En el estadio Olímpico de la capital japonesa el seleccionado argentino de rugby seven cayó esta madrugada ante su par de Nueva Zelanda, por 35 a 14, en el segundo encuentro de la zona A.
El seleccionado argentino de rugby seven, Los Pumas ‘7, cayó esta madrugada ante su par de Nueva Zelanda, por 35 a 14, en el segundo encuentro de la zona A de la competencia en los Juegos Olímpicos de Tokio.
En el estadio Olímpico de la capital japonesa, el equipo conducido por el DT Santiago Gómez Cora, quien este lunes cumple 43 años, fue superado por un adversario que le hizo sentir el rigor físico y le marcó cinco tries en el desarrollo del pleito.
El conjunto albiceleste, que había vencido en el debut a Australia por 29-19, se situó en ventaja a los 2 minutos, a través de una corrida de Marcos Moneta, que contó con la conversión de Santiago Mare.
En esos 7 minutos iniciales, el conjunto de Oceanía, uno de los candidatos a la medalla de oro, revirtió el resultado, a pura potencia, con los apoyos en el ingoal adversario de Ngarohi Mc Garvey-Black (5m.) y Sione Molia (7m.). El propio Mc Garvey-Black colaboró con dos conversiones para que los All Blacks neozelandeses se retiraran con ventaja al descanso (14-7).
Apenas comenzado el segundo periodo, el ingreso Luciano González Rizzoli (1m.14s.) se escapó de su marca y ensayó una corrida que le permitió anotar el segundo y último try de los conducidos por el lomense Gómez Cora. La conversión de Mare (Regatas Bella Vista) propició el empate parcial 14-14.
De allí hasta el cierre se vino un vendaval del representativo neozelandés que consiguió otros tries por intermedio de Joe Webber (4m.), el capitán Tim Mikkelson (6m.) y William Warbrick (8m.). Todos los ensayos fueron rubricados con eficaces disparos a los palos que otorgaron un nítido triunfo de los All Blacks ‘7, por 35-14.
Los Pumas ‘7 formaron con Matías Osadczuk, Santiago Álvarez Fourcade, Lucio Cinti, Gastón Revol, Santiago Mare, Ignacio Mendy y Marcos Moneta. Luego ingresaron Luciano González Rizzoli, Rodrigo Isgro, Rodrigo Etchart, Lautaro Bazán Vélez y Germán Schulz.
Argentina culminará su labor en la zona de grupos enfrentándose a Corea del Sur, a partir de las 22.00 hora local (10.00 hora argentina).
Otros resultados: Gran Bretaña 34-Japón 0 e Islas Fiji 28-Canadá 14 (zona A); Sudáfrica 33-Irlanda 14 y Estados Unidos 19-Kenya 14 (zona C).
El seleccionado “albiceleste”, dirigido por Sergio Hernández, cayó 118-100 ante su par europeo, en la apertura del grupo C de la cita olímpica. Luka Doncic es el goleador del partido con 48 puntos.
El seleccionado argentino masculino de básquetbol padeció este lunes la jerarquía individual del crack Luka Doncic y perdió ampliamente con su par de Eslovenia, por 118-100, en el comienzo de su participación en la etapa clasificatoria, por los Juegos Olímpicos de Tokio.
En el Super Arena de la ciudad de Saitama, el equipo dirigido por el bahiense Sergio Hernández concretó un deficiente desempeño que pone en riesgo su pasaporte a los cuartos de final de la competencia. Los parciales del encuentro, válido por la zona C, fueron los siguientes: Eslovenia 32-24, 62-42, 88-66 y 118-100
El todo-terreno Doncic, figura de la NBA en los Dallas Mavericks, diseñó una estupenda actuación, con una renta de 48 puntos (12-15 en dobles, 6-14 en triples, 6-7 en libres), 11 rebotes, 5 asistencias y 3 bloqueos en los 31 minutos que permaneció en el rectángulo de juego.
En el equipo argentino, que orienta el DT bahiense Sergio Hernández, el capitán Luis Scola se erigió –una vez más- en la principal alternativa de ataque.
El exjugador de los Houston Rockets, Toronto Raptors e Indiana Pacers de la NBA inició la quinta cita olímpica de su carrera (también estuvo en Atenas 2004, Beijing 2008, Londres 2012 y Rio de Janeiro 2016) con un aceptable desempeño que incluyó un balance de 23 unidades (9-14 en dobles, 0-4 en triples, 5-7 en libres), 4 rebotes, una asistencia y una tapa en 27m.
