Modificación de los objetivos y actitudes del FMI
En épocas no muy lejanas, cuando se recordaba las relaciones con el Fondo Monetario Internacional (F.M.I.) era para maldecir sus obligaciones de ajuste y superávit fiscal para pagar las deudas contraídas por un país con dicha entidad. Lo que conllevaba a que las poblaciones del país pasaran penurias consistentes en una rebaja del nivel las jubilaciones que tenían que hacer malabarismos y hasta contraer deudas para adquirir sus medicamentos habituales.
Con la asunción del nuevo gobierno de Alberto Fernández y Cristina, se abre una esperanzadora expectativa que estos males serán solucionados y la posibilidad cierta de revertir estas calamidades, herencia del gobierno de Francisco Macri.
La muy buena imagen de Alberto Fernández y su llegada positiva a casi todos los gobiernos del mundo y su aseveración del cumplimiento de la palabra empeñada en relación a los compromisos y deudas contraídas por el gobierno de Macri , han creado un ambiente de confianza en su gestión en la comunidad internacional. No solo el F.M.I. está interesado en facilitar a Fernández el pago de la deuda sino que también el CAF-Banco de Desarrollo de América Latina ha ratificado el compromiso del organismo “con los planes de desarrollo del nuevo Gobierno con créditos por más de 4.000 millones”. Carranza se comprometió a “profundizar el apoyo financiero y técnico “ a la Argentina.
El presidente electo Alberto Fernández, abrió de manera implícita las negociaciones con la mandataria del Fondo Monetario Internacional (FMI) Kristalina Georgieva, en el cual sugirió alcanzar un equilibrio fiscal, uno de los aspectos elementales para el organismo internacional de crédito, aunque sin la necesidad de propiciar un ajuste. Fernández se mostró a favor de avanzar sobre una renegociación del acuerdo con la institución, aunque propuso impulsar “un plan económico sostenible y un acuerdo de pago que podamos cumplir, pero sin más ajuste”.
Altos funcionarios del organismo internacional, entre ellos Christina Lagarde, hoy presidenta del Banco Central Europeo, y el Director del FMI Alejandro.Werner, hoy cuestionado por favorecer el préstamo a la Argentina que alcanzó la bonita suma que representó el 60% de los fondos prestados por el FMI.
En Berlín, la funcionaria reconoció que la Argentina es uno de los principales puntos en la agenda del organismo, dado que en 2018 se aprobó un préstamo stand by por u$s.56.300 millones de los cuales ya se otorgaron más de u$s.44.000 millones. Vale recordar que en setiembre, la institución decidió postergar el desembolso de u$s.5.400 millones debido a las complicaciones en el plano cambiario y financiero, luego de la devaluación de casi 25% registrada tras las PASO. En su entrevista con Bloomberg, la titular del FMI destacó la importancia de la Argentina en la agenda entrante del FMI y admitió preocupación por el deterioro de la situación social del país.
Geogieva reconoció que “la pobreza ha aumentad, por lo que cualquier plan que presente el Gobierno debe tener en cuenta el impacto que tendrá en las personas más vulnerables “. Y sostuvo: Esperamos una atención especial en la protección social y estamos hablando con nuestros colegas del banco Mundial de colaborar para apoyar este tipo de plan”. No obstante, señaló que el próximo Gobierno deberá llevar los programas sociales a “niveles sostenibles para que el país pueda regresar a los mercados”. Palabras inconcebibles anteriormente, lo que corrobora el título que hemos puesto a nuestro artículo.
Miguel Schmalko-consejero y ex presidente de FEBAP y CACEXMI (Federación Económica Brasil-Argentina-Paraguay y Cámara de Comercio Exterior de Misiones)