La Federación de Cooperativas Eléctricas de Misiones (FECEM) que aglutina a las 13 cooperativas que distribuyen energía en la provincia y se complementan con Emsa para cubrir el territorio misionero, apoyaron el pedido a la Nación de un subsidio a la energía para usuarios industriales y comerciales.

Hace unos días, el Gobierno provincial elevó a la Nación el pedido de un subsidio que permita amortiguar un poco el “tarifazo” en la energía eléctrica y que aqueja especialmente a las pequeñas industrias y los comercios.

Muchos de ellos, afectados por la recesión y las asimetrías, deben cerrar sus puertas. En especial, los pequeños comercios. A quienes el boletazo en la luz los empuja aún más al cierre, en un contexto de bajas ventas.

A las cooperativas les importa mucho también poder obtener este subsidio porque eso les permitiría aliviarle un poco la carga en la boleta a los usuarios y les abriría la puerta para, de alguna manera, empezar a incluir en la factura una parte de los costos operativos que tienen y que no están trasladando en su totalidad.

Al costo de la energía que cobra CAMMESA y que subió al doble este año, las cooperativas deberían sumarle los costos propios de las distribuidoras, básicamente en personal, mantenimiento e inversiones (que en general son la variable de ajuste).

Las cooperativas, sobre todo, necesitan que se les reconozca el llamado VAD, algo así como el margen o la parte del valor de las boletas que cobran a sus usuarios, que se utiliza para cubrir sus costos.Casi todas las cooperativas están con números rojos porque la política en los últimos años ha sido no aumentar el VAD y tratar de mantener sin cambios la boleta de luz. Con ingresos fijos, las cooperativas debieron enfrentar aumentos en los costos de sueldos, mantenimiento e inversiones.

Hay muchas cooperativas del interior con sus postes de luz en pésimo estado que reclaman cambios. Otras dejaron de pagarle a la AFIP y a Rentas para seguir funcionando. Además, muchas pidieron a sus socios una capitalización. Es decir, un aporte extraordinario para cubrir estos mayores costos, que no alcanzaban a afrontar con sus ingresos congelados, comentó a Economis hace un tiempo un representante de FECEM.

Al no trasladar estos costos, no tienen forma de financiar en su totalidad las tareas de mantenimiento. Y mucho menos, nuevas inversiones para mejorar el tendido de distribución eléctrica. La situación se agrava con el paso del tiempo.

“Las cooperativas eléctricas no están exentas de esta situación,  entienden y les preocupa lo que estas subas de tarifa significan para sus asociados.  Es por ello que sabiendo que esta Provincia, al no tener alternativas de uso de energía con gas natural y, además, presentar particular situación de su condición fronteriza, que deteriora las economías en todos los sectores productivos y comerciales, comparte la idea de que Misiones debiera ser considerada de manera diferencial que el resto del país”, dice.

“Ante esta situación la FECEM y todas sus cooperativas asociadas acompañan y apoyan toda gestión que el Gobierno provincial haya realizado y realice en el futuro en ese sentido. Para que los beneficios que se pudieran obtener sean trasladados directamente a la tarifa final, aliviando así la difícil situación económica de todos los habitantes de la Provincia”, cierra el escrito.