El base de los Denver Nuggets, Facundo Campazzo, firmó una planilla con 21 tantos, 6 rebotes, 4 pases gol y 3 recuperos, mientras que el alero santiagueño de los Oklahoma City Thunder, Gabriel Deck, terminó con 17 puntos y 8 rebotes.
Desde el comienzo, el ‘Tifón’ Doncic arrasó la defensa argentina. El estratega esloveno no sólo castigo a distancia (3-4 en triples en el primer capítulo) sino que también se animó a las penetraciones al canasto, para redondear 17 tantos en los primeros 10m.
En ese arranque, con altibajos, el equipo del DT Hernández le cambió alternativamente la marca al astro de los Dallas Mavericks.
Sobre el joven estratega de 22 años fueron indistintamente Campazzo, Vildoza, Garino, Bolmaro y Deck. Pero ninguno pudo detener al goleador del partido que, a fines del primer tiempo, ya ostentaba una insólita colecta de 31 de los 62 totales que había conseguido Eslovenia, que llegó a esta cita, a través de un repechaje en Lituania, a principios de mes.
A esa altura, Argentina tampoco mostraba solidez bajo su propio canasto, exhibía escasa puntería en los tiros exteriores (2-18 en triples para los primeros 20m.) y denotaba escasa fluidez en la circulación del balón. La derrota por veinte puntos (42-62) al cierre del primer período semejaba un buen negocio.
En el tercer segmento, Eslovenia se escapó y logró una diferencia máxima de 28 (84-56, a falta de 2m. 27s. para la conclusión del cuarto) ante una Argentina que había perdido la línea característica.
En el último parcial, el conjunto europeo reguló el ritmo, le dio protagonismo a otros actores de reparto (caso Klemen Prepelic, del Valencia de España) y sentó a Doncic antes de la finalización.
El equipo argentino, con el empuje de Scola y algunas conversiones de Campazzo ‘maquilló’ la holgada caída, aunque la sensación que quedó flotando en el ambiente es que al equipo todavía le falta engranaje colectivo.
Argentina volverá a jugar este jueves desde las 9.00 de Buenos Aires ante el campeón mundial en China 2019, España. Mientras que el domingo 1 de agosto cerrará su actuación en el grupo C midiéndose con el local Japón, que dirige el DT Julio Lamas.
Con esta victoria, el equipo Albiceleste consiguió su primer triunfo en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 donde defiende el título obtenido en Río 2016.
El seleccionado argentino masculino de hockey sobre césped derrotó este domingo al anfitrión Japón por 2-1 y consiguió su primer triunfo en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 donde defienden el título obtenido en Río 2016.
Por la segunda fecha del grupo A, Los Leones se impusieron por los goles de Leandro Tolini, a los 5 minutos, y Nicolás Keenan, a los 19, en el encuentro disputado en el campo Sur del estadio de Hockey de Oi.
Kenta Tanaka sobre el final del partido, a los 60 minutos, descontó para Japón, que sumó su segunda derrota ya que en la primera fecha había perdido con Australia por 5-3.
Luego del empate 1-1 ante España en el primer partido, los dirigidos por Carlos «Chapa» Retegui ganaron el primer partido de la zona con goles de dos debutantes olímpicos.
Tolini, integrante del equipo que ganó la medalla de oro en los Juegos Panamericanos de Lima, abrió el marcador luego de una gran ejecución de córner corto.
Luego, Nicolás Keenan, otro que transita su primer Juego Olímpico, amplió la ventaja con un golazo de volea en el aire que seguramente quedará como uno de los mejores del torneo.
El equipo argentino, defensor de la medalla de oro lograda en los últimos Juegos de Río 2016, no pudo contar con el experimentado Lucas Rossi, quien fue sancionado con una fecha por incumplir el Código de Conducta en el altercado que tuvo con un español sobre el final del primer partido.
Con la ventaja de dos goles y una sólida defensa, Argentina completó un gran primer tiempo ante un rival que solo inquietó por su despliegue físico
Argentina se hizo cargo del protagonismo y encontró rápidamente la ventaja para tomar confianza luego de un debut ante España.
Una buena jugada de Matías Rey generó el primer córner corto que terminó en el gol de Tolini, quien sacó una potente arrastrada.
