El Ministerio de Ecología de Misiones inspeccionó una planta citrícola en Montecarlo tras denuncias vecinales y detectó el vertido directo de residuos orgánicos sin tratamiento al río Paraná. La intervención busca hacer cumplir las normativas ambientales vigentes y preservar tanto los recursos naturales como la salud pública.

La inspección fue realizada por técnicos de la Dirección de Impacto Ambiental y de la Dirección de Recursos Vitales, quienes confirmaron la presencia de residuos sólidos orgánicos en las márgenes del río, generados por una planta de procesamiento de cítricos en Montecarlo. Los desechos consistían en pulpas, restos de frutas y semillas en avanzado estado de descomposición.

El material había sido arrojado sin ningún tipo de tratamiento previo, lo cual constituye una infracción a las normativas de gestión ambiental y representa un riesgo tanto para la biodiversidad acuática como para los vecinos de la zona.

Relevamiento con acompañamiento institucional

La intervención fue coordinada por el Ministerio de Ecología y Recursos Naturales Renovables de Misiones, con participación de funcionarios de la Municipalidad de Montecarlo y efectivos de la Policía Ambiental provincial. El operativo se llevó a cabo en respuesta a reclamos de la comunidad por la contaminación visual y olfativa registrada en la ribera del Paraná.

El Ministerio informó que ya se iniciaron las actuaciones administrativas correspondientes, y que se continuará con el seguimiento del caso para garantizar que se respeten los estándares ambientales.

Contexto y normativa ambiental

La legislación ambiental vigente en Misiones obliga a las industrias a gestionar adecuadamente los residuos generados por su actividad, con especial atención a los desechos orgánicos provenientes de la agroindustria. El vertido sin tratamiento puede afectar el equilibrio ecológico del río Paraná, una fuente clave de biodiversidad, agua potable y actividades económicas como la pesca.

Este tipo de intervenciones se enmarcan en una política provincial que prioriza la fiscalización ambiental y la protección de los recursos naturales frente a prácticas industriales irregulares.

Las autoridades del Ministerio de Ecología continuarán el proceso sancionatorio si se comprueba la responsabilidad de la empresa. Además, se podrían establecer medidas correctivas para evitar nuevos episodios de contaminación.

Desde la cartera ambiental reafirmaron su compromiso con la prevención, el control y la participación ciudadana en la defensa del ambiente, destacando que este tipo de denuncias permiten activar mecanismos de fiscalización territorial.