Autos norteamericanos podrán homologarse en Argentina sin el test de protección de peatón
El Gobierno exceptuó a los autos fabricados en Estados Unidos del ensayo de protección de peatón hasta que sea obligatorio en su país de origen.
Una resolución conjunta entre la Agencia Nacional de Seguridad Vial y la Secretaría de Industria y Comercio posterga la aplicación de la medida de seguridad vial para modelos fabricados bajo normas estadounidenses FMVSS.
Argentina posterga la aplicación del ensayo de protección de peatón para vehículos norteamericanos
La ANSV y la Secretaría de Industria y Comercio, emitieron la Resolución Conjunta 3/2025, publicada en el Boletín Oficial el 14 de octubre de 2025. Mediante la cual se exceptúa temporalmente a los vehículos fabricados en los Estados Unidos de América —bajo las normas Federal Motor Vehicle Safety Standards (FMVSS)— de cumplir con el ensayo de protección de peatón. El cual es exigido desde el 1° de enero de 2025 para los nuevos modelos de las categorías M1 (autos particulares) y N1 (utilitarios livianos).
La decisión responde a un pedido formal de la Asociación de Fábricas de Automotores (ADEFA). Que argumentó que la normativa norteamericana aún no contempla ese tipo de ensayo en sus certificaciones obligatorias. Y que su implementación en Argentina resultaría imposible de cumplir técnicamente mientras la reforma regulatoria en Estados Unidos no entre en vigencia.
El Gobierno resolvió que la exigencia será aplicable “un año después de la entrada en vigencia de la nueva norma FMVSS” que establezca la obligatoriedad del ensayo de protección de peatón en ese país.
Hasta entonces, los fabricantes e importadores de automóviles producidos bajo normativa estadounidense podrán obtener la homologación local presentando ensayos realizados en laboratorios internos avalados por la National Highway Traffic Safety Administration (NHTSA), siempre que cuenten con la certificación conocida como “Blue Ribbon Letter”.
Antecedentes normativos y fundamentos técnicos
El ensayo de protección de peatón fue introducido en Argentina mediante el acuerdo suscripto en 2017 entre la ANSV, el entonces Ministerio de Transporte, la Secretaría de Industria y Servicios y las cámaras automotrices, con el fin de incorporar estándares de seguridad vial de la ONU (normas ECE europeas o GTR-9).
Ese convenio, aprobado por la Disposición 635/2017 de la ANSV, establecía que todos los nuevos modelos de vehículos M1 y N1 deberían cumplir con dicho ensayo a partir del 1° de enero de 2025 como condición para obtener la Licencia de Configuración de Modelo (LCM).
Sin embargo, la Asociación de Fábricas de Automotores solicitó una prórroga específica para los autos diseñados bajo normativa norteamericana. Dado que el ensayo de impacto de peatón no es exigido en Estados Unidos.
Además, en su presentación, la entidad advirtió que no existen en la Argentina laboratorios habilitados para realizar este tipo de pruebas. Lo que hace inviable el cumplimiento del requisito en el corto plazo.
El fundamento jurídico de la excepción se apoya en el artículo 29 del Anexo 1 del Decreto 779/1995, que permite a la Secretaría de Industria y Comercio otorgar dispensas cuando existan “situaciones imprevistas” o “limitaciones técnicas de diseño” que impidan la aplicación de determinadas medidas de seguridad.
A ello se suma el Decreto 196/2025, que reconoce como válidos los ensayos realizados en laboratorios internos de las plantas automotrices con aval de la NHTSA, lo cual refuerza la equivalencia técnica entre los sistemas de homologación argentino y estadounidense.
La resolución también cita el Decreto 650/2025, que otorgó al secretario de Coordinación de Producción, Pablo Agustín Lavigne, las competencias de la Secretaría de Industria y Comercio, junto con la Secretaría de la Pequeña y Mediana Empresa, Emprendedores y Economía del Conocimiento, dentro del esquema de reorganización ministerial impulsado por el Ejecutivo.
Impacto y alcances de la medida
La excepción aprobada beneficia directamente a las terminales e importadores que comercializan modelos producidos en Estados Unidos, como Ford, General Motors, Stellantis, Toyota y Tesla, entre otros.
El objetivo oficial, según los considerandos del texto, es “introducir regulaciones más ágiles y flexibles”. En línea con la política de simplificación y reducción de la intervención estatal en la economía.
Desde el punto de vista institucional, la norma representa una adecuación del marco de homologación automotriz argentino al sistema regulatorio de Estados Unidos. Garantizando la continuidad de las importaciones sin trabas administrativas.
La disposición también evita eventuales demoras en la comercialización de nuevos modelos y mantiene la equivalencia técnica entre ambos mercados. A la espera de que la NHTSA incorpore el ensayo de protección de peatón a las FMVSS.
La medida avalada por la Dirección Nacional de Observatorio Vial, la Dirección General de Administración y el servicio jurídico permanente de la ANSV, que confirmaron la competencia técnica y legal de la resolución.
La excepción tendrá vigencia hasta un año después de que la normativa estadounidense adopte formalmente el requisito. Momento a partir del cual las automotrices deberán acreditar su cumplimiento para obtener la homologación local.
En los hechos, la decisión refleja una armonización técnica temporal y busca preservar la seguridad jurídica y operativa de la industria automotriz. Sin alterar los compromisos asumidos en materia de seguridad vial a largo plazo.