Antes del final del primer cuarto, Japón tuvo una oportunidad para empatar de córner corto pero el arquero Juan Manuel Vivaldi resolvió con una buena atajada.
En el segundo cuarto, Los Leones ampliaron el resultado con otro golazo en una jugada iniciada por Juan Martín «Gato» López que asistió a Keenan y el delantero, de 24 años, resolvió de manera magistral ya que levantó la bocha de espaldas al arco, la acomodó en el aire y sacó una volea en el aire inatajable para el arquero japonés.
Con la ventaja de dos goles y una sólida defensa, Argentina completó un gran primer tiempo ante un rival que solo inquietó por su despliegue físico en la calurosa jornada de Tokio.
El equipo argentino supo manejar el partido y también resolvió de buena manera los tres córner cortos en contra que tuvo con buenas respuesta de «Juanma» Vivaldi.
Argentina también fue efectiva en ataque ya que marcó dos goles en los seis tiros que tuvo durante el partido y marcó la diferencia con Japón que recién sobre el final pudo vencer a Vivaldi en su novena oportunidad.
Después del gol de Tolini en el primer cuarto, el equipo del «Chapa» tuvo otros dos tiros de córner corto para aumentar la ventaja pero fueron evitados por la defensa japonesa.
Argentina tiene 4 puntos en el grupo A y en la tercera fecha, el martes 26 de julio, se medirá contra Australia, el candidato y líder con puntaje ideal luego de golear a India por 7-1.
Las dos últimas fechas por la fase de grupos serán ante India (28/7) y Nueva Zelanda (30/7).
Más tarde, la actividad se cerrará con el partido entre España y Nueva Zelanda.
La judoca argentina Paula Pareto perdió con la portuguesa Catarina Costa por waza-ari en un repechaje de la categoría -48 kilos y quedó sin chances de acceder a una medalla en los Juegos Olímpicos Tokio 2020.
La judoca argentina se refirió a su actuación en Tokio 2020, donde no pudo conseguir una medalla olímpica, pero que si cuenta con un diploma olímpico. “Esto es deporte”, aseguró.
“No me veía competir en los Juegos, pero creo que fui fiel a mis principios de dar todo hasta la última gota. Ahora me esperan varias visitas médicas a mi vuelta”, aseguró.
A pesar de caer ante la portuguesa Catarina Costa, la bonaerense alcanzará el 7mo puesto lo que le dará la posibilidad de lograr un diploma olímpico. “Creo que no es para despreciarlo”, indicó en una charla con TyC Sports.
“Estoy convencida que di todo y a nadie le gusta perder. Pero lo analizaremos en frío”, valoró.
El presidente de la Nación, Alberto Fernández, destacó hoy el “enorme esfuerzo” de los atletas argentinos para estar en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, después de la ceremonia de inauguración.
“Quiero mandarle mi cálido abrazo a nuestra delegación. Un país entero los y las alienta a kilómetros de distancia”, publicó el Presidente a través de Twitter.
“Valoro el enorme esfuerzo que han hecho para poder estar hoy representando a la Argentina. Me enorgullece verlos levantar nuestra bandera”, continuó en un mensaje en el que se vio el video de ingreso de la delegación argentina a la ceremonia inaugural.
En ese momento, los deportistas cantaron el clásico “olé, olé, olé, soy argentino, es un sentimiento, no puedo parar…”, envueltos en un pogo simbólico por las medidas sanitarias de prevención del coronavirus.
Quiero mandarle mi cálido abrazo a nuestra delegación. Un país entero los y las alienta a kilómetros de distancia.
Valoro el enorme esfuerzo que han hecho para poder estar hoy representando a la Argentina. Me enorgullece verlos levantar nuestra bandera 🇦🇷❤#JJOO2020#Tokio2020pic.twitter.com/teQcmWRRXl
Con Lange y Carranza Saroli a la cabeza, Argentina desfiló en la ceremonia inaugural de Tokio 2020
El Estadio Nacional de la capital japonesa fue el escenario de una singular celebración que, por primera vez en la historia, se realizó sin público a causa de las estrictas medidas de seguridad sanitaria provocadas por la pandemia.
Los regatistas Santiago Lange y Cecilia Carranza Saroli, ganadores de la presea dorada en Vela en Rio de Janeiro 2016, fueron los abanderados de la delegación argentina en la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
El Estadio Nacional de la capital japonesa fue el escenario de una singular celebración que por primera vez en la historia se realizó sin público, a causa de las estrictas medidas de seguridad sanitaria provocadas por la pandemia de coronavirus.
