Pozo Azul ya es el municipio 76 de Misiones

La creación del municipio número 76 de la provincia de Misiones se vivió como una verdadera fiesta. La alegría de quienes desde este Miércoles 6 de Diciembre de 2017 serán llamados “Pozo azuleños” y también por sus vecinos de San Pedro, Bernardo de Irigoyen y hasta de Andresito y Eldorado se sentía en el ambiente, cargado de algarabía y emoción.
Pero lo cierto es que institucional e históricamente se ha vivido un hecho sin precedentes en tiempos de la democracia. Con la creación del nuevo municipio, se ha dado el primer paso hacia la solución de muchas problemáticas de una zona abnegada por su ubicación, su climatología y hasta su geopolítica (pues sus habitantes se dividían responsabilidades institucionales y derechos provinciales, en diferentes municipios vecinos). Esa falta de identidad y la la ausencia de soluciones para muchas cuestiones de vital importancia en la Misiones profunda, hoy ha sido escuchada.
Es en ese contexto donde las voces de Pozo Azul han sido escuchadas, fueron escuchadas por el Ejecutivo, con muchas reuniones que por ejemplo ha mantenido el Vicegobernador de la Provincia con los hombres y mujeres de una zona que el bien conoce, pues ha sido médico en San Pedro, lo cual lo llevó a sanar muchas veces las dolencias de varias familias de Pozo Azul. Incluso mucho antes de tener que bregar por soluciones ya no de salubridad, sino institucionales y políticas.
“Lleno de emoción hago llegar esta invitación del Presidente de la Cámara de Representantes, Carlos Rovira al interventor del Pozo Azul para nos acompañe en el recinto de la Cámara el día 10 de Diciembre a la asunción de las nuevas autoridades, son las primeras invitaciones que manda la Cámara y me llena de orgullo y emoción que sean para Pozo Azul, por el simbolismo que esto representa”, dijo el Vicegobernador de la Provincia, emocionado por la ya tangible aceptación institucional de Pozo Azul como Municipio.
Por eso este Gobierno ha entendido lo que Pozo Azul necesita, porque siempre ha estado en Pozo Azul, porque ha ayudado en sus hogares. Ya sea luchando por bajar la fiebre del sus niños, acompañando cuando los temporales han tirado techos o tomando las decisiones políticas acertadas para el crecimiento demográfico y económico de quienes, desde hoy serán bien llamados (y con mucho orgullo) “pozoazuleños”.