pisó el suelo de París, donde hará una obligatoria cuarentena en un hotel de lujo antes de seguir viaje a Suiza, donde tendría una reunión con el investigado por corrupción Gianni Infantino, el cuestionado presidente de la FIFA, que le dio conchabo apenas el argentino abandonó la Casa Rosada.
Más allá del elogio a la Liberté francesa, Argentina, con más casos que Francia, tiene a cinco meses de los primeros contagios, el diez por ciento de las muertes del país europeo: 30.265 contra 3.558 al cierre de esta columna.
Rodríguez Larreta aparece como el más moderado dentro de la alianza Cambiemos, que ahora, sin responsabilidades para gobernar, se dedica a alimentar la grieta sanitaria. La sintonía con Fernández y Kiciloff es un paso adelante de una política que está adormilada.
Después del traspié de Vicentín, cuya intervención terminó en la nada, Fernández intenta recuperar iniciativa con una reforma judicial que aparecía entre sus ejes de campaña y que ahora irá al Congreso, con un objetivo central y varias ramas secundarias. El central, dinamitar el poder de Comodoro Py, donde tienen sus oficinas una docena de jueces federales que tienen (siempre) en jaque a la política y a la economía. ¿El cómo? Dividiendo competencias. Hoy en Comodoro Py los jueces entienden sobre lo penal, lo económico, lo tributario. La idea es que haya fueros penales exclusivos y que del resto se encarguen otros jueces. Se duplica el número de cargos y a su vez, se dividen secretarías para, en lugar de doce, contar con 46 magistrados federales nuevos.
El mismo desdoblamiento se dará en las provincias. Misiones, que tiene cuatro juzgados federales, pasará a tener el doble, con competencias diferenciadas.
También se crea un consejo de asesores -sin presencia de juristas de la región- para revisar el funcionamiento de la Corte Suprema y el Consejo de la Magistratura nacional. Una de las opciones en estudio es ampliar el número de integrantes de la Corte.
Como era de esperar, la alianza Cambiemos ya anticipó una negativa rotunda al tratamiento de la iniciativa, pese a que el diseño toma propuestas de… Cambiemos.
“Intentamos poner en marcha una iniciativa que ya tuvo trámite parlamentario en el Congreso y que por las normas reglamentarias vigentes, ha caducado”, dijo el Presidente. En efecto, la iniciativa que se propone recoge el texto de un proyecto de ley impulsado por la anterior gestión de gobierno en el marco del programa “Justicia 2020”. El proyecto citado fue presentado ante el Senado de la Nación por los senadores Humberto Schiavoni, Federico Pinedo, Ernesto Martínez, Rodolfo Urtubey, Luis Naidenoff y por la senadora Silvia Elías de Pérez.
Aquella iniciativa tuvo en consideración los 114 proyectos de ley presentados desde 2008 sobre creación de juzgados federales, poniendo el objetivo en el fortalecimiento de la justicia federal con asiento en las provincias y la especialización por materia evitando con ello el establecimiento de competencias múltiples.
“Con el cierre de miles de empresas se derrumba la economía y la pobreza aumenta pisando el 40 por ciento se plantea una reforma judicial que no es prioridad, que es política y tiene olor a impunidad. Imposible estar de acuerdo, al menos en estos tiempos”, argumentó un diputado provincial de Cambiemos.
Es curiosa la reflexión del joven legislador. Macri, quien designó dos jueces de la Corte por decreto, presentó su propio proyecto de reforma en 2016 y decía: “Tenemos que tener coraje, generosidad y humildad para sentarnos a una mesa y dialogar, debatir e impulsar una reforma, una reforma en serio. Y ese debate, no puede alcanzar solamente a los integrantes del Poder Judicial, tiene que estar las universidades, los académicos, los profesionales, las ONGs, todo aquel que crea que tiene algo para aportar y de ahí, seguro -estoy absolutamente seguro- que va a salir algo muy bueno y con lo cual nos tenemos que comprometer”.Dato extra, durante la gestión de Cambiemos, cuando la reforma judicial era igual de necesaria, cerraron 24.537 pequeñas y medianas empresas en la Argentina. La pobreza superó el 40 por ciento y aumentó diez puntos en la era Macri. Y no había pandemia.