Kruse S.A.: 80 años de transporte misionero y los desafíos que marca el futuro del sector
La empresa familiar Kruse S.A. fundada en 1941 en Montecarlo enfrenta hoy un escenario marcado por costos dolarizados, caída de demanda y regulaciones que desordenan el mercado. Su gerente, Fernando Kruse, aporta una mirada cruda y técnica sobre el futuro del transporte de pasajeros en Misiones.
En una entrevista realizada por La Start Up CACIM en Montecarlo, Fernando Kruse —actual gerente de Kruse S.A., una de las compañías más antiguas del transporte de pasajeros de Misiones— analizó el presente y futuro del sector en un contexto de tarifas reguladas, costos dolarizados, caída de pasajeros y tensiones institucionales. Con 84 años de trayectoria, la firma enfrenta desafíos estructurales que impactan directamente en la movilidad regional, la sustentabilidad financiera de las empresas y el acceso al transporte público. “Estamos hoy en la tercera generación… la semana del 14 de octubre cumplimos 84 años de trayectoria”, resumió el empresario.
Un legado de 84 años: historia, regla de oro y sucesión familiar
“El colectivo tiene que salir sin deber nada”
La empresa nació en 1941, cuando Federico Kruse —abuelo de Fernando— transformó un pequeño camión en un colectivo para transportar personal en la zona de Montecarlo. “Era un camioncito de la empresa Laharrague… lo transformó en colectivo, con asientitos de madera” , recuerda su nieto.
Aquel origen forjó una lógica de gestión que se mantiene hasta hoy. Fernando cita literalmente la regla fundacional familiar:
“Mi abuelo siempre decía que la unidad cuando sale a la calle tiene que estar sin deudas: personal pago, combustible lleno, sin deber nada, y ahí salir a buscar el dinero.”
Su padre, Manfredo, consolidó la expansión en servicios provinciales y de turismo. “Mi papá nos enseñó absolutamente todo… es muy meticuloso y estricto” , agrega Fernando, quien hoy dirige la firma junto a él y a su hermano Javier.
La vida de empresa familiar —cuenta— está marcada por tensiones generacionales y decisiones compartidas:
“Las decisiones las tomamos entre los tres. A veces hay discusiones, pero siempre pensando en la empresa” .

Estructura del transporte: subsidios, tarifas congeladas y costos dolarizados
Un sector regulado con ingresos fijos y gastos variables
Kruse ofrece una descripción técnica del funcionamiento económico del transporte: la tarifa que paga el usuario no refleja el costo real por kilómetro, que surge de una ecuación polinómica que integra combustible, salarios, repuestos, seguros y administración.
“Nuestro ingreso sigue siendo el mismo, pero los insumos están 100% dolarizados. Neumáticos, grasa, repuestos: todo sube automáticamente” .
La tarifa está regulada por la Provincia y se actualiza esporádicamente: “Este año tuvimos una adecuación tarifaria en enero y durante todo el año no hubo más ajustes”. Recién en esta semana se actualizó un 30% la tarifa de media distancia en Misiones.
El atraso tarifario, dice, se combina con presiones políticas: “La tarifa está politizada… si hay elecciones no actualizan”.
Subsidios: del gasoil diferencial al esquema actual
Kruse repasa la historia del sistema: Antes de 2018, las empresas recibían gasoil subsidiado: “Prácticamente regalado”. Ese beneficio se eliminó, generando un shock financiero: “Fue como que te saquen el respirador artificial” .
El esquema actual se basa en compensaciones provinciales y reembolsos del Boleto Estudiantil Gratuito (BEG), pero con brechas significativas: “Cuando el Estado pasó a pagar, dijo: ahora voy a pagar solo el 50% del boleto.”
Las empresas deben financiar la operación mientras esperan los pagos: “Cobramos un anticipo y recién a fin de año los saldos. Es muy difícil sostenerse así.”
Pandemia, digitalización y caída estructural de la demanda
El impacto de 2020 y el cambio cultural
El golpe más severo en la historia reciente fue la pandemia: “Para nosotros fueron 9 o 10 meses sin actividad, sin ingresos, pero todos los gastos seguían”.
El cierre prolongado modificó para siempre los patrones de movilidad. “La pandemia digitalizó todo… la gente dejó de ir personalmente a hacer trámites, y eso impactó muchísimo en el transporte” .
Muchas líneas aún no se reactivaron: “No pudimos volver a poner en marcha San Antonio–Irigoyen… era muy usada por estudiantes, pero no se sostiene con los costos actuales”.
Turismo y regulaciones: el golpe silencioso del “Protocolo de Viajes Seguros”
Uno de los segmentos que compensaba los ingresos regulados era el turismo escolar y recreativo. Ese flujo también cayó tras la implementación del nuevo protocolo provincial: “Hoy un viaje que antes costaba un millón, cuesta cuatro millones y medio”.
Las escuelas dejaron de contratar viajes cortos: “Ese protocolo es incumplible… trajo una merma impresionante en los viajes”.
El efecto colateral alcanzó a todo el ecosistema turístico: “Afectó a las escuelas, a las empresas de transporte y también a los puntos turísticos como el zoológico o los balnearios”.
Competencia y concentración: un mercado asimétrico
El mapa actual del transporte interurbano muestra un fuerte proceso de concentración. “Antes competíamos con empresas similares… hoy tenemos que competir contra Crucero del Norte y Río Uruguay”.
La metáfora que eligió Fernando es elocuente: “Es como pelear con una espada de madera contra muchas amenazas.”
La estrategia de Kruse S.A. es simple y humana: “Competimos con amabilidad, responsabilidad y trato personal. Eso nos identifica.”
Qué necesitaría el sector para ser sostenible
Cuando le preguntaron cuál sería “la bala de plata” que resolvería el problema estructural del transporte, Fernando fue directo: “Que nos quiten todo tipo de regulaciones de precios y trabajar con costos reales.”
Y aclara: “Sé que es difícil, pero si la gente tuviera el dinero para pagar lo que vale el servicio, todo mejoraría.”
Un sector que necesita reglas claras
La entrevista con Fernando Kruse expone un diagnóstico de alto valor institucional: El transporte interurbano de Misiones es estructuralmente deficitario bajo el esquema actual.
Enfrenta costos variables dolarizados, tarifas fijas, compensaciones atrasadas y regulaciones superpuestas. La pandemia y la digitalización provocaron una caída permanente de pasajeros.Los protocolos turísticos y la concentración empresarial profundizan la fragilidad de las firmas locales.
Aun así, Kruse S.A., con 84 años de historia, continúa operando entre Montecarlo, Puerto Piray, Eldorado y Posadas, sosteniendo un servicio esencial para miles de usuarios.
“Trabajamos todos los días para mejorar. El apellido va en el costado del colectivo y cada rasponcito es como si fuera nuestro.”


