#NiUnaMenos: en 2021 hubo dos femicidios cada tres días
En 2021 se registró 1 femicidio cada 34 horas. Según la Oficina de la Mujer de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, esto equivale a 251 víctimas letales de la violencia de género, es decir dos femicidios cada tres días aproximadamente. El 81% de los casos sucedió en contextos de violencia doméstica y el 62% de los femicidios fue cometido por parte de su pareja o expareja. A 7 años de la primera movilización de #NiUnaMenos, Amnistía Internacional denuncia la ineficiencia de las políticas vigentes para responder a esta problemática.
Cerca de 2 mil mujeres fueron víctimas de femicidios en todo el país desde la aparición del movimiento “Ni Una Menos”, hace siete años, según las estadísticas que elaboran distintas organizaciones feministas, las cuales revelaron que las provincias de Salta, Santiago del Estero y Jujuy son las que tienen las tasas más altas de casos en relación a la cantidad de habitantes.
Las cifras pertenecen a MuMaLá-Mujeres de la Matria Latinoamericana, al Observatorio Lucía Pérez y a La Casa del Encuentro, que elaboraron informes especiales que aglutinan sus datos desde el 3 de junio del 2015 -día de la primera marcha del “Ni Una Menos”-, y que usualmente elaboran sus propias estadísticas con el fin de visibilizar los hechos de violencia de género, basándose fundamentalmente en publicaciones periodísticas.
En tanto, el informe de MuMaLá destacó que el 75 por ciento de las víctimas (1467 casos) eran mujeres de entre 19 y 60 años, mientras que el 16 por ciento (312 casos) no superaba los 18 años y el 9 por ciento (176 casos) tenía más de 60 años, siendo 39 años la edad promedio de las mujeres asesinadas.
El relevamiento de La Casa del Encuentro añadió que el 16 por ciento de las víctimas (326 casos) había realizado una denuncia previa contra su agresor y que el 6 por ciento de los asesinos (122 casos) tenían una medida cautelar en su contra.
Al respecto, ese informe reveló que más de la mitad de los femicidios se registraron en la vivienda de la víctima, mientras que en las mayoría de los casos los asesinos eran o habían sido pareja de la mujer que asesinaron.
En relación a la interseccionalidad de las víctimas, MuMaLá relevó que el 7 por ciento (136 casos) de las mujeres asesinadas eran migrantes, ya sea provenientes de otro país o provincia, en tanto que el 3 por ciento (58 casos) ejercía la prostitución.
A nivel general, según los datos de La Casa del Encuentro, las provincias con mayor cantidad de femicidos en los últimos 7 años fueron la provincia de Buenos Aires (709), Santa Fe (211) y Córdoba (172).
Sin embargo, las provincias con una mayor tasa de femicidios cada 100.000 habitantes desde el 2015 fueron Salta (8,98), Santiago del Estero (8,24) y Jujuy (8,02).
En esa instancia, el dato saliente en relación con Misiones es que ostenta la segunda tasa más baja de femicidios cada cien mil mujeres con 0,16 -La Pampa tiene 0-. En relación con 2020 la tasa en Misiones bajó, ya que ese año llegó a 1,43 femicidios cada cien mil mujeres.
🟣 Abuso sexual infantil
En 2021, se registraron 3.219 víctimas de abuso sexual hacia niñas, niños y adolescentes, conforme información del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos. El 74,2% de las víctimas fueron violentadas por alguien de su entorno cercano o ámbito de confianza. Además, cada día, al menos 5 niñas menores de 15 años tienen un hijo o hija. La mayoría son consecuencia de situaciones de abuso y coerción, produciéndose embarazos infantiles forzados. Sin embargo, los delitos contra la integridad sexual son investigados de manera deficiente: solo el 15,5% llega a sentencia condenatoria, de acuerdo a la Unidad Fiscal Especializada en Violencia contra las Mujeres (UFEM).
Thelma Fardin sufrió abuso en su infancia y Amnistía Internacional acompaña su lucha por justicia. Su caso marcó un punto de inflexión en tanto contribuyó a que miles de mujeres rompieran el silencio y se animasen a denunciar la violencia de género.
🟣 Violencia de género online
La violencia de género también alcanza las redes sociales. Las mujeres y las personas LGBTI+ reciben a diario un aluvión de mensajes de odio, que las empuja a la autocensura. Hay quienes incluso optan por abandonar por completo las redes sociales y cerrar sus cuentas, debido a las agresiones recibidas. Esto afecta gravemente el debate público, ya que busca silenciar y disciplinar a mujeres y personas LGBTIQ+, especialmente cuando se vuelven referentes de la defensa de los derechos humanos y de los movimientos transfeministas.
🟣 Llamado a las autoridades
Las autoridades de los diferentes poderes del Estado no toman las medidas necesarias para combatir esta problemática estructural.
“Pese a la relevancia que se le ha dado públicamente a la lucha contra la violencia de género, continúan siendo bajos los índices de persecución y juzgamiento. Por todo esto, es indispensable realizar un diagnóstico sobre las deficiencias de las políticas públicas existentes, abordar las causas profundas de los femicidios, transfemicidios y travesticidios. Se deben dar respuestas desde un enfoque integral y adoptar medidas tendientes a garantizar el acceso a la justicia con perspectiva transfeminista”, señaló Mariela Belski, directora ejecutiva de Amnistía Internacional Argentina.
Amnistía Internacional exige al Estado trabajar en la producción de datos y estadísticas que permitan conocer la naturaleza y la dimensión de la violencia y también su manifestación online en el país. Además, solicita contar con leyes, planes de acción y políticas adecuadas para la erradicación de la violencia de género, y que contemplen su dimensión digital. Asimismo, resulta indispensable el fortalecimiento del rol de los organismos que brindan asesoramiento y apoyo ante casos de violencia de género cometido, asistido o agravados por el uso de las tecnologías de la información.