La ceremonia se llevó a cabo en el mismo lugar que fue sede de los juegos de 1964, con aforo para 68.000 espectadores, desde las 8 de la Argentina (las 20 en Japón) y contó con un millar de invitados, entre ellos el emperador Nahurito; la Primera dama estadounidense Jill Biden; y el presidente de Francia, Emmanuel Macron.
Uno de los momentos más emotivos para el deporte argentino fue el ingreso de la bandera olímpica llevada por seis atletas, entre ellos la yudoca Paula Belén Pareto, ganadora de la medalla dorada en Rio 2016 y la de bronce en Beijing 2008, en el que será su último Juego Olímpico compitiendo en la categoría de hasta 48 kilogramos.
Esta vez no hubo espectadores emocionados en las tribunas ni un diluvio de flashes perpetuando el sublime momento en que los atletas desfilan unidos con un objetivo en común, que es darle inicio a la fiesta más grande del deporte mundial.
La soledad del recinto fue mudo testigo de un sobrio, elegante y melancólico espectáculo, en unos juegos que presentan como lema “Más rápido, más fuerte y más alto, juntos”.
Por primera vez el Comité Olímpico Internacional (COI) determinó que los abanderados de cada nación sean dos, un hombre y una mujer, con el fin de para promover la igualdad de oportunidades.
Cecilia Carranza Saroli fue la séptima mujer argentina en llevar la bandera en la apertura de un JJOO, después de Isabel Avellán (atletismo, Melbourne ’56), Cristina Hardekopf (saltos ornamentales, Roma ’60), Jannette Campbell (natación, Tokio ’64), Gabriel Sabatini (tenis, Seúl ’88), Carolina Mariano (judo, Atlanta ’96) y Luciana Aymar (hockey, Londres 2012).
El espectáculo comenzó con un hombre acurrucado en el centro del estadio antes de iniciar su marcha, en una metáfora del regreso a la vida.
También se proyectó en las pantallas gigantes un video de los atletas entrenando en gimnasios y en su casas, para remarcar las dificultades que padecieron para desarrollarse durante el confinamiento por la pandemia.
Tras el lanzamiento de fuegos artificiales, el emperador Nahurito y el alemán Thomas Bach, presidente del COI, se presentaron en el palco del estadio cuando ingresaba la bandera de Japón, que fue izada mientras se escuchaba el himno nacional nipón. Acto seguido, se realizó un minuto de silencio en homenaje a los fallecidos en todo el mundo a causa del coronavirus.
El comienzo del desfile mostró la emoción de los participantes de las 204 delegaciones, sin los atletas de Rusia (sancionada por casos de doping), Corea del Sur y Guinea (no fueron por temor a un contagio de sus atletas).
Argentina desfiló tras el paso de Grecia, que ingresó primera como cuna del olimpismo que comenzó en el año 776 AC, seguida por el Equipo de Refugiados, Azerbaiyán, Emiratos Árabes Unidos (EAU) y Argelia, con las naciones ordenadas por orden alfabético.
Los atletas argentinos que fueron al acto (solo unos pocos son elegidos para concurrir), liderados por Lange-Carranza, sobresalieron al romper el formalismo de las anteriores naciones que pasaron caminado de ordenada manera, ya que los argentinos lo hicieron bailando un pogo y cantando “Argentina es un sentimiento, no puedo parar”.
Tras el desfile, los deportistas, jueces y entrenadores celebraron el juramento olímpico.
Después se observaron algunos videos a modo de tributo a grandes estrellas olímpicas y se pudo ver en las pantallas a varios artistas internacionales cantando “Imagine” (Imagina), la mítica canción compuesta e interpretada por John Lennon en los años ’70.
A la hora de los discursos, la primera en hablarle a los presentes y al mundo fue Hashimoto Seiko, presidenta de la organización Tokio 2022. Thomas Bach, por su parte, agradeció al pueblo japonés por la concreción de los juegos, y luego el emperador Nahurito dio por comenzado los juegos con un escueto mensaje.
Minutos después se encendió el pebetero en manos de la tenista japonesa Naomi Osaka, ganadora del US Open, como broche de oro a una ceremonia de tres horas y 50 minutos de duración, que tuvo un poco de todo pese a que no contó con el calor y el colorido que le hubiera ofrecido el público.