Misiones hará un intenso despliegue en terreno para mejorar resultados en Lengua y Matemáticas
En los momentos de crisis económica, la educación es la más afectada. No importa cuánto se ponga como “prioridad” a la educación. Los problemas económicos, se traducen en peores resultados educativos, deserción y repitencias. Ese escenario, obviamente, ya comienza a percibirse en las aulas misioneras. Por eso se decidió actuar en la prevención, con un despliegue intenso en los puntos del mapa que son los más complejos. Se identificaron siete departamentos, que combinan problemas sociales con un ingrediente adicional: son los lugares donde hubo mayor conflictividad sindical. El impacto de la ausencia de docentes frente al aula es brutal. Y un tiempo irremediablemente perdido para los estudiantes.
Allí se trabajará especialmente. Los operativos comenzarán en septiembre, con el eje en Lengua y Matemáticas, con equipos soporte para las escuelas. La flamante subsecretaria de Educación, Gabriela Basterrechea está al frente del plan intensivo.
“Tenemos que ser realistas y reconocer la situación diagnóstica ¿dónde estamos? Sin ningún tipo de ocultamientos, hay que ser totalmente sinceros para abordar o pensar en mejorar esos índices que nos está mostrando la cuestión social y donde el docente es como el termómetro”, define.
El despliegue territorial se hará en conjunto con la Secretaría de Educación de la Nación, en un diseño de Red Federal de Alfabetización. Misiones apuesta a la transversalidad en los distintos niveles educativos y en la formación docente.
Se enfocará el trabajo disruptivo en lengua y matemática, con la participación de ciencias.
El mapa de complejidades abarca ciudades y zonas rurales, pero la particularidad es que se identifican zonas críticas donde más días de paro hubo.
“Las pruebas Aprender marcan bien los lugares donde tenemos que ocuparnos, donde debemos reforzar el acompañamiento de la trayectoria. La problemática social no es el único indicador. Tenemos sobreedad, desgranamiento”, explica Basterrechea.
Misiones tiene la particularidad de que hay más escuelas en el ámbito rural que en el urbano. Ahí también se pondrá el foco: acompañar a los docentes y las escuelas más alejadas. “Debemos tener mayor presencialidad y acompañamiento en territorio. Es mi objetivo de gestión. Siempre pensamos en el estudiante, en cómo mejorar sus trayectorias, pero también quiero poner en valor el trabajo del docente, que también necesita ese acompañamiento.
Entre 2017 y 2023, la matrícula creció 3,60 por ciento, mientras que el índice de desgranamiento es de 6,30%. Ese indicador muestra que de cada 100 alumnos que comenzaron primer año de la primaria en 2017, aproximadamente seis alumnos no llegaron al séptimo grado en 2023.
En la secundaria, el porcentaje de repitencia bajó de 8,62 por ciento en 2016 a 6,66, después de picos de más de 10 puntos en 2020. Sin embargo, el último año volvió a subir contra 2022. En contraste, la tasa de sobreedad es de 27,23%, la más baja desde 2016.
En el nivel primario, comparando 2023 contra 2021, los resultados de las pruebas Aprender indican que disminuyó 2,8 por ciento el porcentaje de estudiantes con un desempeño por debajo del nivel básico. Pasó del 30,1% al 27,3%. En paralelo, aumentó 1,5% el porcentaje de estudiantes que presentan un desempeño de nivel básico, del 24,2% al 25,7% y aumentó 3,1 por ciento el número de estudiantes que presentan un desempeño de nivel satisfactorio, del 33,7% al 36,8%.
En Lengua, también en primaria, bajó 14,8% el número de estudiantes que presentan un desempeño por debajo del nivel básico en comparación con el 2021, del 27.7% al 12,9%. Asimismo, creció seis por ciento el volumen de estudiantes que presentan un desempeño de nivel satisfactorio en comparación con el 2021, del 31,8% al 37,8%. También creció 8,4% el número estudiantes que presentan un desempeño de nivel avanzado, del 15,9% al 24,3%.
En el nivel secundario, los datos son más preocupantes. En Matemática, los resultados fueron más desfavorables que en Lengua, con 8,5% más de chicos con un desempeño “Por debajo del nivel básico”, respecto al 2019.
Al igual que en Lengua, los resultados son más desfavorables para el sector privado que para el estatal. El nivel de desempeño “por debajo del nivel básico”, en el sector de gestión privado es de 11,3 por ciento, contra 8 por ciento en el sector público.
Comparando con 2019 (antes de la pandemia), la cantidad de estudiantes con un nivel de desempeño “Por debajo del Nivel Básico” aumentó en un 5,3%.
Con respecto a los niveles de desempeño “Básico” y “Satisfactorio”, hubo una pequeña disminución en el rendimiento de los estudiantes, del 2,3% y 3,7% respectivamente. El desempeño del nivel avanzado presentó un incremento del 0.7%.
Con esos datos como diagnóstico, el trabajo en terreno impone celeridad.
“Tenemos que trabajar de manera articulada, todo el gobierno educativo. Lo que hicimos fue convocar a referentes del Consejo de Educación de los distintos niveles para fortalecer los planes de alfabetización con acciones concretas y agregamos formación docente”, describe Bastarrechea.
El plan está pensado para mostrar resultados en tres años y el despliegue en terreno se iniciará en septiembre.
Bastarrechea destaca que después de la pandemia, se mejoró la revinculación de los estudiantes. “Ahora los tenemos en la escuela y tenemos que trabajar en la trayectoria en matemática y en lengua”.
“Estamos en la conformación de los equipos territoriales, la selección de los perfiles de los docentes que van a van a ser parte y en la propuesta concreta que van a ir a trabajar”, explica la funcionaria de Puerto Rico y con una larga trayectoria educativa.
Los refuerzos pedagógicos se darán en las horas de clase con docentes externos que se sumarán a los que estén frente al aula. “Lo que nos toca a nosotros es sostener a los chicos dentro de la escuela y mejorar capacidades de comprensión”.