El enviado de Buryaile reconoció que las inspecciones del INYM no sirven: “La realidad del mercado no está en los papeles”
El subsecretario de Agricultura, Luis María Urriza, estuvo hoy reunido con el directorio del INYM buscando soluciones al conflicto yerbatero, que va en aumento y es una verdadera olla a presión.
Tras las reuniones habló con la prensa y dejó una declaración que fue de lo más contundente. Urriza admitió, casi sin darse cuenta, que las inspecciones que hace el INYM no sirven.
Y explicó que no sirven porque uno de los mecanismos para eludir el precio acordado de $5,10 el kilo de hoja verde (dicen los productores que se llega a pagar $3 por la sobreoferta de yerba) es no declarar los precios efectivamente pagados en los papeles que avalan la transacción en el secadero.
“En fiscalización no nos desayunamos ahora, el INYM ha hecho más de 170 inspecciones y en la mayoría, casi en la totalidad no han encontrado diferencia de precios, no porque no existan, sino porque la realidad del mercado no se expresa en los papeles”, dijo.
Justo en el peor momento que afronta el INYM, cuestionado por su falta de efectividad en llevar soluciones a la cadena yerbatera, en especial a los eslabones más débiles, viene un funcionario de Nación a admitir que sus controles son inservibles.
Urriza se refirió también con mucha honestidad a la informalidad que hay en la cadena comercial, y también avisó que parte del conflicto yerbatero tiene que ver con lo “retrasado” que está el precio de la yerba en las góndolas, en un país donde todo subió mucho más.
“En todas las cadenas hay informalidad y hay gente que toma ventaja, pero acá hay un primer problema es que el negocio está ajustado, quién se queda con la torta, la yerba fue uno de los productos alimenticios que menos aumentó, el negocio está apretado, y todos los actores están tratando de reubicarse”, dijo Urriza.
A pesar de estos dichos, Urriza fue claro en su apoyo al trabajo del INYM y prometió armar una comisión y redoblar los esfuerzos de fiscalización y control. Eso sí, no aclaró si lo que van a acentuar son los actuales controles que él mismo admite que no sirven, o si van a buscar mecanismos efectivos de hacer que se cumpla con los precios pactados, como marca la ley. Mientras tanto, la presión de la olla sigue aumentando.
MB