Monopatines eléctricos: 4 requisitos que debe cumplir el casco
Diariamente, por todas las ciudades, los monopatines eléctricos se mueven al compás de la circulación. Empujados por la conveniencia de evitar las aglomeraciones en el transporte público en plena pandemia, cada vez son más las personas que utilizan estos vehículos de dos ruedas para llegar a sus lugares de trabajo o estudio. Sus características primordiales, como “económico”, “ágil” y “versátil”, son las más resaltadas por los usuarios; pero ¿qué sucede con la seguridad de quiénes los usan? ¿Es obligatorio el uso del casco? ¿Hacen falta otros elementos de protección?
En un siniestro o simplemente una caída, el casco es el elemento que va a proteger la cabeza de lesiones, como los cortes y las fracturas de cráneo. Por eso, para evitar dichas lesiones siempre hay que usarlo, aunque el recorrido sea corto. La mayor cantidad de siniestros ocurren en la zona de confort, es decir, habitual. Además, no debe ser cualquier casco, existen exclusivos para monopatines eléctricos, muy similares y, hasta a veces, son los mismos que los de bicicleta.
MAX YOU, marca líder en micromovilidad sustentable, comparte los 4 requisitos que debe cumplir el casco y su uso:
1-Homologado: Es decir, cuando el fabricante lo ha sometido a una serie de procesos y ensayos que verifican que se cumplen con todas las prestaciones de seguridad básicas necesarias.
2-Tamaño correcto: Vienen en varios tamaños que varían según el fabricante. Un buen consejo es medir la circunferencia de la cabeza para obtener el talle aproximado. Lo importante es que quede bien sujeto a la cabeza.
3-Buen estado: Debe estar sano, sin grietas ni golpes visibles. Se deberá cambiar de casco si estuvo involucrado durante un siniestro, si está dañado o maltratado, o si ya queda pequeño.
4- Colocación: La posición correcta del caso es cuando está nivelado sobre la cabeza y cubre parte de la frente. Para probar si está correctamente puesto, hay que colocar uno o dos dedos sobre las cejas. Queda debidamente protegido, cuando el casco toca los dedos. Además, las hebillas y correas deben estar bien ajustadas. Por último, se debe realizar la prueba del bostezo: abrir la boca lo más que se pueda y se debe sentir cómo el casco presiona sobre la cabeza. Si no es así, hay que ajustar hebillas o correas.
A fines del año 2020, la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) reglamentó el uso obligatorio de casco y chaleco reflectivo, pero aún no existen sanciones por no usar dichos elementos. “Desde MAX YOU siempre recomendamos la máxima protección del usuario, porque eso es lo más importante. Cuidar su integridad física es más que necesario”, comenta Martín Maestrojuan, director comercial de MAX YOU. Y agrega, “Trabajamos mucho en este aspecto y hacemos hincapié para que el usuario comprenda que usar casco le puede salvar la vida, aun circulando a baja velocidad. La inercia que se produce al circular y la posición de la cabeza, hace que ésta tenga una energía cinética que se proyecte hacia adelante y al piso al momento de caer, por eso es tan relevante que se utilice un casco homologado. Además, también protege de los impactos que provienen de terceros”.
Siempre un buen casco es una excelente inversión ya que en caso de siniestro, puede ser lo que salve la vida.