Finalizaron las pruebas de los paneles solares del satélite SABIA-Mar
La Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE), junto a la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) y a las empresas VENG e INVAP, finalizaron esta semana una nueva prueba de dos de los cuatro paneles solares que llevará a bordo la misión satelital SABIA-Mar. Estas tareas se realizan en la Sala de Termovacío del Laboratorio de Integración y Ensayos (LIE), del Centro Espacial Teófilo Tabanera (CETT) de la CONAE, en la provincia de Córdoba.
El Ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación, Daniel Filmus, destacó “la finalización de las pruebas de los paneles solares del satélite SABIA-Mar” y expresó: “Se trata de una muestra más de las capacidades de la ciencia argentina. Son muy pocos los países en el mundo que tienen el conocimiento para desarrollar tecnología satelital y Argentina es uno de ellos. Muy pronto SABIA-Mar generará datos muy importantes sobre el Mar Argentino y las regiones costeras de Sudamérica, y para el estudio de los mares a nivel global. Representa un gran orgullo para nuestro país y un hecho fundamental para nuestra soberanía científico-tecnológica”.
Por su parte, el Director Ejecutivo y Técnico de la CONAE, Raúl Kulichevsky, afirmó: “Es una gran satisfacción haber concluido exitosamente los ensayos de los paneles solares de SABIA-Mar, que representan un nuevo hito para el avance de la misión. Valoramos el trabajo interinstitucional que generamos junto a otras instituciones del sistema científico y tecnológico nacional, como la CNEA, INVAP y VENG. Estamos orgullosos de nuestros equipos técnicos, altamente capacitados, que nos permite avanzar en el desarrollo de nuestro próximo satélite, para que pueda estar operativo de aquí a 2025”.
Araceli Barrera, profesional de la Unidad de Servicios de Ingeniería, de la Gerencia de Proyectos Satelitales de la CONAE, y responsable del subsistema de paneles solares durante la fase D (constructiva) de la misión SABIA-Mar, explicó: “Finalizamos con las pruebas de ciclado térmico en la cámara de termo vacío, que se extendieron a lo largo de una semana. Durante ese tiempo sometimos los componentes a ciclos de frío y calor, para verificar su resistencia al ambiente en el que van a estar expuestos cuando vuelen en el espacio. Una vez que retiramos los paneles de la cámara, se hacen verificaciones funcionales para comprobar las condiciones de los paneles. Estamos en el proceso de terminar todas las verificaciones. Hasta ahora pudimos comprobar que las celdas solares están funcionando bien”.
“Para nosotros es una satisfacción muy grande porque es una tecnología desarrollada en el país. Si bien la celda de calidad espacial se compra en el exterior (aunque actualmente se está investigando para desarrollar una nacional), tanto la integración, como el pegado sobre el sustrato y el conexionado eléctrico son tecnologías argentinas, igual que los ensayos”, concluyó.
Cumplida esta tarea, los paneles viajarán a la sede de la empresa INVAP, en Bariloche, donde se realizará una prueba dinámica, para someter a los paneles a las vibraciones que van a enfrentar durante el lanzamiento. Además se espera que en las próximas semanas lleguen desde la CNEA al Centro Espacial de la CONAE los paneles del otro ala del satélite, para continuar con las pruebas de ciclado térmico.
Un componente vital
El satélite SABIA-Mar se enfocará en el estudio de los mares a nivel global, y especialmente en las regiones costeras de la Argentina y Sudamérica. La misión avanza en su fase constructiva tras superar, en abril de este año, la Revisión Crítica de Diseño (MCDR, por sus siglas en inglés), que constituye uno de los hitos más relevantes del proyecto. Su lanzamiento está previsto para principios del 2025.
Los paneles solares son un componente vital para la misión espacial porque obtienen energía eléctrica a partir de la radiación y garantizan el funcionamiento de los instrumentos durante toda su vida útil. El SABIA-Mar llevará a bordo cuatro paneles solares que miden 1,80 x 1,20 metros y pesan 12 kilos. En total cuenta con una superficie de 10 metros cuadrados y 2400 celdas que generarán una potencia de 2400 watts.