Misiones regulará publicidades encubiertas de “influencers”
La Cámara de Diputados comenzará a analizar un proyecto de ley presentado por el diputado Rafael Pereyra Pigerl, acompañado por Yamila Ruiz y Lucas Romero Spinelli, con el objetivo de regular la actividad de los influencers en redes sociales, que hacen publicidad encubierta.
El proyecto propone crear una “Guía de Buenas Prácticas para Influencers”, con el objeto asegurar el respeto por la dignidad humana, brindar protección a los consumidores y garantizar que el contenido digital publicitario generado sea leal, veraz, honesto y legal.
Se entiende por influencer a la persona natural o física que es sujeto verificado por una red social, que goza de reconocimiento social en internet como líder de opinión y que en su comunidad de seguidores en las redes sociales comparte contenido en temas de los cuales gozan de credibilidad.
Una vez aprobada la ley, el influencer deberá:
1) velar por la veracidad de la información;
2) transmitir una imagen respetuosa de las personas con discapacidad;
3) proteger al usuario de contenidos que atenten contra la dignidad de las mujeres;
4) respetar la dignidad humana;
5) promover una imagen sin estereotipos;
6) evitar publicidades y mensajes erróneos o engañosos;
7) evitar conductas inescrupulosas o contrarias a la ética;
8) garantizar que sus contenidos no vulneren derechos de terceros;
9) informar al consumidor, en forma clara y explícita, que es un contenido publicitario;
10) promocionar los productos ajustados a la realidad;
11) tender a la alfabetización mediática.
En aquellos casos en los que la naturaleza publicitaria no sea clara y manifiesta, se deberá incluir en forma explícita una indicación de ello, recomendándose usar indicaciones genéricas como “publicidad”, “publi”, “en colaboración con” o “patrocinado por”.
En la argumentación de la iniciativa, los diputados proponen establecer la “Guía de Buenas Prácticas para Influencers”, con el objeto asegurar el respeto por la dignidad humana, brindar protección a los consumidores y garantizar que el contenido publicitario generado sea leal, veraz, honesto y legal.
Enan López de Freitas, CMO de la agencia White Rabbit, afirma que durante el 2020, esta actividad registró un aumento del 49% en todo el mundo en comparación con el 2018.
Los influencers se dedican a crear contenidos para plataformas como Instagram, YouTube, TikTok, Twitch o Facebook y su libertad e independencia es prácticamente total: ellos son quienes deciden qué hacer, dónde y cuándo. Y ellos mismos buscan nuevas formas de ganar dinero lanzando productos a la venta, organizando eventos u ofreciendo proyectos patrocinables a anunciantes. También deciden si trabajan o no con marcas y en qué condiciones y, no olvidemos que pueden conseguir ingresos gracias al apoyo económico de los fans. Además, lo hacen desde sus casas, en cualquier parte del mundo y en el horario que ellos deciden.
La estrategia de comunicación digital de las compañías es utilizando los denominados “Influencers”; esto es, personas que se considera tienen un alto nivel de influencia sobre el público por su elevado número de seguidores en redes sociales y/o medios de comunicaciones digitales y que interactúan tanto a través de tweets, videos y posts, como a través de mensajes en blogs u otros. En este grupo se vienen incluyendo los denominados “social media influencers”: “bloggers”, “Youtubers”, “Instagrammers” y “Facebookers”.
Existe un vacío legal que deja a elección del influencer el modo de presentar sus publicaciones, y si deben o no indicar que existe una marca detrás de ciertas acciones.
A diferencia de los medios tradicionales de comunicación y de las formas ya conocidas de publicitar un producto o servicio, los influencers y streamers cuentan con una característica distintiva. Son creadores de comunidades o ecosistemas digitales con un público que garantiza cierto grado fidelidad y seguimiento.
En sus comienzos, la actividad era amateur, con un público muy reducido y sin capacidad alguna de generar ingresos. Sin embargo, este fenómeno mundial se ha profesionalizado y las acciones de estas figuras públicas son sumamente rentables en la actualidad.
Aun no contando con leyes especiales que regulen la actividad, si bien se encuentran alcanzados por los tributos al no existir una regulación especial se crea la sensación de que estamos a oscuras, aunque ellos deben cumplir normas.