El ocaso de los líderes del G7 ¿Reunión de “loosers”?
La reunión que convocó al presidente Javier Milei, con líderes que están al final de su carrera, de acuerdo a la crítica que expuso el Wall Street Journal sobre el evento, muestra el devenir de los protagonistas en la actualidad. ¿Es el final de una época de grandes ligas?

Lo más notable del evento G7 que reúne a los representantes del mundo, sin duda son figuras que están perdiéndose en el ocaso, donde pocos son los “relevantes” de acuerdo al Wall Street Journal.
Hubo épocas en que el G7 convocaba a líderes como Ronald Reagan, Margaret Thatcher, Helmut Kohl, Yushiro Nakasone, Brian Mulroney, François Mitterrand y el primer ministro italiano de turno. Esos tiempos eras otros, y resulta difícil imaginar una reunión que destaque, salvo por la presencia de la italiana Georgia Meloni, a quien el Wall Street Journal describió como una “gigante relativa entre un grupo de enanos políticos”.
Uno de los ejemplos es el caso del primer ministro británico, Rishi Sunak, quien se dirige hacia una de las mayores derrotas en la historia del Partido Conservador inglés, enfrentando elecciones generales el próximo 4 de julio. A su vez, la coalición detrás del Canciller alemán Olaf Scholz (con una aprobación del 25%) acaba de sufrir una dura derrota en las elecciones del Parlamento Europeo, lo que hace improbable su supervivencia política.
También se puede mencionar, aunque faltan 16 meses para que se vea obligado a convocar elecciones, el líder canadiense Justin Trudeau, quien lleva casi 10 años en el poder con una aprobación del 30%, atraviesa uno de los peores momentos de su historia. Una estadística reveladora: los canadienses solían considerarse entre las 7 naciones más felices del mundo; hoy ocupan el puesto 15. Mientras tanto, el partido Conservador tiene una intención de voto del 42%, mientras que los Liberales de Trudeau apenas alcanzan el 25%.
Históricamente, el Partido Liberal Democrático de Japón no pierde elecciones, pero con una aprobación de su gabinete inferior al 16.5% y envuelto en una serie de escándalos financieros, es difícil que el primer ministro japonés Fumio Kishida (con una aprobación del 13%) se mantenga en el poder por mucho más tiempo.
Emmanuel Macron, con una aprobación del 21%, recientemente se disparó en el pie al disolver la Asamblea Nacional y convocar elecciones anticipadas, esperando que los socialistas se alinearan en su contra frente a Marine Le Pen.
Luego está Joe Biden, con una aprobación del 37%, que sigue detrás de Donald Trump en todas las encuestas y muestra claros problemas para liderar las discusiones del G7.

Cada uno de estos líderes enfrenta sus propios problemas, pero todos comparten desafíos similares. Solo “Meloni”, a pesar de la mala prensa y el acoso de sus pares al inicio de su gobierno, puede demostrar que ha gobernado de manera relativamente exitosa.
En el otro lado del espectro, figuras como Vladimir Putin, Xi Jinping y Ali Khamenei no hacen más que regodearse ante esta clara muestra de falta de liderazgo occidental en la reunión del G7.
Fuente: Wall Street Journal