Chile ordenó la expulsión de Facundo Jones Huala este lunes y como su familia dijo que volverá a Argentina, Patricia Bullrich le dio un fuerte aviso.

Tres días después de que la Corte Suprema de Justicia de Chile ordene la liberación de Facundo Jones Huala, el Gobierno de Gabriel Boric ordenó su expulsión este lunes (19/8). La decisión de los chilenos se hará efectiva cuando el activista mapuche recupere el alta hospitalaria y su familia dijo que volverá a Argentina.

La Justicia chilena había decretado el viernes pasado liberar a Jones Huala por considerar que estaba “ilegalmente privado de su libertad”, ya que su sentencia por los delitos de incendio y porte ilegal de arma de fuego cometidos en ese país en 2013 se había cumplido el 14 de junio pasado. La Corte Suprema hizo lugar a un recurso de amparo presentado por la defensa del exlíder de la Resistencia Ancestral Mapuche (RAM).

Pero Jones Huala todavía no está en condiciones de salud para volver a Argentina porque realizó una larga huelga de hambre en la cárcel para pedir su liberación, y tras conseguirla fue internado en el Hospital Intercultural de Nueva Imperial, en la provincia de Cautín. El hombre de 38 años, que había perdido peso y tuvo su vida comprometida, se encontraba hasta este lunes hospitalizado.

El sitio Bíobío Chile comunicó que la expulsión de Jones Huala del país trasandino se ordenó el 15 de julio pasado, pero este lunes se hizo efectiva. Los abogados de La Gremial, Eduardo Soares y Gustavo Franquet, le comunicaron a Clarín que debido a que Jones Huala es ciudadano argentino, nacido en Bariloche, no tendría problemas en volver al país en los próximos días.

Ante esta noticia, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, le hizo una fuerte advertencia al activista mapuche: “Jones Huala: espero que lo tengas bien claro. Si elegís volver al país para cometer delitos o alterar el orden público, el destino es claro: vas preso. No vamos a permitir que nadie atente contra la seguridad de los argentinos de bien.”, escribió en X.

Sin embargo, el panorama de Jones Huala hoy es muy diferente al que atravesaba en 2013, donde lideraba piquetes y tomas de tierra al “capitalista extranjero” con la Ram en tiempos del kirchnerismo. El mapuche perdió el liderazgo en su comunidad y sufrió la perdida de su hermano, quien se suicidó meses atrás en Bariloche. Además, el gobierno de Javier Milei, y como lo anticipó Bullrich, aplicará mano dura contra las posibles tomas en la Patagonia.

EL FALLO DE LA CORTE SUPREMA DE CHILE

La Corte Suprema de Chile, al hacer lugar al pedido de la defensa de Jones Huala, dijo el viernes (16/8) que a su juicio “esta Corte, aun cuando exista una discrepancia en el momento de término de la condena del amparado, lo cierto es que el cumplimiento de esta en territorio nacional es posible dada la extradición autorizada por la República Argentina, que tenía como supuesto un tiempo preciso a cumplir como saldo de condena, conforme se explicitó en el requerimiento de extradición”.

“El saldo de condena que el amparado debía cumplir conforme se estableció en las sentencias de extradición era de 1 año, cuatro meses y 17 días, a este periodo de tiempo se debe descontar el abono efectuado por el Juzgado de Garantía de Río Bueno, correspondiente al tiempo que el amparado permaneció privado de libertad en Argentina durante la tramitación de la extradición, correspondiente a 11 meses y 5 días, lo que equivale a 341 días. Así las cosas, el saldo que al amparado le resta por cumplir es de 5 meses y 12 días, que corresponden a 162 días”, agregó el jurado.

Por último, los jueves sostuvieron que “se viene razonado la privación de libertad del amparado se ha extendido por un tiempo superior al cual el Estado de Chile se obligó, de manera que, como se ha indicado no es posible invocar normativa interna para desconocer aquello y hacerlo no solo configura un incumplimiento a tratados internacionales, sino que en el ordenamiento interno deviene en ilegal”.

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