Se canceló este año la reforma del aeropuerto de Iguazú por falta de presupuesto
La obra de la reforma integral del aeropuerto Cataratas del Iguazú -que comprende una inversión de unos 1000 millones de pesos y estaba prevista para este año-, se prorrogó por falta de presupuesto, informaron fuentes cercanas al Gobierno misionero.
La obra iba a comenzar apenas terminara la temporada alta (Semana Santa) pero se fue demorando. Comprende unos cuatro meses de obra con el cierre por cuarenta días del aeropuerto.
Iba a ser la única gran obra de infraestructura que la provincia recibía de la Nación este año. Y hubiera servido para compensar un poco la gran caída que tuvo la construcción, en especial por la caída de la obra pública.
El 15 marzo del 2018 será el comienzo de la obra y el 15 de abril se cerrará el aeropuerto para permitir la reforma de la pista de aterrizaje. Es decir, el aeropuerto estará en obra pero permanecerá operativo en la Semana Santa del 2018. Durante el cierre los vuelos van a ser reasignados a Foz de Iguazú. Hoy están operando en Iguazú, Lan Argentina y Aerolíneas/Austral. El 3 de julio llegará el primer vuelo de Andes y se espera la llegada de otra low cost para fin de año, probablemente Avian.
Misiones, relegada en obras nacionales
El motivo que le dieron a los funcionarios misioneros desde Nación es que tienen que “reasignar” partidas. Ayer estuvo Alejandro Caldarelli, el número 2 de Rogelio Frigerio en el ministerio del Interior, probablemente para comentar esta novedad en forma personal con el gobernador Hugo Passalacqua.
Si bien las obras de reforma del aeropuerto las maneja el Ministerio de Transporte a través del ORSNA y Aeropuertos Argentina 2000, la concesionaria que hoy tiene una relación tensa con el Gobierno de Macri.
Misiones queda así como la provincia más perjudicada del Plan Belgrano en 2017, la única que no tiene una obra nueva de envergadura. Hay que recordar que hace poco Enarsa decidió “cortar” el gasoducto NEA, que ya no pasará con su traza por la provincia, trayendo el gas natural.
Tampoco se previo en el marco del Plan Belgrano la reactivación del tren Urquiza. Y no existen obras de envergadura a nivel vial. La única importante es la obra de autovía Santa Ana-San Ignacio, anunciada por Guillermo Dietrich en noviembre pasado.
La obra de 430 millones de pesos y tres años de duración (a cargo de Iecsa) va a ser financiada por la EBY y fue adjudicada a Iecsa. Sin embargo, estaba anunciado que arrancaría en enero pero estamos a junio y las obras no comenzaron.
A esto hay que agregarle el otro dato que golpea a la construcción en Misiones. El fin de las grandes obras complementarias de Yacyretá y un nuevo rol del IPROHDA. Ni el Iprohda ni Yacyretá serán motores de obras importantes como en los últimos diez años, coinciden los empresarios del sector.
Entre ellos, José Miño, uno de los empresarios metalúrgicos más importantes de la provincia, y Alejandro Cáceres Barrios, el titular de la delegación Misiones de la Cámara de la Construcción, en sendas entrevistas con Economis en los últimos días.
“Lo que pasó en los últimos diez años con Yacyretá no volverá”, dijo Miño. “Las obras que se están haciendo en Misiones son las que ya estaban en marcha, no hay stock nuevo, a fin de año podemos tener problemas”, dijo Cáceres Barrios.