La Municipalidad de Fachinal negó haber clausurado la Rural, pero revisará la tasa sobre remates
La Sociedad Rural de Misiones anunció que suspendió las actividades en su predio tras el intento del municipio de Fachinal de aplicar una tasa del 1% a las operaciones de remate. El Ejecutivo local negó haber clausurado el predio y afirmó que sólo dio de baja una habilitación irregular. La disputa será tratada en audiencia ante el Ministerio del Agro.
El presidente de la Sociedad Rural de Misiones (SRM), Matías Pamberger, anunció la suspensión de los remates ganaderos y eventos en el predio ubicado en Fachinal, tras una decisión del Concejo Deliberante y el intendente Miguel Ángel Benítez, que dispusieron el cobro de una tasa del 1% al vendedor y 1% al comprador en cada remate.
“Nosotros dijimos que eso no está bien y que no lo íbamos a implementar. Nos acaban de clausurar el predio”, expresó Pamberger en un comunicado dirigido a los productores. Según el dirigente, la medida no solo afecta a la Sociedad Rural, sino a “todas las fiestas patronales y eventos que se realicen en el municipio”, como la Fiesta del Cordero o las jineteadas, que deberían pagar el nuevo gravamen.
La entidad rural consideró que el impuesto es “inviable” para los productores, que ya enfrentan altos costos logísticos y financieros para participar en los remates. “El productor tiene mucho costo como para que le cobren un uno por ciento más”, señaló Pamberger.
La SRM decidió entonces inhabilitar temporalmente el predio y suspender los eventos previstos hasta que el municipio revise la normativa. Sin embargo, tras gestiones ante autoridades provinciales, el dirigente confirmó a Economis que el conflicto “entró en vías de solución” y que el próximo lunes habrá una audiencia en el Ministerio del Agro para resolver las diferencias con el intendente.
La versión oficial del municipio: “No hubo clausura, sino una baja administrativa”
En respuesta al reclamo, la Municipalidad de Fachinal difundió un comunicado oficial en el que desmintió categóricamente haber clausurado el predio de la Sociedad Rural. Según el texto firmado por el intendente Miguel Ángel Benítez, lo que se dispuso fue la baja de una habilitación comercial preexistente, debido a incumplimientos formales y errores en el expediente.
“El permiso se tramitó bajo el rubro de ‘comercio’, que no contempla la organización de eventos masivos”, explicó el Ejecutivo, que además detectó errores en la dirección y datos catastrales de la solicitud original. La administración local argumentó que la medida busca regularizar la situación de las ferias y exposiciones bajo un nuevo esquema de habilitaciones eventuales, con el fin de garantizar la seguridad pública y la correcta tributación.
En paralelo, el municipio reconoció la necesidad de revisar la ordenanza fiscal y tarifaria vigente, por lo que envió al Honorable Concejo Deliberante (HCD) un pedido de anulación de la Ordenanza N° 11/25, con el objetivo de corregir los puntos “ambiguos” del texto que habilitaba el cobro de la tasa del 1%.
“Esta medida no es una traba burocrática, sino una respuesta a las necesidades del contribuyente”, señaló el comunicado, subrayando que la regularización permitirá a la SRM “tramitar sus permisos provinciales y nacionales con la documentación municipal correcta”.

Instancia de diálogo y revisión de la ordenanza
El enfrentamiento se encamina ahora a una resolución institucional. Según explicó Pamberger, tras una “audiencia acalorada” con el Ejecutivo, el gobierno provincial intervino para destrabar la situación. “Nos llamaron desde el Gobierno y nos dijeron que se solucionó todo, que sigamos adelante con el remate del 5 de noviembre para la comisión de los bufaleros”, confirmó.
Además, el dirigente anticipó que el jueves próximo el Concejo Deliberante de Fachinal tratará una marcha atrás en la tasa del 1%, que podría dejar sin efecto el tributo y permitir la reanudación de las actividades rurales.
Mientras tanto, la Sociedad Rural mantiene suspendidas las actividades en su predio hasta que se concrete la modificación normativa. “Si no se elimina el impuesto, el predio seguirá deshabilitado y no se harán más remates ni exposiciones”, advirtió Pamberger.
La controversia puso en evidencia la falta de un marco regulatorio actualizado para los eventos rurales, así como la tensión entre la necesidad de los municipios de recaudar y la de las entidades agropecuarias de mantener condiciones competitivas.
