Un programa que se probó en Misiones se replicará en Brasil para plantar un millón de árboles
- Los datos son concretos: para cubrir la demanda de oxígeno de una persona y que pueda respirar aire puro se necesitan 22 árboles. Además, los árboles son esenciales como fuente de nutrientes para los animales e insectos, el nexo entre la vegetación y la atmósfera ya que facilitan el intercambio de gases y agua. Al mismo tiempo, ayudan a absorber el dióxido de carbono (CO2), el principal gas que aumenta el calentamiento global, ya que, en promedio, toman entre 10 y 30 kg de CO2 al año.
- El contexto actual está marcado por la era del Antropoceno, definida de este modo por Paul Crutzen y Eugene Stoermer en el 2000, cuyo comienzo fue en plena Revolución Industrial, a finales del siglo XVIII, y se extiende, con sus complejidades, hasta el presente. Los principales cambios que causó este proceso en el planeta tienen que ver con la escasez de recursos naturales, la degradación del ecosistema y los cambios masivos en el uso de la tierra.
- Sin embargo, a partir de proyectos colectivos entre el sector privado, ONGs y activistas del medio ambiente es posible formar equipos y ser agentes de cambio positivos para el ecosistema. En esta línea nace el proyecto del Bosque Zurich, un plan ambicioso, potente y de gran impacto, no solo para la comunidad de Brasil y de Sudamérica sino para todo el mundo, cuyo objetivo es colaborar con la reforestación de una de las áreas naturales más extensas del planeta.
- La historia de una transformación: Lelia y Sebastián Salgado, amantes del medio ambiente e impulsores del proyecto
- Brasil es uno de los países más inmensos del mundo, con accidentes geográficos esenciales para el desarrollo de la vida animal, vegetal y humana. Desde el Amazonas hasta el Océano Atlántico, este país presenta una enorme variedad en flora y fauna, siendo su cuidado y preservación una materia fundamental para el desarrollo sostenible de la región y el mundo. Dentro de las principales amenazas que tiene el medio ambiente de Brasil están la polución del agua, del aire y del suelo, la deforestación, el desecho de basura en zonas inadecuadas, la caza y la pesca ilegal, el desperdicio de alimentos y de recursos naturales, y el calentamiento global. Los bosques cubren casi un tercio de la superficie terrestre,pero están desapareciendo: son talados para plantar cultivos o ampliar ciudades. Por eso, plantar árboles supone ayudar al planeta y, por lo tanto, a todos los seres vivos.
- Ante este escenario, el Instituto Terra, la ONG fundada por Lelia y Sebastián Salgado en 1998, se dedica a regenerar partes del antiguo bosque atlántico en la región del valle del río Doce en Minas Gerais, que una vez dominó la costa este de Brasil. Los Salgado comenzaron esta aventura en un terreno baldío de una antigua granja ganadera que Sebastián había heredado de su padre. Desde que arrancaron con el proyecto, ya consiguieron plantar más de 2.3 millones de plantas nativas.
En 2020, Zurich se sumó al equipo de los Salgado con un objetivo ambicioso, pero de gran impacto para la salud del medio ambiente y de las futuras generaciones: alcanzar la reforestación de más de un millón de árboles en toda la región y ayudar en la mejora de la vida natural de esta área.
A través del proyecto Bosque, Zurich otorga una subvención que permite plantar un millón de plántulas durante ocho años, en tres áreas distintas de la región. Dentro del millón de árboles, habrá uno por cada uno de los 60.000 empleados de la compañía. El resto se ofrecerán a los clientes que elijan plantar árboles cuando contraten una póliza. En total, se plantarán 800 mil plántulas y se replantarán otras 200 mil. Se cubrirán 700 hectáreas (siete kilómetros cuadrados). El bosque restaurado será completamente autosuficiente y biodiverso, y comprenderá 120 especies de árboles nativos de la región.
En Argentina, sin ir más lejos, a partir de diferentes iniciativas como Experiencia Living en 2022 y 2023 se donaron más de 6000 árboles. También, durante el año pasado se realizó una campaña con LiveWell, su app de bienestar integral diseñada para acompañar a sus clientes de seguros de vida, con contenidos vinculados al cuidado y la salud de las personas. Durante un mes, cada paso que se sumó a la aplicación se transformó en la donación de un árbol al Bosque Zurich.
La regeneración de los árboles es el primer paso para restablecer el hábitat que beneficia por igual a las personas de la zona, al restaurar los suministros de agua, como a las plantas y los animales. Entre ellas, se encuentran 172 especies de aves nativas (de las cuales seis están en peligro de extinción), 33 tipos de mamíferos, este último grupo incluye a los jaguares, que pueden extinguirse como consecuencia de la destrucción de su hábitat, y 297 plantas diferentes. La mayor parte del territorio ha sido declarada Reserva Particular del Patrimonio Natural de Brasil y también, de a poco, está regresando la fauna autóctona.
Este proyecto ecológico es posible gracias a su impulso social. Por eso, como parte de esta iniciativa, Zurich y el Instituto Terra, se han conectado con la comunidad del área de Aimorés, una zona cuya población trabajaba principalmente en la minería, para que puedan dedicarse al cuidado del bosque. De esta forma, ya fueron entrenados y capacitados más de 200 expertos en reforestación que ya son protagonistas de este cambio.
Desde 2022, Zurich comenzó a usar la plataforma Restor para presentar datos y dar seguimiento sobre su proyecto forestal y otras iniciativas por el medio ambiente a sus colaboradores, clientes y el público en general.
Una historia local: la alianza de Zurich y Fundación Vida Silvestre Argentina en el país
Desde el año 2021 y de forma continua, Zurich y Fundación Vida Silvestre Argentina trabajan en conjunto por el desarrollo sostenible del medio ambiente en la Reserva Urugua-í, en la provincia de Misiones, y con las comunidades cercanas a la reserva, contribuyendo a la recuperación y preservación del bosque atlántico.
Este año, la alianza se renovó con el objetivo de continuar con la implementación de acciones a través de dos ejes de trabajo que buscan promover la educación y la concientización ambiental, y aportar a la conservación y protección de la naturaleza.
Desde Fundación Vida Silvestre Argentina seguirán trabajando de forma integral para fortalecer y proteger la biodiversidad que albergan las más de 3000 hectáreas protegidas de la Reserva de Vida Silvestre Urugua-í a través de la educación ambiental en escuelas cercanas; del apoyo a la investigación científica en la reserva, para conocer más sobre anfibios, grandes mamíferos y aves con el fin de conocer su estado de conservación; y, a su vez, del fortalecimiento del Vivero Andrés Johnson de la reserva mediante la compra de insumos fundamentales para potenciar las tareas de producción de plantas nativas para proyectos de restauración.
Todas estas acciones, iniciativas y proyectos son globales y colectivas: no tienen sentido si no se realizan en equipos diversos, comprometidos y con una mirada a largo plazo. El futuro se cambia en el presente y, para esto, las fronteras no la delimitan los países sino el planeta. Zurich continuará impulsando y sumando a más personas y aliados para aportar su grano de arena en esta transformación.