¿Misiones tiene el tren más caro del país?
El servicio de trenes que vincula a Posadas con la ciudad paraguaya de Encarnación sufrió un nuevo tarifazo y ahora los usuarios deben abonar 170 pesos para trasponer el límite internacional sin sufrir las interminables filas de autos en el puente “San Roque González de Santa Cruz”. En lo que va del año el aumento superó el 300% y convirtió a la línea férrea de tres kilómetros en uno de los servicios más caros del país, ya que por cada kilómetro recorrido el usuario abona 56 pesos.
El nuevo valor del pasaje se ajusta a lo establecido en la resolución 347/2019 que el Gobierno Nacional dio a conocer en junio pasado. Allí se fijaba en 171 pesos el valor máximo del boleto por cada tramo, pero sugería como precio la suma de 114 pesos. El texto señala que son “precios de referencia” y faculta a la Operadora Ferroviaria Sociedad del Estado a establecer valores de entre 56 y 171 pesos.
La fuerte caída en la cantidad de usuarios después de la devaluación del peso post PASO hizo que la empresa operadora del servicio aplicara un incremento de 50 pesos por boleto, convirtiéndose así en un medio de transporte imposible de utilizar para gran parte de la población.
Muchos de los usuarios optaron por volver a utilizar el servicio internacional de ómnibus, que es explotado por la misma empresa que opera el tren, Casimiro Zbikoski, reseña una nota de Ernesto Azarkevich en el diario Clarín.
El servicio comenzó a funcionar a principios de 2015, después de que el Estado Argentino y el Paraguayo, propietarios de la línea, decidieran entregar a Zbikoski la explotación del recorrido. Hasta principios de este año los usuarios contaban con servicio de tren los siete días de la semana, pero la empresa concesionaria decidió no abonar las tasas aduaneras establecidas para sábado y domingo y a partir de entonces las unidades sólo circulan de lunes a viernes en horario diurno.
A mediados de este año, la empresa sostuvo que la merma en la cantidad de usuarios comenzó el verano pasado y aún se mantiene. Los voceros estimaron que para tener algún margen de rentabilidad deberían contar con unos 3.000 pasajeros diarios y en ese momento la venta de tickets rondaba el millar.
La formación realiza 44 cruces diarios y la concesionaria adujo que la disminución en el número de pasajeros se debe a las asimetrías cambiarias “habituales en servicios de fronteras vecinales”.
El año arrancó con una tarifa de 50 pesos, muy similar a la del ómnibus internacional. El primer incremento fue razonable, ya que fue levemente superior al 10 por ciento; pero en junio el salto fue superior al 100% y el pasaje pasó a 120 pesos por tramo. Ahora el bolsillo del usuario sufrió otro golpe y abonar un viaje ida y vuelta sólo de lunes a viernes implica un gasto mensual de 7.500 pesos.